jueves, 1 de octubre de 2015

Sábado 31 de Octubre de 2015


“HUMILDAD: LA IDENTIDAD DE LOS CIUDADANOS DEL REINO”

PRIMERA LECTURA
ROMANOS 11,1-2A.11-12.25-29

“Si la reprobación de los judíos es reconciliación del mundo, ¿qué será su reintegración sino un volver de la muerte a la vida?”
Hermanos: ¿Habrá Dios desechado a su pueblo? De ningún modo. También yo soy israelita, descendiente de Abrahán, de la tribu de Benjamín. Dios no ha desechado al pueblo que él eligió. Pregunto ahora: ¿Han caído para no levantarse? Por supuesto que no. Por haber caído ellos, la salvación ha pasado a los gentiles, para dar envidia a Israel. Por otra parte, si su caída es riqueza para el mundo, es decir, si su devaluación es la riqueza de los gentiles, ¿qué será cuando alcancen su pleno valor? Hay aquí una profunda verdad, hermanos, y, para evitar pretensiones entre vosotros, no quiero que la ignoréis: el endurecimiento de una parte de Israel durará hasta que entren de todos los pueblos; entonces todo Israel se salvará, según el texto de la Escritura: "Llegará de Sión el Libertador, para alejar los crímenes de Jacob; así será la alianza que haré con ellos cuando perdone sus pecados." Considerando el Evangelio, son enemigos, y ha sido para vuestro bien; pero considerando la elección, Dios los ama en atención a los patriarcas, pues los dones y la llamada de Dios son irrevocables. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
El apóstol sigue meditando sin desprenderse de los datos reales y concretos: la negación de los judíos a creer es en sí misma un hecho lamentable y triste; eso es innegable. Pero esa negación sirvió para que la predicación se abriera a los pueblos no judíos, a los paganos. Y lo mismo que verificamos la triste noticia de la terquedad  de la mayor parte de los judíos también tenemos que verificar que ello fue ocasión de que se manifestara la compasión sobreabundante de Dios para con los pueblos paganos. Lo que se observa entonces es que de algo malo salió algo bueno. Entonces lo malo no significa que Dios ya no es Dios; no significa que Dios no reine, sino que su modo de reinar se manifestará de otra manera o por otro camino. Santo Tomás comenta al respecto: "En realidad, por el mero hecho de que algo parece salirse en parte del orden de la providencia, atendiendo a una causa particular, necesariamente viene a caer dentro de este mismo orden por razón de otra causa también particular."
SALMO RESPONSORIAL: 93
R. / El Señor no rechaza a su pueblo.

Dichoso el hombre a quien tú educas,
al que enseñas tu ley,
dándole descanso tras los años duros. R.

Porque el Señor no rechaza a su pueblo
 ni abandona su heredad:
el justo obtendrá su derecho,
 y un porvenir los rectos de corazón. R.

Si el Señor no me hubiera auxiliado,
ya estaría yo habitando en el silencio.
Cuando me parece que voy a tropezar,
tu misericordia, Señor, me sostiene. R.

OREMOS CON EL SALMO Y ACERQUÉMONOS  A SU CONTEXTO
El salmista comienza con una angustiosa invocación al Señor, para que se manifieste como Juez de la tierra y castigue a los opresores de su Pueblo (vs 1-7). La segunda parte del Salmo tiene un tono sapiencial, y es un severo reproche a los que ponen en duda el triunfo final de la justicia (vs. 8-15). Por último, el salmista se reconforta a sí mismo, fundado en su propia experiencia de la intervención salvadora de Dios (vs. 16-19) y en la seguridad de que el Señor no puede estar de parte de la injusticia (vs. 20-23).

LECTURA DEL EVANGELIO
LUCAS 14,1.7-11

“El que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido”
Un sábado, entró Jesús en casa de uno de los principales fariseos para comer, y ellos le estaban espiando. Notando que los convidados escogían los primeros puestos, les propuso esta parábola: "Cuando te conviden a una boda, no te sientes en puesto principal, no sea que hayan convidado a otro de más categoría que tú; y vendrá el que os convidó a ti y al otro y te dirá: "Cédele el puesto a éste." Entonces, avergonzado, irás a ocupar el último puesto. Al revés, cuando te conviden, vete a sentarte en el último puesto, para que, cuando venga el que te convidó, te diga: "Amigo, sube más arriba." Entonces quedarás muy bien ante todos los comensales. Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido."  Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Cualquiera se podría tomar este texto como una invitación a formar un manual de urbanidad y buenos modales cristianos; pero ésa no es la intención del evangelio. El problema que Jesús señala no es de modales, sino de valores y actitudes. Los valores son los principios que una persona o grupo asumen como líneas orientadoras de su comportamiento. Los valores modelan nuestras creencias y aspiraciones. Son también exigencias de compromiso y criterios estables en medio de la confusión cotidiana. Las actitudes son disposiciones permanentes que nos permiten encarar con firmeza y convicción las distintas circunstancias de la vida. ¿Qué nos pide hoy el evangelio? Desafiar nuestros hábitos para ir más allá de la elegancia o la estética de las buenas costumbres, comprometernos con los valores que nos propone Jesús mismo, y asumir las actitudes coherentes con esos nuevos valores. El cristianismo no es una religión de ciertas costumbres bien aceptadas socialmente, sino un compromiso de seguir diariamente el camino de Jesucristo de acuerdo con los valores que él nos propone y las actitudes que estos valores nos exigen. ¿Qué sería de nosotros si sólo nos conformáramos con marchar detrás de la procesión de idolatrías con la que cada día nos aliena el ambiente en que nos movemos?

ORACIÓN
Señor,  gracias por acompañarnos con tu Palabra durante este mes que termina; aquí estamos delante de ti, necesitados de tu amor y de tu fuerza.  Queremos asumir tu Palabra como nuestro único criterio de vida,  te pedimos, guíes nuestra vida por el camino de la humildad y no permitas que nada nos haga creer que el orgullo, el poder y, la vanidad son los caminos que requerimos para ser felices. Bendice nuestras familias, nuestros lugares de trabajo, nuestras comunidades, y especialmente hoy a todos nuestros niños, protégelos del mal, y guárdalos siempre para ti. Amén   

“Que nuestras prácticas cristinas sean para abrirnos a la justicia y misericordia, no para mostrarnos más que los demás”

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Mensaje o Intercesión por: