jueves, 1 de diciembre de 2016

DICIEMBRE 2016

                   PAPÁ NOEL VERSUS JESÚS

El tiempo sigue transcurriendo cada vez más rápidamente, una vez más nos encontramos ya de nuevo con el final del año, y con el hermoso mes de Diciembre; época que nos trae muchos recuerdos buenos, y también algunos tristes del pasado; con sueños, triunfos, ilusiones y también frustraciones; en medio de un poco de bulla tumultos y una invitación a la alegría. El brillo de las decoraciones resplandecientes, el sonido de gozosos villancicos de Navidad, los niños felices y los alegres deseos de una “Feliz Navidad”, dan la impresión de que el mundo está contento de que Jesús haya venido a nuestro planeta. Pero eso realmente no es cierto, no lo es hoy y nunca lo fue.
Las noticias  del nacimiento de Cristo han evocado una reacción diferente. Por ejemplo los Magos venidos de Oriente le dieron una cálida bienvenida y le adoraron con gozo (Mateo 2,10-11), pero el rey Herodes se sintió perturbado, envidioso cuando escucho hablar de Él y trató de encontrar y matar al Niño Jesús (Mateo 3,4-16). Sin embargo, la multitud del pueblo, que era la gran mayoría de la gente,  no conocía la importancia de lo que había sucedido. Incluso hoy también, las multitudes se reúnen para honrar a Jesús y se regocijan en su salvación, muchos hacen el pesebre y rezan la novena, pero no conocen, no han experimentado verdaderamente al Salvador. Otros se quejan de los cánticos navideños que se escuchan en los centros comerciales y de la exhibición de imágenes del nacimiento del Señor en lugares públicos,  en cambio otros son apáticos, se limitan a seguir la corriente de la celebración o de la temporada por un compromiso social. Tal vez canten villancicos de Navidad pero nunca se preguntan quién es Jesús y para qué vino. No piensan en su necesidad de creer en Él y recibirlo como salvador.
¿En qué grupo estás tú y tu familia? ¿Estás tú entre los indiferentes? Ignorar a Cristo y sus afirmaciones es rechazarle. La Navidad siempre nos exige una decisión acerca de Cristo. Lo acepto y me comprometo con su propuesta de vida o lo rechazo definitivamente: “Si en  esta Navidad haces lugar para Cristo en tu corazón, Él desde ya hará para ti un lugar en el cielo”.

Es inevitable relacionar esta fecha de Navidad con el personaje tan simpático y alegre, con barba blanca, y  una gran barriga roja y su característico: “Jo,Jo,Jo”: Papa Noel. Este es el personaje más esperado por niños y grandes en la Navidad. ¿Pero realmente es Papá Noel lo que necesitamos?
En aquel pesebre de la primera Navidad Dios envió al mundo, lo que la mujer y el hombre realmente necesitaban,  porque Él conocía y conoce a todas sus criaturas, y quien nació en Belén no fue Papá Noel, sino un niño humilde que era el Niño Dios. Qué triste que los seres humanos hayamos sustituido al Dios Eterno hecho hombre, único e indispensable para nuestras vidas, por un místico personaje de dudosos comienzos o certeza en su historia. No hay ni punto de comparación entre estos dos personajes. Papá Noel vive en el Polo Norte, mientras Jesús está en todas partes. Papá Noel pasea en trineo, Jesús camina contigo. Papá Noel viene una vez al año, Jesús siempre está a tú lado. Papá Noel tiene que preguntarte: “¿Cómo te llamas?”, mientras que Jesús sabe tu nombre desde antes que nacieras, conoce tu pasado y tu futuro. Papá Noel reboza de salud, si, pero tiene su barriga llena de algodón, Jesús es delgado, hasta parece débil pero tiene su corazón lleno de amor. Papá Noel se ríe “Jo, Jo, Jo”, mientras Jesús sabe que a veces la risa no es lo que necesitas, sino ayuda, escucha, consuelo y esperanza. Los ayudantes de Papá Noel hacen juguetes (sociedad de consumo), mientras que Jesús hace nuevas todas las cosas, hasta tu vida. Jesús repara corazones y arregla hogares destrozados. Papá Noel te hace reír, Jesús te puede hacer volver a vivir. Si te portas bien, puede ser que Papá Noel te deje un regalo a los pies del árbol, Jesús sin importar como te comportes, hizo el regalo de su propia vida la cual ofrendó por ti a los pies de la cruz.

Por eso la invitación en esta Navidad es a renunciar a Papá Noel, a dejarlo a los comerciantes, pero nosotros los creyentes más bien disfrutemos el regalo de Dios, que es Cristo Jesús; apropiémonos de Él y de todas sus promesas de bendición; alegrémonos, gocémonos y celebremos a Jesús en lugar de festejar a Papá Noel.

“¿QUÉ PREFIERES EN ESTA NAVIDAD, REGALOS NUEVOS O UNA VIDA NUEVA?”

La Navidad es precedida por un tiempo de cuatro semanas llamado Adviento, que es como un camino de preparación para vivir en plenitud el gran acontecimiento que es la Navidad.
Podíamos resumir el objetivo del Adviento en tres acciones:
-          PREPARACIÓN
-          NUTRICIÓN
-          CONVERSIÓN

Estas acciones me llevan a vivir el significado concreto de la Navidad, que también lo vamos a resumir en tres acciones:
-          AMOR
-          RECONCILIACIÓN
-          MISIÓN

Damos gracias al Buen Dios, que en Jesús se ha encarnado, ha venido a la tierra y definitivamente se ha quedado con nosotros en Jesucristo el Señor.
Pensamos, deseamos  y hablamos para todos ustedes en esta nueva Navidad la mejor y más grande bendición para sus vidas y todas sus familias y proyectos para el nuevo año venidero.

Bendiciones en Cristo Jesús, la Navidad siempre presente. 

Roberto Zamudio


PROMESA BÍBLICA DEL MES

Hoy nos ha nacido en Belén, un Salvador, que es Cristo Jesús el Señor. 
Lucas 2,11

DÉCIMO SEGUNDO FRUTO DE LA 

MISERICORDIA:

“MISIÓN Y SERVICIO”

Misión y servicio, dos acciones tan dicientes e importantes para el quehacer de las personas seguidoras de Jesús y su propuesta de amor que se entrega por el bien del prójimo, para vivir el Reino del amor.
Comencemos por conocer que las palabras "misión" y "misionero" están entre las más repetidas y consagradas en nuestro vocabulario cristiano.  Se dice frecuentemente que "misión" significa llevar las buenas nuevas a otras culturas y naciones, en contraste con "la evangelización" entre quienes son de nuestra propia cultura y nación. Misión, así entendida, es por definición "trans-cultural", y "misionero" es alguien que va a otro país (antes en barco, ahora por avión), aprende otro idioma (el cual probablemente pronuncia mal), y realiza su ministerio en una cultura que no es la suya. Sin embargo, si buscamos los vocablos "misión" y "misionero" en nuestra concordancia, nos encontraremos una gran sorpresa: ¡ninguno de los dos términos son palabras bíblicas!  La única "misión" en toda la Biblia es la de Saúl, que consistía en matar a todos los amalecitas (1 Sam 15.18,20).  Aparte de ese pasaje, ni "misión" ni "misionero" aparece en todas las Escrituras.
El verbo Enviar
El lenguaje bíblico para nuestro tema parte más bien del verbo "enviar" y se utiliza para toda clase de tarea a la que Dios envía a sus siervos y siervas. El judaísmo tardío llamaba Shaliach al "enviado" (misionero, que en griego se traducía apóstolos).  En terminología estrictamente bíblica, deberíamos hablar del misionero como "enviado" y de la misión como "envío" o "apostolado". Con eso comenzaríamos a comprender que "la misión" es integral y mucho más amplia que aquello que hemos entendido como "misiones foráneas" o trans-culturales. Sorprendentemente, un análisis lingüístico del conjunto semántico de "enviar/enviado/envío", única terminología para la "misión" en el AT, muestra que nunca se usa en nuestro sentido moderno de ir a otros países a convertir a los extranjeros.
Es decir la misión o envío se hace aquí y ahora, donde nos encontremos, es integral y dirigida al mismo pueblo de Dios, sin excluir el ir a las naciones. El principal enviado por el padre fue el Señor Jesucristo quien a su vez envía a sus discípulos y discípulas para continuar su obra de proclamar el Reino de Dios desde el cambio interior, para hacer justicia y servicio al prójimo, sobre todo al más necesitado...
Veamos el sentido de la palabra servicio. Esta adopta dos significados opuestos en la Biblia, según designe la sumisión del hombre a Dios o la sujeción del hombre por el hombre bajo la forma de esclavitud. La historia de la salvación enseña que la liberación del hombre depende de su sumisión a Dios y que «servir a Dios es reinar», no ser esclavo (Bendición de los ramos).
Servir a Dios sirviendo a las personas
Jesús utiliza los términos de la ley y de los profetas para recordar que el servicio de Dios excluye cualquier otro culto y que en razón del amor que lo inspira debe ser integral. Puntualiza el nombre del rival que puede poner obstáculo a su servicio: el dinero, cuyo servicio hace al hombre injusto y cuyo amor dirá el Apóstol, haciendo eco del Maestro, que es un culto idolátrico. Es preciso escoger: “No se puede servir a dos señores ….No podéis  servir a Dios y al dinero”. Si se ama a uno, se odiará y se despreciará al otro. Por eso la renuncia a las riquezas es necesaria para quien quiera  seguir a Jesús, que es el siervo de Dios.
 El servicio de Jesús.
El Hijo muy amado, enviado por Dios para coronar la obra  de los servidores del antiguo testamento, viene a servir. Desde su infancia afirma que le reclaman los asuntos de su Padre. El desarrollo de su vida entera está bajo el signo de un «hay que», que expresa su necesaria dependencia de la voluntad del Padre; pero tras esta necesidad del servicio que lo lleva a la cruz revela Jesús el amor, único que le da su dignidad y su valor: «Es preciso que el mundo sepa que amo a mi Padre y que obro como me lo ha ordenado el Padre» (Jn 14,30). Sirviendo a Dios salva Jesús a los hombres reparando así su negativa de servir, y les revela cómo quiere ser servido el Padre: quiere que se consuman en el servicio de sus hermanos como Jesús mismo lo hizo, Jesús que es su señor y su maestro: «El Hijo del hombre no vino para ser servido, sino para servir y dar su vida» (Mc 10,45); «Yo os he dado ejemplo... El servidor no es mayor que el amo» (Jn 13,15 y siguientes); «Yo estoy en medio de vosotros como el que sirve» (Lv 22,27).
 La grandeza del servicio cristiano.
Las servidoras y los servidores de Cristo son en primer lugar los servidores de la Palabra, los enviados a anunciar el evangelio cumpliendo así un servicio sagrado, con toda humildad, y si es preciso “en lágrimas y en medio de las pruebas. En cuanto a los que sirven a la comunidad, como lo hacen en particular los diáconos, Pablo les enseña en qué condiciones  este servicio será digno del Señor. Cristianas y cristianos que ha aceptado a Dios en su corazón y sus vidas, han pasado del servicio del pecado y de la ley, que era esclavitud, al servicio de la justicia y de Cristo, que es la libertad. Se sirve  a Dios como hijos y no como esclavos, pues sirven en la novedad del Espíritu (Rom 7,6). La gracia, que los hizo pasar de la condición de servidores a la de amigos de Jesucristo, les da poder  servir tan fielmente a su Señor que están ciertos de participar en su gozo. 
Oración
Es  desde esta actitud que podemos sentirnos cristianos y cristianas  efectivos. No basta solo con orar y alabar, es necesario actúa. Por eso me gusta esta frase, que en algún momento de nuestro caminar comunitario nos llevo a reflexionar “La fe sin acción no Sirve”. Podemos tener grandes jornadas, participar en todos los encuentros espirituales, vigilias y demás, pero si esto no nos fortalece para el trabajo, el servicio y la toma de decisiones, no estamos respondiendo al modelo de Jesús, para ser efectivos en el envío y el servicio a nuestro prójimo.

Nos cabe ahora, luego de este compartir, reflexionar acerca de:
Ø  ¿Cómo estamos llevando la misión (envío) y servicio tanto personal como comunitariamente desde nuestras realidades de vida?
Ø  ¿Qué importancia tendrá orar los unos por los otros para ejercer el gran envío, cubiertos por la  comunidad?
Ø  Por qué será mejor ir de dos en dos?  .
Ø  Qué claves para nuestra oración nos deja estos dos frutos de la misericordia?

Algunas referencias bíblicas que nos ayudaran a interiorizar y continuar aprendiendo para la acción.
Is. 43.10-12,
Is. 42.6; 49 
Mt.4,10. 9,13
Mt. 16,21
Mt. 21,33
Lucas 1, 46-56



ORACIÓN AL COMENZAR EL DÍA
Inició de tu mano, Señor Jesús este día y último mes del año, te doy gracias, te alabo y te bendigo por todos los signos de amor misericordioso que se derraman en mi vida y en los míos. Gracias Señor por este nuevo mes y año que ya casi finaliza. Navidad es tiempo de reconciliación, por eso vengo a ti arrepentido, reconozco mi pecado, los errores que cometí este año y de todo corazón te pido perdón. Muéstrame tu misericordia a mí y a mi familia. Ven a todos nosotros y haznos nacer de la vida nueva de tu Espíritu. Escoge  hoy nuestro corazón,  como tú casa, tu nuevo pesebre dónde vas  a nacer y vas a morar. Por la acción de tu Espíritu infunde en mí y en los demás, sabiduría, fortaleza, paz y esperanza en medio de cualquier adversidad que estemos enfrentando. Inunda mi ser con el don de la paciencia, la comprensión y tolerancia y una generosidad sin límites, regálame en este nuevo Diciembre el fruto de la misericordia que es el servicio incondicional a los demás. Libérame de todo signo de egoísmo, vanidad, soberbia, que me roban tu paz. Que brille en mí la alegría de tu Espíritu. Hoy y siempre seas Bendito, Dulce Niño que en tu nacimiento nos enseñas como ser hombres y mujeres, familias y comunidades verdaderamente libres y felices según la voluntad del Padre Dios. Amén.

ORACIÓN AL FINALIZAR EL DÍA

Dios de la Vida, Dios de la Eterna Navidad, al concluir este día, quizás en medio de mis cansancios o sinsabores, me atrevo a silenciar un poco mi vida, para en lo profundo de mi ser contemplarte con ternura y gozo, mi Dios, mi Salvador y mi todo; ahora que me preparo para ir al descanso, te pido que tu amor me inunde y que a través de tu bendición se dé un abrazo, tu abrazo, que me llena, me anima, me conforta y me hace sentir que en medio de la dificultad tú estás conmigo. Que a esta hora tu Espíritu de amor produzca en mi paz, alegría y esperanza; a través de este descanso, tu bendición continúe liberando y restaurando mi vida, dándome desde ya nuevas fuerzas y motivos para emprender la jornada del día de mañana. Gracias y bendito seas por todo lo vivido y compartido en este día y sobre todo en este año que casi termina. Gracias por este instrumento de bendición que tú me has regalado que es el “Día con la Palabra” gracias por todas las personas que hacen posible que mes tras mes nos llegue esta cartillita, que tanto nos edifica. Bendíceles y síguelas utilizando como medio de encuentro, conocimiento contigo y servicio a los demás. Gracias por todos los proyectos y sueños que se han hecho realidad en este año. Gracias también por aquellas tareas que aún quedan pendientes, dame  la insistencia y valentía para seguir en busca de la realización de esos proyectos. No ceses de inundarme con tu Espíritu de servicio, de misión a favor de nuestros hermanos. Te amo, mi Buen Señor Jesús, creo, confió y espero en ti. Gracias porque sé que en este momento a través de esta oración me escuchas. Amén.                                       

Jueves 01 de Diciembre de 2016


“DIOS PROTEGE NUESTRA VIDA”

PRIMERA LECTURA
ISAÍAS 26,1-6

“Que entre un pueblo justo, que observa la lealtad”

Aquel día, se cantará este canto en el país de Judá: "Tenemos una ciudad fuerte, ha puesto para salvarla murallas y baluartes: Abrid las puertas para que entre un pueblo justo, que observa la lealtad; su ánimo está firme y mantiene la paz, porque confía en ti. Confiad siempre en el Señor, porque el Señor es la Roca perpetua: doblegó a los habitantes de la altura y a la ciudad elevada; la humilló, la humilló hasta el suelo, la arrojó al polvo, y la pisan los pies, los pies del humilde, las pisadas de los pobres."  Palabra de Dios.

REFLEXIÓN

Poco a poco vamos entrando en el espíritu del Adviento. Hoy el tema es la firmeza: Dios anuncia firmeza, Cristo muestra el camino de una vida de sólidos cimientos. La Biblia nos enseña consecuentemente que la firmeza está ligada a la confianza. Puesto que nadie lo puede todo por sí mismo, su firmeza depende en el fondo de quiénes son sus aliados y cuáles son sus alianzas. El mensaje es: "si haces alianza con el más fuerte, puedes confiar y mirar al futuro con paz, porque tu vida será firme". El Señor Dios recibe así un elogio singular Él es la "Roca perpetua".
En contraste con la ciudad que se edifica sobre esta Roca, está la ciudad encumbrada, la ciudad altiva, más que referirse a un lugar en el mapa, el profeta esta describiendo simbólicamente el destino de la soberbia humana, que nada puede esperar sino su estruendosa caída.
Retomando las palabras del profeta, hay júbilo en sus palabras. Ha encontrado firmeza. La ciudad edificada sobre la Roca, es fuerte, está guarnecida por Dios. Es una experiencia grata que tiene su plenitud en aquel que no cambia, porque es Roca Perpetua. Volver a Dios que no cambia; volver a Dios y saber que él siempre está ahí, que su amor es indeclinable y que su misericordia no conoce ocaso.


SALMO RESPONSORIAL: 117
R. / Bendito el que viene en nombre del Señor.

Dad gracias al Señor porque es bueno,
porque es eterna su misericordia.
Mejor es refugiarse en el Señor
que fiarse de los hombres,
mejor es refugiarse en el Señor
que fiarse de los jefes. R.

Abridme las puertas del triunfo,
 y entraré para dar gracias al Señor.
Ésta es la puerta del Señor:
los vencedores entrarán por ella.
Te doy gracias porque me escuchaste
y fuiste mi salvación. R.

Señor, danos la salvación;
Señor, danos prosperidad.
Bendito el que viene en nombre del Señor,
os bendecimos desde la casa del Señor;
el Señor es Dios, él nos ilumina. R.

OREMOS CON EL SALMO
Este salmo es una celebración de acción de gracias, el salmista da gracias a Dios por haberle dado la victoria sobre sus enemigos. El Nuevo Testamento  aplica partes de este salmo  a Cristo y la celebración cristiana lo refiere a la gran victoria de Jesucristo sobre la muerte al resucitar, demostrando su poder y trayendo alegría al mundo entero. 
LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 7,21.24-27

“El que cumple la voluntad del Padre entrará en el reino de los cielos”

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "No todo el que me dice "Señor, Señor" entrará en el reino de los cielos, sino el que cumple la voluntad de mi Padre que está en el cielo.

El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió, porque estaba cimentada sobre roca. El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y rompieron contra la casa, y se hundió totalmente." Palabra del Señor.


REFLEXIÓN:

Las Palabras del Señor son la roca firme sobre la cual podemos fundamentar nuestra existencia, pero esos valores que nos propone el evangelio hay que hacerlos realidad, de lo contrario seremos como aquellos que dicen ¡Señor, Señor¡ pero cuya vida no es coherente con la imagen externa que proyectan. No todo el que dice que cree y alaba al Señor lo hace con sinceridad, a esos el Señor les dirá: “No los conozco”, ojalá que nosotros no lleguemos a escuchar tan duras y determinantes palabras. Muchas situaciones de la vida pueden dañar la relación con Dios y destruir nuestra existencia, pero si nos mantenemos fieles a la Palabra de Dios, no habrá vientos, por impetuosos que sean capaces de arrastrarnos a las falsas ideologías.
Construimos sobre arena cuando sobreponemos a la dignidad de nuestros hermanos y a la nuestra,  ideologías, proyectos, normas, deseos, ambiciones que rebajan la imagen de Dios en nosotros. Muchas veces, animados por un sistema que nos impulsa a proceder de acuerdo a las leyes de la oferta y la demanda ponemos nuestra confianza en la seguridad de las cosas, en la supuesta garantía de nuestros planes pero todo esto se verá abatido por las tempestades que despierta el mismo sistema, para la muestra, tan sólo veamos la crisis de la economía mundial de la que muchos países todavía no se reponen.
La casa, como el árbol está vinculada al suelo, pero también se eleva a lo alto, nos recuerda nuestro lugar en el universo y, así mismo hacia donde tendemos a ir en el futuro. Una base firme o débil y un determinado orden en nuestra casa son el reflejo de lo que somos por dentro. Casa en el evangelio es signo de familia y comunidad. Lo contrario al templo, la casa es el proyecto de vida en el Reino de Dios traído por Jesús.
Construir nuestra casa o en roca o en la arena. Construir en la roca es construir en la coherencia de vida, que se logra si permitimos que la voluntad de Dios hable a nuestra realidad, entre en ella y la transforme.

ORACIÓN
Amado Dios, de corazón anhelamos escuchar tu Palabra y ponerla en práctica, ser fieles a ti, pero necesitamos refugiarnos más en ti, que nos cubras para no dejarnos desviar del camino. Por favor que tu Espíritu nos lleve por senderos de luz, nos mantenga despiertos  para que las atracciones de estos tiempos no nos aparten de tu presencia, compañía y voluntad. Amén.


“La única manera de construir la vida sobre bases firmes es cumplir la voluntad de Dios”

Viernes 02 de Diciembre de 2016


“EL LLEGARÁ PARA LIBERAR”


PRIMERA LECTURA
ISAÍAS 29,17-24

“Aquel día, verán los ojos de los ciegos”

Así dice el Señor: "Pronto, muy pronto, el Líbano se convertirá en vergel, el vergel parecerá un bosque; aquel día, oirán los sordos las palabras del libro; sin tinieblas ni oscuridad verán los ojos de los ciegos. Los oprimidos volverán a alegrarse con el Señor, y los más pobres gozarán con el Santo de Israel; porque se acabó el opresor, terminó el cínico; y serán aniquilados los despiertos para el mal, los que van a coger a otro en el hablar y, con trampas, al que defiende en el tribunal, y por nada hunden al inocente." Así dice a la casa de Jacob el Señor, que rescató a Abrahán: "Ya no se avergonzará Jacob, ya no se sonrojará su cara, pues, cuando vea mis acciones en medio de él, santificará mi nombre, santificará al Santo de Jacob y temerá al Dios de Israel. Los que habían perdido la cabeza comprenderán, y los que protestaban aprenderán la enseñanza." Palabra de Dios.

REFLEXIÓN
Es interesante recordar la etimología de la palabra "enfermedad". El enfermo es el "in-firmus", el que no está firme, el que tambalea. Y así sucede: la enfermedad nos quebranta, es decir: nos quiebra. Por ello los milagros de curación física tienen una fuerza persuasiva particular, pues no sólo se trata del bien de la salud sino de devolver "firmeza" al que decaía y se derrumbaba. El Dios que se muestra capaz de vencer a la enfermedad es el Dios que así se revela capaz de devolver a su vigor y firmeza la obra que Él mismo ha creado. Las lecturas de ayer nos hablaban de la firmeza que sólo Dios concede; hoy nos hablan de la fortaleza que sólo Él restaura.
Es interesante destacar en la primera lectura que la salud tiene un propósito, según vemos. Por ejemplo, los sordos no recuperan simplemente la capacidad de oír, esto es, de oír cualquier cosa, sino que recuperan el oído para oír la Palabra del Señor. La salud recobrada, pues, no es sólo un bien que Dios da, sino un camino que abre para que a través de sus dones le conozcamos a Él mismo

SALMO RESPONSORIAL: 26
R. /  El Señor es mi luz y mi salvación.

El Señor es mi luz y mi salvación,
¿a quién temeré?
El Señor es la defensa de mi vida,
¿Quién me hará temblar? R.

Una cosa pido al Señor,
eso buscaré:
habitar en la casa del Señor
por los días de mi vida;
gozar de la dulzura del Señor,
contemplando su templo. R.

Espero gozar de la dicha del Señor
en el país de la vida.
Espera en el Señor, sé valiente,
ten ánimo, espera en el Señor. R.

OREMOS CON EL SALMO
En este Salmo vemos como la presencia de Dios en el templo es fuente de atracción constante y de alegría confiada. La presencia de Dios entre los seres humanos se hace definitiva a través de su Hijo Jesucristo, quien es la luz que ilumina a cada persona. Él puso su morada entre nosotros para hacernos participar de su vida.

LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 9,27-31

“Jesús cura a dos ciegos que creen en él”

En aquel tiempo, dos ciegos seguían a Jesús, gritando: "Ten compasión de nosotros, Hijo de David." Al llegar a la casa se le acercaron los ciegos, y Jesús les dijo: "¿Creéis que puedo hacerlo?" Contestaron: "Sí, Señor." Entonces les tocó los ojos, diciendo: "Que os suceda conforme a vuestra fe." Y se les abrieron los ojos. Jesús les ordenó severamente: "¡Cuidado con que lo sepa alguien!" Pero ellos, al salir, hablaron de él por toda la comarca.  Palabra del Señor.

REFLEXIÓN:

Como en tiempos del éxodo, el grito de los pobres siempre es escuchado por Dios. El diálogo entre Jesús y los dos ciegos gira en torno a creer o no en el poder de la Palabra. La respuesta de los ciegos, expresa una fe certera, sin ambigüedades, permite que la Palabra de Jesús se concrete en una acción sanadora. La fe y la Palabra de Jesús son auténticas claves de vida cristiana. Dicho de otra manera, es la fe de los ciegos la que realmente hace el milagro, Jesús solo bendice con sus dedos la fe de estos hombres para rescatarlos de las tinieblas físicas y de la exclusión social y cultural. “Dar vista a los ciegos era uno de los signos de la salvación definitiva, anunciada por los profetas, como símbolo de la liberación de la tiranía. La ceguera espiritual del mundo de hoy, manifestada en el pecado social creciente, toca las puertas de la casa de Jesús y espera de nosotros, palabras y acciones que devuelvan la luz y la esperanza a los que nos rodean, a toda la humanidad. El milagro de recobrar la vista para ver el amor de Dios manifestado en los hermanos dependerá de nuestra fe, de nuestro testimonio de vida y de nuestras obras. 


 ORACIÓN
Señor, ¡Cuán grandes son tus obras frente a nuestras necesidades y limitaciones, cuando ves que tenemos la certeza de tu actuar en nuestra vida! Ayúdanos a que seamos muchos y muchas quienes al adherirnos a ti, gocemos de esas respuestas de amor desde tu perfecta voluntad. Amén  


“Demos una mirada limpia y llena de fe”

Sábado 03 de Diciembre de 2016


“NUESTRAS LÁGRIMAS CONMUEVEN A DIOS”

PRIMERA LECTURA
ISAÍAS 30,19-21.23-26

“Se apiadará a la voz de tu gemido”
Así dice el Señor, el Santo de Israel: "Pueblo de Sión, que habitas en Jerusalén, no tendrás que llorar, porque se apiadará a la voz de tu gemido: apenas te oiga, te responderá. Aunque el Señor te dé el pan medido y el agua tasada, ya no se esconderá tu Maestro, tus ojos verán a tu Maestro. Si te desvías a la derecha o a la izquierda, tus oídos oirán una palabra a la espalda: "Éste es el camino, camina por él." Te dará lluvia para la semilla que siembras en el campo, y el grano de la cosecha del campo será rico y sustancioso; aquel día, tus ganados pastarán en anchas praderas; los bueyes y asnos que trabajan en el campo comerán forraje fermentado, aventado con bieldo y horquilla. En todo monte elevado, en toda colina alta, habrá ríos y cauces de agua el día de la gran matanza, cuando caigan las torres. La luz de la Cándida será como la luz del Ardiente, y la luz del Ardiente será siete veces mayor, cuando el Señor vende la herida de su pueblo y cure la llaga de su golpe." Palabra de Dios.
REFLEXIÓN

Si hay una noticia consoladora es aquella que hoy nos regala el profeta: Dios ya no se esconde. Se deja sentir y atiende las súplicas. Dulce noticia, porque si hay algo angustiante y torturante es el silencio de Dios. La luz crece de tal modo que la luna se equipara al sol mientras el sol adquiere el brillo perfecto. El profeta nos asegura que nuestro Dios es un Dios cercano, que nos escucha y que nos conoce por nuestro nombre: “Apenas te oiga, te responderá” Si andamos desorientados, oiremos muy cerca su voz que nos dice: “Ese es el camino, caminad por él”. El mismo Dios que acoge las súplicas deja escuchar su voz y muestra el camino correcto. Esto debe ser destacado, porque a veces nos gusta que el Señor se haga presente para atender nuestra voz pero luego no nos interesa que esté cerca para que atendamos su voz y no estamos dispuestos a obedecerle.

El profeta también nos dice que si estamos, heridos, o nuestros corazones están destrozados, Él vendará nuestras heridas y reconstruirá lo que estaba destruido. El profeta tiene permiso para soñar. Habla de un pueblo destrozado política y religiosamente. A los pobres y a los afligidos dirige su palabra de ánimo, para anunciarles que Dios no lo olvida, que se apiada de ellos, porque es rico en misericordia.   

  

SALMO RESPONSORIAL: 146
R./ Dichosos los que esperan en el Señor.

Alabad al Señor, que la música es buena;
nuestro Dios merece una alabanza armoniosa.
El Señor reconstruye Jerusalén,
reúne a los deportados de Israel. R.

Él sana los corazones destrozados,
venda sus heridas.
Cuenta el número de las estrellas,
a cada una la llama por su nombre. R.

Nuestro Señor es grande y poderoso,
su sabiduría no tiene medida.
El Señor sostiene a los humildes,
humilla hasta el polvo a los malvados. R.

OREMOS CON EL SALMO
Este Salmo es un canto de acción de gracias a Dios por la reconstrucción de Jerusalén y el regreso de los desterrados, y la providencia con que gobierna el universo. La restauración de Jerusalén es anticipo y símbolo de la redención obrada por Dios en Cristo. El sigue presente en medio de su pueblo y le ofrece diariamente pruebas de su amor.


LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 9,35-10,1.6-8

“Al ver a las gentes, se compadecía de ellas”
En aquel tiempo, Jesús recorría todas las ciudades y aldeas, enseñando en sus sinagogas, anunciando el Evangelio del reino y curando todas las enfermedades y todas las dolencias. Al ver a las gentes, se compadecía de ellas, porque estaban extenuadas y abandonadas, como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: "La mies es abundante, pero los trabajadores son pocos; rogad, pues, al Señor de la mies que mande trabajadores a su mies." Y llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad para expulsar espíritus inmundos y curar toda enfermedad y dolencia. A estos doce los envió con estas instrucciones: "Id a las ovejas descarriadas de Israel. Id y proclamad que el reino de los cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos, echad demonios. Lo que habéis recibido gratis, dadlo gratis." Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Con el evangelio de hoy comienza Mateo la sección denominada “instrucción a los doce para la misión”. El texto es al mismo tiempo introducción a la misión, discurso de instrucción y descripción de la penosa situación de maltrato y abandono en que se encuentra el pueblo de Israel. El diagnóstico de Jesús es claro, hay problemas con las ovejas y también con la falta de pastores. Jesús no hace la petición al Padre, recomienda a los discípulos que lo hagan. La intención de Jesús es que los discípulos tomen conciencia de que la responsabilidad por los nuevos misioneros recae sobre ellos. Por ahora, Jesús intensifica el proceso de formación de sus discípulos, señalando cuatro criterios para los misioneros de ayer y de hoy: luchar contra los males del mundo (espíritus inmundos, enfermedades, dolencias, etc.), dar preferencia a los excluidos (ovejas descarriadas), anunciar el evangelio con un enfoque “reinocéntrico” (considerar la Utopía del Reino de Dios como el centro, el absoluto) y aprender a dar con generosidad solidaria lo que hemos recibido como un regalo de Dios. El adviento debe ser un tiempo de motivación para reforzar nuestra formación y nuestro compromiso misionero. ¿Qué estamos haciendo frente a un mundo que camina como ovejas sin pastor?

ORACIÓN
Padre de Bondad, gracias por esta nueva bendición de este día; por ver en los necesitados a los principales destinatarios de tu mensaje y de tu amor. Ayúdanos a que nosotros seamos capaces de obrar siempre con tus mismos sentimientos misericordiosos con los demás. Amén.


“Cuando llores en silencio, recuerda que Dios cuenta cada una de tus lágrimas”

Domingo 04 de Diciembre de 2016


II  Domingo de Adviento

“ES EL TIEMPO DE VOLVER AL SEÑOR”

En este segundo domingo de Adviento estas dos palabras resuenan: justicia y paz. La justicia es el reclamo de Juan Bautista en el evangelio y es la virtud primera del Mesías anunciado por el profeta en la primera lectura. La justicia por fuerza habrá de entrar en conflicto con los que se lucran de la injusticia, pero como fruto de la justicia viene la paz. También la segunda lectura nos habla de paz, en una clave que tiene particular belleza: la armonía.
PRIMERA LECTURA
ISAÍAS 11,1-10

“Sobre Él se posará el Espíritu del Señor”

Aquel día, brotará un renuevo del tronco de Jesé, y de su raíz florecerá un vástago. Sobre Él se posará el  Espíritu del Señor: espíritu de prudencia y sabiduría, espíritu de consejo y valentía, espíritu de ciencia y temor del Señor. Le inspirará el temor del Señor. No juzgará por apariencias ni sentenciará sólo de oídas; juzgará a los pobres con justicia, con rectitud a los desamparados. Herirá al violento con la vara de su boca, y al malvado con el aliento de sus labios. La justicia será cinturón de sus lomos, y la lealtad, cinturón de sus caderas. Habitará el lobo con el cordero, la pantera se tumbará con el cabrito, el novillo y el león pacerán juntos: un muchacho pequeño los pastorea. La vaca pastará con el oso, sus crías se tumbarán juntas; el león comerá paja con el buey. El niño jugará en la hura del áspid, la criatura meterá la mano en el escondrijo de la serpiente. No harán daño ni estrago por todo mi monte santo: porque está lleno el país de ciencia del Señor, como las aguas colman el mar. Aquel día, la raíz de Jesé se erguirá como enseña de los pueblos: la buscarán los gentiles, y será gloriosa su morada.  Palabra de Dios.

REFLEXIÓN
Isaías nos describe un cuadro paradisíaco, de paz completa, más allá de todo sueño. La causa última de esa paz no es ningún pacto entre superpotencias ni tampoco la llegada de un gobierno mundial excepcional. Hay paz porque el país está lleno del conocimiento del Señor. Donde todos conocen a Dios y todos lo reconocen, allí hay paz.  El Mesías será aquel que instaure esta paz maravillosa. Tendrá la verdad y la justicia como distintivos de su reino y se ocupará especialmente de los pequeños y desvalidos.  Tal es entonces el programa que han de seguir nuestros gobernantes si de veras aman la nación: que Dios sea reconocido, que abunde la verdad, se respete la justicia y haya especial cuidado de los pobres. Todo un programa para este tiempo de Adviento.

SALMO RESPONSORIAL: 71
R. / Que en sus días florezca la justicia, y la paz abunde eternamente

Dios mío, confía tu juicio al rey,
tu justicia al hijo de reyes,
para que rija a tu pueblo con justicia,
a tus humildes con rectitud. R.

Que en sus días florezca la justicia
y la paz hasta que falte la luna;
que domine de mar a mar,
del Gran Río al confín de la tierra. R.

Él librará al pobre que clamaba,
al afligido que no tenía protector;
él se apiadará del pobre y del indigente,
y salvará la vida de los pobres. R.

Que su nombre sea eterno,
y su fama dure como el sol:
que él sea la bendición de todos los pueblos,
y lo proclamen dichoso todas las razas de la tierra. R.

OREMOS CON EL SALMO
Oración por el Rey de Israel, en la que se idealiza proféticamente su figura como gobernante que implanta la justicia y la paz. El éxito del Rey asegura la prosperidad para todo el pueblo.
Ya en el judaísmo este salmo fue interpretado mesiánicamente y lo mismo ha hecho la liturgia cristiana. Cristo es el verdadero rey que establece la justicia y la paz, su Reino es universal.

SEGUNDA LECTURA
ROMANOS 15,4-9

“Cristo salva a todos los hombres”
Hermanos: Todas las antiguas Escrituras se escribieron para enseñanza nuestra, de modo que entre nuestra paciencia y el consuelo que dan las Escrituras mantengamos la esperanza. Que Dios, fuente de toda paciencia y consuelo, os conceda estar de acuerdo entre vosotros, según Jesucristo, para que unánimes, a una voz, alabéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo.En una palabra, acogeos mutuamente, como Cristo os acogió para gloria de Dios. Quiero decir con esto que Cristo se hizo servidor de los judíos para probar la fidelidad de Dios, cumpliendo las promesas hechas a los patriarcas; y, por otra parte, acoge a los gentiles para que alaben a Dios por su misericordia. Así dice la Escritura: "Te alabaré en medio de los gentiles y cantaré a tu nombre." Palabra del Señor. 
REFLEXIÓN
Ya seguramente hemos notado que el Adviento está escrito con caracteres de futuro. La palabra misma mira hacia el porvenir, lo que está por llegar. Y quien habla de futuro habla de esperanza, pero ¿cómo alimentar la esperanza? Ese es el tema que leemos hoy en esta segunda lectura. La esperanza se alimenta del testimonio y de la paciencia. El testimonio es el que dan las Escrituras que nos muestran por cuántos caminos diversos ayuda Dios a los suyos. La paciencia es aquí la capacidad de declararnos más fuertes que el presente adverso: cada día que resistes es un día en que has vencido.
Un pueblo con esperanza es un pueblo en armonía. La esperanza nos da armonía porque nos une en la certeza de que sólo aquel que ha de venir puede hacer justicia a nuestra causa y dar a cada quien lo suyo. La armonía nos da esperanza porque unidos en un corazón la plegaria se hace fuerte y la alabanza crece y se fortalece.

LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 3,1-12

“Convertíos, porque está acerca el reino de los cielos”
Por aquel tiempo, Juan Bautista se presentó en el desierto de Judea, predicando: "Convertíos, porque está cerca el reino de los cielos." Éste es el que anunció el profeta Isaías diciendo: "Una voz grita en el desierto: "Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos." Juan llevaba un vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura, y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre. Y acudía a él toda la gente de Jerusalén, de Judea y del valle del Jordán; confesaban sus pecados y él los bautizaba en el Jordán. Al ver que muchos fariseos y saduceos venían a que los bautizara, les dijo: "¡Camada de víboras!, ¿quién os ha enseñado a escapar del castigo inminente? Dad el fruto que pide la conversión. Y no os hagáis ilusiones, pensando: "Abrahán es nuestro padre", pues os digo que Dios es capaz de sacar hijos de Abrahán de estas piedras. Ya toca el hacha la base de los árboles, y el árbol que no da buen fruto será talado y echado al fuego. Yo os bautizo con agua para que os convirtáis; pero el que viene detrás de mí puede más que yo, y no merezco ni llevarle las sandalias. Él os bautizará con Espíritu Santo y fuego. Él tiene el bieldo en la mano: aventará su parva, reunirá su trigo en el granero y quemará la paja en una hoguera que no se apaga." Palabra del Señor. 
REFLEXIÓN
El evangelio de hoy, es un llamado ardiente al arrepentimiento. Juan predica con voz incendiada reclamando conversión. Su mensaje no cayó completamente en el vacío pues los que lo oían "confesaban sus pecados y él los bautizaba en el río." No todos, sin embargo, iban con intención de escuchar al profeta o de buscar la voluntad de Dios. Había también curiosos, fisgones y espías. El texto nos describe el lenguaje agrio que el profeta del desierto tiene para esta clase de gente, que nunca llega a las obras de conversión. Los trata de víboras y les anuncia severos castigos en el fuego que no muere.
Tenemos que entender la seriedad del momento que vivimos. Optar por Dios o rechazarle es la única decisión que marcará toda nuestra eternidad. Y no cabe ser solo espectadores: el que no acepta de corazón su lugar como amigo del Señor se está declarando su enemigo. Por lo demás, aquí hay varias clases de fuego implicadas: el fuego de la predicación profética y el fuego del dolor que nace en nosotros cuando reconocemos que hemos dado la espalda a Dios. Pero estos dos fuegos quedarían en nada sin el tercer y definitivo fuego maravilloso, anunciado por el Bautista: el que viene del Espíritu Santo. Tal será el sello propio del ministerio del Mesías prometido.

ORACIÓN
Gracias Señor de la vida, porque te revelas a los sencillos y humildes. Haz que seamos dóciles a tu voz, abramos nuestros ojos, nuestros oídos y nuestro corazón a tu Palabra, a tú  proyecto liberador, de manera que con nuestro trabajo, ayudemos a que  tu creación se vaya restaurando y nuestros pueblos vivan en armonía y esperanza. Amén

“Llevemos fe y esperanza a los que todavía no conocen a Dios”


Lunes 05 de Diciembre de 2016


“NUESTRO DIOS VIENE Y NOS LIBERARÁ”

PRIMERA LECTURA
ISAÍAS 35,1-10

“Dios viene en persona y os salvará”
El desierto y el yermo se regocijarán, se alegrarán el páramo y la estepa, florecerá como flor de narciso, se alegrará con gozo y alegría. Tiene la gloria del Líbano, la belleza del Carmelo y del Sarón. Ellos verán la gloria del Señor, la belleza de nuestro Dios. Fortaleced las manos débiles, robusteced las rodillas vacilantes, decid a los cobardes de corazón: "Sed fuertes, no temáis. Mirad a vuestro Dios, que trae el desquite; viene en persona, resarcirá y os salvará." Se despegarán los ojos del ciego, los oídos del sordo se abrirán, saltará como un ciervo el cojo, la lengua del mudo cantará. Porque han brotado aguas en el desierto, torrentes en la estepa; el páramo será un estanque, lo reseco, un manantial. En el cubil donde se tumbaban los chacales brotarán cañas y juncos. Lo cruzará una calzada que llamarán Vía Sacra: no pasará por ella el impuro y los inexpertos no se extraviarán. No habrá por allí leones, ni se acercarán las bestias feroces; sino que caminarán los redimidos y volverán por ella los rescatados del Señor. Vendrán a Sión con cánticos: en cabeza, alegría perpetua; siguiéndolos, gozo y alegría. Pena y aflicción se alejarán. Palabra de Dios.
REFLEXIÓN
He aquí que Dios en persona viene y rescata a su pueblo. La noticia no puede ser mayor en su contenido y en su carga de esperanza. Vamos a ver la gloria de Dios, vamos a presenciar su formidable poder y a ver en acción su justicia. Para los judíos este texto significaba algo muy concreto: el tiempo del destierro acabará, y las tierras áridas del camino que nos llevó a Babilonia ahora tendrán que presenciar la hermosa caravana de los rescatados. La "gloria de Dios" no era otra cosa que ese noble espectáculo en que brillaba con la elocuencia de los hechos quién era y es el Dios verdadero.
De allí podemos tomar enseñanza nosotros. Nosotros somos la gloria de Dios; nosotros somos la expresión visible de su poder; nosotros somos la señal de su compasión y de la hondura de su ciencia. Nuestra existencia redimida es un canto al que nos redimió, y por donde vayan nuestros pasos resonará el ritmo del corazón que nos amó hasta el extremo.

SALMO RESPONSORIAL: 84
 R./Nuestro Señor viene y nos salvará.

Voy a escuchar lo que dice el Señor:
"Dios anuncia la paz
a su pueblo y sus amigos."
La salvación está ya cerca de sus fieles,
y la gloria habitará en nuestra tierra. R.

La misericordia y la fidelidad se encuentran,
la justicia y la paz se besan;
la fidelidad brota de la tierra,
y la justicia mira desde el cielo. R.

El Señor nos dará la lluvia,
y nuestra tierra dará su fruto.
La justicia marchará ante él,
la salvación seguirá sus pasos. R.

OREMOS CON EL SALMO
Este salmo refleja que la experiencia del poder salvador de Dios en la historia de Israel, permite al salmista pedir a Dios que continúe y lleve a término esa acción salvadora, que  garantiza al pueblo la paz y la libertad. Esa experiencia se planifica en el acto salvador por excelencia realizado por Dios en la muerte y resurrección de Jesús. La justicia liberadora de Dios ofrece la paz a toda la humanidad.    
LECTURA DEL EVANGELIO
LUCAS 5,17-26

“Hoy hemos visto cosas admirables”
Un día estaba Jesús enseñando, y estaban sentados unos fariseos y maestros de la ley, venidos de todas las aldeas de Galilea, Judea y Jerusalén. Y el poder del Señor lo impulsaba a curar. Llegaron unos hombres que traían en una camilla a un paralítico y trataban de introducirlo para colocarlo delante de él. No encontrando por donde introducirlo, a causa del gentío, subieron a la azotea y, separando las losetas, lo descolgaron con la camilla hasta el centro, delante de Jesús. Él, viendo la fe que tenían, dijo: "Hombre, tus pecados están perdonados." Los escribas y los fariseos se pusieron a pensar: "¿Quién es éste que dice blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados más que Dios?" Pero Jesús, leyendo sus pensamientos, les replicó: "¿Qué pensáis en vuestro interior? ¿Qué es más fácil: decir "tus pecados quedan perdonados", o decir "levántate y anda"? Pues para que veáis que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar pecados -dijo al paralítico-: A ti te lo digo, ponte en pie, toma tu camilla y vete a tu casa." Él, levantándose al punto, a la vista de ellos, tomó la camilla donde estaba tendido y se marchó a su casa dando gloria a Dios. Todos quedaron asombrados, y daban gloria a Dios, diciendo llenos de temor: "Hoy hemos visto cosas admirables." Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
El hombre paralítico guarda silencio durante todo el evangelio. Por experiencia sabe que no cuenta con la comprensión de los fariseos y doctores de la ley. Está a merced de la solidaridad de sus amigos y del amor misericordioso de Jesús. Al llegar donde Jesús, gracias a la solidaridad que rompe montañas y techos, el enfermo, sus amigos y nosotros como lectores, esperaríamos que Jesús lo sanara. Tanto esfuerzo lo merece. Sin embargo, para Jesús la sanación es integral. Lo primero es sanar el espíritu del enfermo. Es necesario que tome conciencia de que los pecados personales y sociales son los que tienen al mundo en estado de parálisis física, mental y espiritual. Solo después de sanar el espíritu Jesús sana las piernas y devuelve la vida al paralítico. Sin una sanación espiritual que cambie la conciencia de las personas, la sanación física será superficial y temporal. No tendremos las armas adecuadas para vencer las tentaciones, y entonces, la parálisis y la camilla volverán a aparecer en nuestra vida. Los fariseos, los doctores de la ley y la mayoría de nosotros preferimos el afán de las cosas, poniendo en un plano secundario el tiempo para trabajar la conciencia y alimentar el espíritu. Un ser humano sin conciencia es un esclavo. Un mundo sin conciencia es una blasfemia.

ORACIÓN
Señor Jesús, necesitamos verdaderamente un cambio interior, queremos ser distintos, queremos renovarnos. Ayúdanos a transformarnos de dentro para afuera por la gracia de tu Espíritu Santo, concédenos la gracia de tener un corazón misericordioso, sensible al dolor y a las necesidades ajenas, siempre por la acción de tu Santo Espíritu. Amén.


“Como seguidores de Jesús, nuestras acciones deben ser siempre inspiradas por el Espíritu del Señor”