domingo, 1 de febrero de 2015

INTRODUCCIÓN


“RELACIONANDO  LAS LLAVES DE BENDICIÓN  CON LA INTEGRALIDAD DEL SER”

Hemos iniciado un nuevo año, con mucho entusiasmo, alegría, optimismo, muchas expectativas y ante todo con unos ojos y corazón llenos de esperanza, valentía y fuerza para iniciar nuevos proyectos.  Con muchos de ustedes hemos conversado,  estamos reflexionando y orando en torno a una propuesta, clave o lema para este 2015: “Las llaves de la Bendición”.  En torno a estas llaves que simbolizan la vida de Dios y su bendición, quisiera recordarte algunas pautas o ideas a tener en cuenta en este nuevo mes, y aún todavía comienzo de año:

-          VALORACIÓN Y APRECIO
-          GRATITUD 
-          RECONCILIACIÓN
-          EVALUACIÓN
-          PROYECCIÓN

  
Si todavía no has empezado a comprometerte con tu vida mirando cómo estás en torno a estos pasos propuestos, todavía hoy estás a tiempo de empezar. Vamos anímate empieza a recorrer este camino que te va a llevar, a descubrir las llaves de bendición que te van a abrir nuevas puertas de vida.

En continuidad o relación con lo anterior para este nuevo mes quisiera proponerte tres actitudes para pensarlas y especialmente decidirse a practicarlas haciéndolas vida hoy:

1.      Vuelve a revisar tu vida y resalta o identifica todos los talentos, oportunidades y bendiciones que tienes.  Es importante que inicies este nuevo mes con una nueva mirada de fe, optimista de la vida, y esta la produce el saber que Dios te ha dado muchas cualidades, capacidades, posibilidades.  Una mirada optimista de la vida no nace o se da por generación espontanea, sino que es fruto de reconocer, valorar y agradecer que en la vida todo no es malo, que en tu vida todo tampoco lo es, sino que hay muchas cosas buenas  que necesitas descubrir y ponerlas a producir.
2.      Entender que nada es fácil, por eso debes proponerte a dar la batalla y pelea en la consecución de tus metas y sueños.  Es necesario recordar y repetir que sin esfuerzo, sacrificio y compromiso no se consiguen las metas que se han planteado;  no te dejes seducir por esas propuestas light que hoy se escuchan por todo lado, de ser una persona exitosa, brillante y feliz, instantánea o mágicamente, sin trabajar, buscar y luchar. Este segundo mes del año es una buena oportunidad para volver a revisar, concretar y decidir claramente mis metas y objetivos, mirando las herramientas y talentos que poseo (analizando y discerniendo) y seguirme lanzando a conquistar esos sueños.
3.      Renueva y fortalece tu experiencia espiritual, me parece muy importante este tercer punto, cada vez estoy más seguro que nuestros propios talentos, buenas intenciones, preparación y nuestras solas fuerzas hoy ni nunca vamos a alcanzar todo lo que queremos. Necesitamos de Dios, de su amor, de su sabiduría, de su fuerza o impulso es decir de su ayuda; como lo dice San Juan en su evangelio, “Sin mi nada pueden hacer”,  Jn 15,5. Dios el Señor actúa en nuestro interior y nos impulsa a dar lo mejor. Por eso, creo que debemos hoy renovar nuestra relación con el Señor Jesús, volverlo a declarar como el centro, guía y Señor de nuestra vida y darle todo nuestro ser para que Él viva y reine en él. Desde ya te invito a hacer un pacto o compromiso de vida con Él, de tener un año de más acercamiento y comunión con Jesús y su proyecto de vida, de buscar de nuevo renovar, crecer en prácticas espirituales que nos permitan constantemente estar recibiendo de Él, ese oxigeno fresco que tanto necesitamos en medio de diferentes adversidades y una sociedad cada vez más convulsionada que nos quiere ahogar; volvamos a beber de ese manantial de vida que Él proporciona y que es el único que puede satisfacer nuestro corazón vacío y cada vez más inquieto.  

Un clave importante, en las propuestas para este nuevo año es saber articular o relacionar esas llaves de bendición en torno a la integralidad del ser humano: Cuerpo, alma y espíritu. Sabemos que el mundo de la Biblia o antropología bíblica ve al ser humano como una unidad integral; lo ve como un ser tripartito, es decir siendo una unidad lo ve compuesto de cuerpo, alma y espíritu. La verdadera felicidad consiste en dar respuesta o realización a cada una de estas áreas del ser humano, esta es la tarea o el gran reto, que queremos invitarte a trabajar y conquistar, aplicando las llaves de la bendición a estas dimensiones del ser humano. Recordamos que el cuerpo (soma), como herramienta dada por Dios, nos sirve para relacionarnos para con nuestros semejantes y con el ambiente que nos rodea. Es imperfecto y temporal por más que lo cuide se deteriora, enferma y acaba (muerte). El alma (psyque) como conciencia interior nos relaciona con nosotros mismo, con nuestros procesos afectivos, pensamientos y voluntad.  El espíritu (neuma) es patrimonio exclusivo del ser humano de comunicación con Dios. La ciencia, hoy está concluyendo y aceptando que existe un fino hilo de relación o unión entre estas tres partes, especialmente como lo afirmo el neuropsiquiatra judío, uno de los más grandes científicos del siglo XXI, Víctor Frank.  En una sociedad cada vez más estresada y estresante el hombre necesita de una respuesta, un alimento y medicina para su integralidad , ayuda para el aumento de las depresiones, tristezas, migrañas y deficiencias cardiacas, ¿No será que a veces en lugar de concentrar tanto la atención  en los síntomas externos deberíamos ahondar un poco más  buscar la raíz de la enfermedad no en lo somático sino en lo psíquico y aún un poco más adelante en lo espiritual?. Como lo ves es una cadena de tres eslabones. Es el pan de cada día acudir al médico por un fuerte dolor y salir muy satisfecho por haber recibido una fórmula o receta de un nuevo analgésico muy potente que está de moda traído de USA. Claro está la alegría durará hasta el próximo dolor y la consiguiente visita al médico. Por ello para finalizar de nuevo la invitación en este mes y año de buscar las llaves de la bendición integral a nuestra vida, familia y sociedad.
Oro por ti, los tuyos, tu comunidad, entregándote de nuevo en el nombre de Jesús el Señor las llaves de bendición para este nuevo mes.     

PROMESA BÍBLICA DEL MES

“Que Dios los haga felices en todo su ser: Espíritu, alma y cuerpo, sin defecto alguno hasta su venida.”            


1ra de Tesalonisenses 5,23              

SEGUNDA LLAVE DE BENDICIÓN: LA TRIPLE A

1.      AGRADECIMIENTO:
La acción de gracias nace de valorar y apreciar, de reconocer que estoy en deuda con otro, que actúa a mi favor  porque me ama, ese otro es Dios. La gratitud me hace reconocer que desde la vida el gran don de Dios, se llama Jesucristo y no lo merezco. La mejor forma de darle gracias a Dios por Jesucristo es reconociendo y valorando el servicio, ayuda y bendición que Dios me da a través de otras personas. La gran oración de todos los que se sienten agradecidos con Dios y  la vida se llama “Eucaristía”, que precisamente significa acción de gracias, es la mejor forma o manifestación de gratitud. La oración de acción de gracias es el reconocimiento de que en Jesucristo, Dios se nos ha dado todo y en todos. Te lo recuerdo de nuevo: “La gratitud siempre te abre caminos de bendición, en cambio la ingratitud te los cierra, y atrae consigo toda clase de maldición. Algunos textos bíblicos sobre la gratitud para reflexionar:  Salmo 92,2-3; Salmo 100,4; Salmo 107,22; 1ra de Tesalonicenses 5,18; Lucas 8,39.

2.      LA ALABANZA:
La oración de alabanza surge del reconocimiento de la grandeza de Dios, de una vida profunda de agradecimiento. Es reconocer la grandeza, la bondad, el poderío y las maravillas de Dios. La oración de alabanza es aquella donde se descubre lo extraordinario de las cosas sencillas y cotidianas, no es solamente maravillarse ante los milagros, las cosas extrañas, raras, grandes y poderosas, sino que surge de la capacidad de ver o de captar lo extraordinario en las cosas más simples. La oración de alabanza está asociada a la capacidad de admiración y nosotros si que la hemos ido perdiendo.  Cuando uno está niño o joven y está lloviendo somos felices bajo la lluvia y no nos importa nada, pero cuando estamos más grandes empezamos a complicarnos la vida, a pensar en que se nos va a mojar el vestido, los zapatos, etc. Necesitamos aprender de la escuela de alabanza de la vida, a hacer el ejercicio de disfrutar lo inesperado y de sacar de lo ordinario lo extraordinario, a aprender a sacarle jugo a todas las situaciones de la vida y aprender a reírse de uno mismo. Con el paso de los años nos vamos volviendo muy serios, muy trascendentales y la vida como alabanza requiere aprender a reírnos de nuestras propias equivocaciones, de nuestros errores y embarradas. Muchos me han escuchado decir muchas veces que la persona feliz, el verdadero alabador, el que disfruta plenamente la vida es el que la ve con ojos de turista.
      Algunos textos bíblicos sobre la alabanza para reflexionar:
      Salmo 9,1; Salmo 46,1, Salmo 119,164;  Nehemías 8,10-12.
      Beneficios de la alabanza:
     -La alabanza derrota a los demonios: 1ra Samuel 16,14-19
     -La alabanza produce victoria: 2da Crónicas 20,1-23
     -La alabanza da buen humor: Salmo 126,2
     -La alabanza mantiene la salud: Proverbios 17, 22.

3.      ADORACIÓN:
La adoración bíblica está relacionada con la contemplación y la preparación para la escucha de la voz del Señor. De tal manera tiene que ver con una interiorización, que nos lleva a la escucha en clave de un silencio profundo del corazón. La adoración después del momento gozoso, festivo, de bulla y a veces folklórico que a veces es la alabanza es entrar en la intimidad,  como decía Teresa de Ávila para experimentar el momento de amor pleno con el amado. Al igual que la alabanza y la acción de gracias, el reto de la adoración no está o no se queda en el templo, sino que tiene que salir a la vida y hacerse todo un estilo de vida propio que es la característica del verdadero adorador.

El objeto o centro de la adoración solamente es Dios en su Trinidad. No se adoran santos,            personas o cosas, esto se llamaría idolatría, el lugar de adoración por excelencia es la vida. Pero la adoración se da a través de unos actos o expresiones, como las palabras, los gestos, los detalles, la entrega, el servicio. Es decir la adoración es toda una experiencia de amor que se vive y se comparte con Dios y con el otro.
Algunos textos de adoración bíblica para reflexionar:
Juan 4,24; Éxodo 23,25; Apocalipsis 5,13; Salmo 96,6; Mateo 4,10       

Domingo 01 de Febrero de 2015


“SERVIR A DIOS CON LIBERTAD”
PRIMERA LECTURA
DEUTERONOMIO 18,15-20

“Suscitaré un profeta y pondré mis palabras en su boca”
Moisés habló al pueblo, diciendo: "Un profeta, de entre los tuyos, de entre tus hermanos, como yo, te suscitará el Señor, tu Dios. A él lo escucharéis. Es lo que pediste al Señor, tu Dios, en el Horeb, el día de la asamblea: "No quiero volver a escuchar la voz del Señor, mi Dios, ni quiero ver más ese terrible incendio; no quiero morir." El Señor me respondió: "Tienen razón; suscitaré un profeta de entre sus hermanos, como tú. Pondré mis palabras en su boca, y les dirá lo que yo le mande. A quien no escuche las palabras que pronuncie en mi nombre, yo le pediré cuentas. Y el profeta que tenga la arrogancia de decir en mi nombre lo que yo no le haya mandado, o hable en nombre de dioses extranjeros, ese profeta morirá." Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
La primera lectura de hoy nos lleva a hacer una comparación entre Moisés y Jesús. Para apreciar lo que esto significa necesitamos descubrir a Moisés; descubrir en qué sentido Moisés es un profeta.  Se suele pensar que un profeta es alguien que predice cosas. Y aunque los escritos tradicionalmente atribuidos a Moisés contienen algunas referencias hacia el futuro, por ejemplo: qué pasará cuando Israel sea infiel a Dios, no parece que ese sea el motivo básico de su lugar en el caminar del pueblo de Dios.
Más bien podemos decir que si un profeta habla con propiedad del futuro es porque de algún modo se aproxima a la mirada de Dios, el cual abarca todo. Esta proximidad tiene como fruto inmediato no tanto predecir sino mostrar la voluntad de Dios, que a menudo entra en contraste con los planes humanos. Vemos así que Moisés "el legislador" y Moisés "el profeta" son en verdad la misma persona, uno que con su testimonio y su oración hizo transparente el querer de Dios para todo un pueblo.
Y hay más: no se trata sólo de decir "esto quiere Dios;" se trata de mostrar "cómo nos quiere Dios." Las disposiciones de Dios serían pura imposición si no supiéramos de su amor que libera, de su ternura que es potente, de su sabiduría que rebasa a todos. Y de todo esto ha dado fe uno que supo vivir buscando su rostro: Moisés.
SALMO RESPONSORIAL: 94
R./ Ojalá escuchéis hoy la voz del Señor: "No endurezcáis vuestro corazón."

Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos. R.

Entrad, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios,
y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía. R.

Ojalá escuchéis hoy su voz:
"No endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto;
cuando vuestros padres me pusieron a prueba
y me tentaron, aunque habían visto mis obras." R.

SEGUNDA LECTURA
1CORINTIOS 7,32-35

“La soltera se preocupa de los asuntos del Señor, consagrándose a ellos”
Hermanos: Quiero que os ahorréis preocupaciones: el soltero se preocupa de los asuntos del Señor, buscando contentar al Señor; en cambio, el casado se preocupa de los asuntos del mundo, buscando contentar a su mujer, y anda dividido. Lo mismo, la mujer sin marido y la soltera se preocupan de los asuntos del Señor, consagrándose a ellos en cuerpo y alma; en cambio, la casada se preocupa de los asuntos del mundo, buscando contentar a su marido. Os digo todo esto para vuestro bien, no para poneros una trampa, sino para induciros a una cosa noble y al trato con el Señor sin preocupaciones. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Esta segunda lectura nos plantea un tema que ha suscitado dificultad en su interpretación, pero que no pretende ser un mandato obligatorio de tipo moral; el tema del celibato versus el matrimonio; mas que un mandato es una sugerencia, que debe ser acogida y respetada entre quien opta por servir al Señor a través del celibato, o de la vida matrimonial. Es cierto que un estado de vida célibe, da mayor libertad para el servicio, pero esto no le quita valor al trabajo que los casados puedan hacer en la comunidad.  Pablo hace la debida aclaración al afirmar que “quisiera que vivieran sin preocupaciones”. No hay una sentencia obligatoria. Pablo también hace caer en la cuenta  que a partir de Jesús cada individuo vive la presencia de Dios en sí mismo, y el cristiano deposita su vida entera en ella.  Pero no puede vivir sino en relación con los acontecimientos y con las relaciones con las demás personas. El estado matrimonial, aunque llegue a perder su papel exclusivo de perpetuar la raza, sigue siendo el lugar por excelencia en que se vive la presencia de Dios. Pero de todas formas, esa presencia es explícita; no se hará explícita sino en el Reino, dice el apóstol cuando Dios sea todo en todos. 
LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 1,21-28

“Enseñaba con autoridad”
En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos entraron en Cafarnaún, y cuando el sábado siguiente fue a la sinagoga a enseñar, se quedaron asombrados de su doctrina, porque no enseñaba como los escribas, sino con autoridad. Estaba precisamente en la sinagoga un hombre que tenía un espíritu inmundo, y se puso a gritar: "¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno? ¿Has venido a acabar con nosotros? Sé quién eres: el Santo de Dios." Jesús le increpó: "Cállate y sal de él." El espíritu inmundo lo retorció y, dando un grito muy fuerte, salió. Todos se preguntaron estupefactos: "¿Qué es esto? Este enseñar con autoridad es nuevo. Hasta a los espíritus inmundos les manda y le obedecen." Su fama se extendió en seguida por todas partes, alcanzando la comarca entera de Galilea. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Después de dar inicio a su ministerio de salvación entre los hombres, llamando a sus discípulos, Jesús se dedica a establecer el Reino con sus palabras y acciones. El evangelio de Marcos nos lo muestra hoy en su realidad de profeta y liberador. (Mc 1,21-28). Pero para poder comprender mejor la figura de Jesús, la liturgia pone de paralelo al evangelio un texto del Deuteronomio en la primera lectura (18,15-20) en el que el pueblo pide a Dios un profeta que sea humano, cercano y sin los signos terribles de la gloria de Dios, que asustan y atemorizan. La respuesta de Dios es bellísima: “Yo suscitaré un profeta de entre sus hermanos, como tú. Pondré mis palabras en su boca y les dirá lo que yo le mande”. Ese es Jesús: hermano nuestro y profundamente humano, capaz de hacer sentir con su gestos y palabras, la ternura y la cercanía de un Dios bondadoso y salvador.

Este es Jesús, es el que va a la sinagoga para reunirse en oración con la comunidad de Israel. La sinagoga y el templo eran el lugar de reunión normal de un pueblo de alabanza. Allí acudían todos los creyentes judíos para cantar salmos, escuchar la palabra de la Ley y poner en común sus necesidades. Allí va Jesús y le permiten enseñar a la comunidad.
Marcos nos dice que la palabra y la enseñanza de Jesús son especiales: tenía autoridad y fuerza; en nada se parecía a la enseñanza de los escribas del pueblo. Por eso, la palabra de Jesús está cargada de una fuerza divina, asombraba y admiraba, conquistando el corazón de los creyentes. Jesús, como Maestro, es único. Por eso el pueblo, admirado, decía: “Este enseñar con autoridad es nuevo”. A él lo sienten cercano, comprensivo, conocedor profundo del sentimiento humano  un hombre que habla con palabras de Dios, como lo había anunciado Moisés.

En la sinagoga, además, estaba un hombre dominado por fuerzas extrañas, que no le dejaban ser libre y lo oprimían duramente. La presencia de Jesús crea inmediatamente  un choque y una oposición, pero al mismo tiempo una afirmación de la realidad especial de Jesús: “¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno?. Tú eres el Santo de Dios”. Jesús por su parte, sin aspavientos y espectáculo, pero con autoridad dijo al espíritu: “Cállate y sal de él”. Y el hombre quedo libre para alabar y servir a Dios. Jesús pues, es el profeta de Dios que, no sólo anuncia con vigor el mensaje de Dios, sino que va haciendo en nosotros un proceso liberador. Con su palabra y sus acciones nos libera de todo lo que nos domina y esclaviza, pero nos deja libres para servir a Dios y trabajar a favor de los hermanos.
          
ORACIÓN

Elevamos a ti nuestra oración en gratitud por el mes que acaba de terminar y el regalo del nuevo que comienza. Gracias por los bellos momentos donde no te cansas de manifestarnos y hacernos sentir tu inmenso amor y misericordia. Como eco del encuentro con tu bendita palabra, hoy te pedimos que coloques en nuestro corazón siempre la necesidad de querer escuchar tu voz muy dentro de nosotros(as). Voz de tu Palabra que nos oriente, guíe y acompañe en nuestra búsqueda de felicidad y realización cada día. Amén.

Lunes 02 de Febrero de 2015


Presentación del Señor

“TODOS Y TODAS PODEMOS CONTEMPLAR AL MESÍAS”

PRIMERA LECTURA
MALAQUÍAS 3,1-4

“Entrará en el santuario el Señor a quien vosotros buscáis”

Así dice el Señor: "Mirad, yo envío a mi mensajero, para que prepare el camino ante mí. De pronto entrará en el santuario el Señor a quien vosotros buscáis, el mensajero de la alianza que vosotros deseáis. Miradlo entrar -dice el Señor de los ejércitos-. ¿Quién podrá resistir el día de su venida?, ¿quién quedará en pie cuando aparezca? Será un fuego de fundidor, una lejía de lavandero: se sentará como un fundidor que refina la plata, como a plata y a oro refinará a los hijos de Leví, y presentarán al Señor la ofrenda como es debido. Entonces agradará al Señor la ofrenda de Judá y de Jerusalén, como en los días pasados, como en los años antiguos." Palabra de Dios.

REFLEXIÓN
Malaquías, como tantos otros profetas del Señor, hasta Juan Bautista inclusive, anunció un Día descrito con vigorosos y turbadores trazos. Un Día con D mayúscula en el que no quedaba claro quién podría resistir y quién no. El Día de refinar los corazones y hacer aparecer la verdad de cada uno frente a Dios. Para ese Día, anuncia este profeta, el Señor entrará en su santuario.
Y el Señor entró en su Santuario. Es lo que celebramos hoy: Jesús entra en el templo. Y sin embargo, su entrada es humilde y reconocida sólo por unos cuantos humildes. Aparentemente una contradicción con el mensaje tremendo que venía de los profetas: se anunciaba fuego y llegó calidez; se anunciaba juicio y llegó salvación; se anunciaba temor y llegó mansedumbre. ¿Por qué?. Antes de intentar una respuesta, estaremos de acuerdo en un punto: cuánto hemos ganado con estos cambios. ¡Cuán preferibles y saludables son para nosotros esa calidez, esa mansedumbre y esa salvación! Bien está el anuncio del juicio que despierta la conciencia, pero mejor es el evangelio de la conversión y aquello de "no he venido por los justos sino por los pecadores".   Sin embargo, sería miope quedarnos sólo con lo que nos "conviene". Toda la ternura de Cristo es también toda la manifestación de un amor que ya no permite mentir; un amor frente al cual tendremos que comparecer sin posibilidad de decir: "no entendí..."; "me asusté..."; "me distraje...". La absoluta generosidad de Dios significa la absoluta verdad del encuentro con Él. ¿Y hay algo más terrible que comparecer sin disculpas ante el Amor?.

SALMO RESPONSORIAL: 23
R. / El Señor, Dios de los ejércitos, es el Rey de la gloria.

¡Portones!, alzad los dinteles,
que se alcen las antiguas compuertas:
va a entrar el Rey de la gloria. R.

¿Quién es ese Rey de la gloria?
El Señor, héroe valeroso;
el Señor, héroe de la guerra. R.

¡Portones!, alzad los dinteles,
que se alcen las antiguas compuertas:
va a entrar el Rey de la gloria. R.

¿Quién es ese Rey de la gloria?
El Señor, Dios de los ejércitos.
Él es el Rey de la gloria. R.

SEGUNDA LECTURA
HEBREOS 2,14-18


Los hijos de una familia son todos de la misma carne y sangre, y de nuestra carne y sangre participó también Jesús; así, muriendo, aniquiló al que tenía el poder de la muerte, es decir, al diablo, y liberó a todos los que por miedo a la muerte pasaba la vida entera como esclavos. Notad que tiende una mano a los hijos de Abrahán, no a los ángeles. Por eso tenía que parecerse en todo a sus hermanos, para ser sumo sacerdote compasivo y fiel en lo que a Dios se refiere, y expiar así los pecados del pueblo. Como él ha pasado por la prueba del dolor, puede auxiliar a los que ahora pasan por ella. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN

La carta a los Hebreos, en esta fiesta, nos presenta el discurso sacerdotal; un texto lleno de fuerza dogmática sobre la persona de Jesús, como servidor (Sacerdote), Sumo y Eterno de Dios.  Pero lo interesante es que desde este sacerdocio o servicio nos hermana a nosotros y nos eleva a la dignidad sacerdotal por participar en nuestra carne y en nuestra sangre, y nos lleva a vivir en la presencia del Dios Vivo asumiendo el sufrimiento de nuestro ser y purificando nuestra humanidad. En esta lectura se resalta la estrecha solidaridad que une a Cristo con los seres humanos, compartiendo nuestras debilidades y dolores, y asumiendo también nuestra muerte, como cada ser humano tiene que hacerlo; pero al morir Jesús cambia el sentido de ésta: convierte la muerte en instrumento no de condenación sino de redención. Tan solidario con nuestro ser de mujeres y hombres que no nos puede ser extraño verlo llevado por su padre y su madre a cumplir con la tradición judía de la presentación en el templo (1ra Sam 1,22-24), y en la consagración al Señor y ofreciendo su propio sacrificio.       

LECTURA DEL EVANGELIO
LUCAS 2,22-40

“Mis ojos han visto a tu Salvador”

Cuando llegó el tiempo de la purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: "Todo primogénito varón será consagrado al Señor", y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: "un par de tórtolas o dos pichones."

Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Espíritu Santo moraba en él. Había recibido un oráculo del Espíritu Santo: que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo. Cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo previsto por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: "Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel." Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. Simeón los bendijo, diciendo a María, su madre: "Mira, éste está puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; será como una bandera discutida: así quedará clara la actitud de muchos corazones. Y a ti, una espada te traspasará el alma." 

Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Era una mujer muy anciana; de jovencita había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo día y noche, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones. Acercándose en aquel momento, daba gracias a Dios y hablaba del niño a todos los que aguardaban la liberación de Jerusalén. Y, cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño iba creciendo y robusteciéndose, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Hoy la Iglesia celebra la fiesta de la Presentación del Señor o la Fiesta de las Candelas. Esta fiesta data del siglo IV en Jerusalén. Es el encuentro oficial del Señor con su pueblo en la persona de Simeón y en el templo de Jerusalén. El evangelista intenta dar una respuesta teológica y catequética a los cristianos formados en un ambiente tradicional judío. A Lucas le interesa colocar a Jesús en relación con la ciudad de Jerusalén, como lugar donde se revela para todos los pueblos la luz de la salvación. El cántico de Simeón así lo demuestra. Jesús, el bebé, será “luz para alumbrar a todas las naciones, presentado a todos los pueblos”. Así, la salvación queda conectada al pasado de Israel, pero abierta universalmente a todos los pueblos y naciones del universo y de la historia. Jesús es luz que disipará las tinieblas de todo el mundo. Por eso esta celebración está llena de simbolismo, de belleza, de iluminación. – Dejemos que la luz de Cristo nos invada a todos. Que nuestras comunidades sean también focos de irradiación de la luz de la Buena Noticia de la liberación. ¿Somos cristianos de la luz…?

ORACIÓN

Oh Señor nuestro, como no darte infinitas gracias al poder vivenciarte a través de tu Palabra y comprender que te hiciste humano para enseñarnos el sentido liberador del amor, el servicio y la entrega. Ayúdanos por favor a contemplarte día a día a través de tu mensaje para poder ser  personas abiertas al crecimiento espiritual, que transmite tu Evangelio en verbo y no en sustantivo. Amén.

Martes 03 de Febrero de 2015


“CUANDO LA FE ES FIRME Y DECIDIDA, JESÚS REALIZA LO QUE ELLA ESPERA”

PRIMERA LECTURA
HEBREOS 12,1-4

“Corramos en la carrera que nos toca, sin retirarnos”

Hermanos: Una nube ingente de testigos nos rodea: por tanto, quitémonos lo que nos estorba y el pecado que nos ata, y corramos en la carrera que nos toca, sin retirarnos, fijos los ojos en el que inició y completa nuestra fe: Jesús, que, renunciando al gozo inmediato, soportó la cruz, despreciando la ignominia, y ahora está sentado a la derecha del trono de Dios. Recordad al que soportó la oposición de los pecadores, y no os canséis ni perdáis el ánimo. Todavía no habéis llegado a la sangre en vuestra pelea contra el pecado. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
En la primera lectura de hoy el autor nos exhorta a mantenernos firmes en la fe del Señor: considerar los ejemplos de fe que los hombres del Antiguo Testamento nos han dado, “envueltos en una nube de testigos”, ellos han demostrado su fe con acciones concretas, pudiéramos decir que su fe ha sido probada en las dificultades de la vida diaria y han respondido con creces; nosotros tenemos que ganar cada día más firmeza en nuestra fe, y para ello debemos esforzarnos como lo hace el atleta que quiere completar la carrera que ha iniciado.

Hebreos nos habla hoy y el apóstol Pablo en la 1ra carta a los Corintios ( 1Cor 9:24) también utiliza el correr una carrera como ilustración para describir la vida cristiana. Se nos desafía a correrla completa sin retirarnos, y hacerla como para ganar. Pablo nos dice nuevamente en Timoteo «He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe» (2 Timoteo 4:7). Después de haber completado la carrera, el apóstol gozosamente anticipaba el momento de recibir la corona de victoria de manos del Rey del cielo. Como Pablo, corre tu carrera terrenal para ganar, llegar a la meta tan preciada y deseada y agradar al Señor.


SALMO RESPONSORIAL: 21
R. / Te alabarán, Señor, los que te buscan.

Cumpliré mis votos delante de sus fieles.
Los desvalidos comerán hasta saciarse,
alabarán al Señor los que lo buscan:
viva su corazón por siempre. R.

Lo recordarán y volverán al Señor
hasta de los confines del orbe;
en su presencia se postrarán
las familias de los pueblos.
Ante él se postrarán las cenizas de la tumba,
ante él se inclinarán los que bajan al polvo. R.

Me hará vivir para él, mi descendencia le servirá,
hablarán del Señor a la generación futura,
contarán su justicia al pueblo que ha de nacer:
todo lo que hizo el Señor. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 5,21-43

“Contigo hablo, niña, levántate”

En aquel tiempo, Jesús atravesó de nuevo en barca a la otra orilla, se le reunió mucha gente a su alrededor, y se quedó junto al lago. Se acercó un jefe de la sinagoga, que se llamaba Jairo, y, al verlo, se echó a sus pies, rogándole con insistencia: "Mi niña está en las últimas; ven, pon las manos sobre ella, para que se cure y viva." Jesús se fue con él, acompañado de mucha gente que lo apretujaba.

Había una mujer que padecía flujos de sangre desde hacia doce años. Muchos médicos la habían sometido a toda clase de tratamientos, y se había gastado en eso toda su fortuna; pero, en vez de mejorar, se había puesto peor. Oyó hablar de Jesús y, acercándose por detrás, entre la gente, le tocó el manto, pensando que con sólo tocarle el vestido curaría. Inmediatamente se secó la fuente de sus hemorragias, y notó que su cuerpo estaba curado. Jesús, notando que había salido fuerza de él, se volvió en seguida, en medio de la gente, preguntando: "¿Quién me ha tocado el manto?" Los discípulos le contestaron: "Ves como te apretuja la gente y preguntas: "¿Quién me ha tocado?"" Él seguía mirando alrededor, para ver quién había sido. La mujer se acercó asustada y temblorosa, al comprender lo que había pasado, se le echó a los pies y le confesó todo. Él le dijo: "Hija, tu fe te ha curado. Vete en paz y con salud."

Todavía estaba hablando, cuando llegaron de casa del jefe de la sinagoga para decirle: "Tu hija se ha muerto. ¿Para qué molestar más al maestro?" Jesús alcanzó a oír lo que hablaban y le dijo al jefe de la sinagoga: "No temas; basta que tengas fe." No permitió que lo acompañara nadie, más que Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago. Llegaron a casa del jefe de la sinagoga y encontró el alboroto de los que lloraban y se lamentaban a gritos. Entró y les dijo: "¿Qué estrépito y qué lloros son éstos? La niña no está muerta, está dormida." Se reían de él. Pero él los echó fuera a todos y, con el padre y la madre de la niña y sus acompañantes, entró donde estaba la niña, la cogió de la mano y le dijo: "Talitha cumi" (que significa: "Contigo hablo, niña, levántate"). La niña se puso en pie inmediatamente y echó a andar; tenía doce años. Y se quedaron viendo visiones. Les insistió en que nadie se enterase; y les dijo que dieran de comer a la niña. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
El texto que leemos hoy tiene como personajes principales a dos mujeres que son sanadas y salvadas de la muerte gracias al poder divino de Jesús y al poder de la fe. Existe un punto en común en estas dos mujeres: las dos están perdiendo la vida, a las dos se les agota el tiempo y necesitan ser liberadas de los brazos de la muerte, y para ello acuden al Maestro, al único en quien encuentran la posibilidad de una vida nueva. La hemorroisa, mujer que padecía de flujos de sangre desde hacía doce años, y Jairo, quien representa a su hija y a las autoridades religiosas del pueblo judío, poseen una fe infinita en la fuerza salvífica de Jesús; reconocen que él es capaz de devolver al ser humano su verdadera dignidad y la verdadera vida, cosa que el sistema religioso y social de la época no ofrecía a los más débiles, y, por el contrario, se encargaba de marginarlos y de condenarlos a una muerte en vida. Estas dos acciones milagrosas de Jesús son la respuesta a una fe sencilla, firme y probada.

ORACIÓN

Nuestra fe en Ti,  Jesús, nos lleva a buscarte y alcanzar lo que necesitamos, por eso ponemos en tus manos nuestra salud, proyectos de vida, dificultades, familiares, amigos y no amigos, con la certeza que se realizará lo que nos conviene, según tu mirada de Padre y Madre sanador, formador, liberador  y poderoso. Amén   

Miércoles 04 de Febrero de 2015


 “SÓLO QUIEN TIENE FE DESCUBRE LA VERDADERA IDENTIDAD DE JESÚS”

PRIMERA LECTURA
HEBREOS 12,4-7.11-15

“El Señor reprende a los que ama”

Hermanos: Todavía no habéis llegado a la sangre en vuestra pelea contra el pecado. Habéis olvidado la exhortación paternal que os dieron: "Hijo mío, no rechaces la corrección del Señor, no te enfades por su reprensión; porque el Señor reprende a los que ama y castiga a sus hijos preferidos." Aceptad la corrección, porque Dios os trata como a hijos, pues, ¿qué padre no corrige a sus hijos? Ninguna corrección nos gusta cuando la recibimos, sino que nos duele; pero, después de pasar por ella, nos da como fruto una vida honrada y en paz.

Por eso, fortaleced las manos débiles, robusteced las rodillas vacilantes, y caminad por una senda llana: así el pie cojo, en vez de retorcerse, se curará. Buscad la paz con todos y la santificación, sin la cual nadie verá al Señor. Procurad que nadie se quede sin la gracia de Dios y que ninguna raíz amarga rebrote y haga daño, contaminando a muchos. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Es difícil conciliar el sentirse amado con el sentirse reprendido. Nos gusta el amor cuando llega con rostro de sanación o de consuelo; poco nos atrae, si viene con la ropa adusta de la exhortación o incluso el castigo. Pero esto es infantilismo, y es preciso superarlo.

 La analogía fundamental viene del ambiente de familia: Dios nos guía y nos educa como un papá guía y conduce a su hijo. No es una comparación nueva en la Biblia, pues ya leíamos en el Deuteronomio: "debes comprender en tu corazón que el Señor tu Dios te estaba disciplinando así como un hombre disciplina a su hijo" (Dt 8,5). Y está además la cita de Prov 3,11-12 que el texto mismo incluye: "no desprecies la corrección del Señor...".

 Es bello el razonamiento que se nos propone: si eres hijo, es normal que te traten como a hijo. Aún más: es hermoso descubrirte hijo en el momento mismo en que llega la contradicción, sobre todo porque eso te hace semejante a Aquel que "siendo Hijo, aprendió sufriendo a obedecer..." (Heb 5,8).

SALMO RESPONSORIAL: 102
R. / La misericordia del Señor dura siempre, para los que cumplen sus mandatos.

Bendice, alma mía, al Señor,
y todo mi ser a su santo nombre.
Bendice, alma mía, al Señor,
y no olvides sus beneficios. R.

Como un padre siente ternura por sus hijos,
siente el Señor ternura por sus fieles;
porque él conoce nuestra masa,
se acuerda de que somos barro. R.

Pero la misericordia del Señor dura siempre,
su justicia pasa de hijos a nietos:
para los que guardan la alianza. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 6,1-6

“No desprecian a un profeta más que en su tierra”

En aquel tiempo, fue Jesús a su pueblo en compañía de sus discípulos. Cuando llegó el sábado, empezó a enseñar en la sinagoga; la multitud que lo oía se preguntaba asombrada: "¿De dónde saca todo eso? ¿Qué sabiduría es ésa que le han enseñado? ¿Y esos milagros de sus manos? ¿No es éste el carpintero, el hijo de María, hermano de Santiago y José y Judas y Simón? Y sus hermanas ¿no viven con nosotros aquí?" Y esto les resultaba escandaloso.

Jesús les decía: "No desprecian a un profeta más que en su tierra, entre sus parientes y en su casa." No pudo hacer allí ningún milagro, sólo curó algunos enfermos imponiéndoles las manos. Y se extrañó de su falta de fe. Y recorría los pueblos de alrededor enseñando. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
En el curso de su ciclo misionero Jesús pasa por Nazaret, la ciudad de su familia. El sábado habla en la sinagoga conforme a las reglas admitidas, pero no cosecha más que indiferencia y repulsa. Marcos hace que su lector asista a una nueva manifestación de desconocimiento del pueblo respecto de Jesús. Este habla “con autoridad” no sólo porque su exposición es diferente de la predicación tradicional de los escribas, sino, sobre todo, porque su discurso no es evidentemente admisible si antes no se siente apego a su persona. No se presenta tan sólo como “rabino” frente a sus discípulos, sino como hombre que previamente a toda enseñanza quiere que se establezcan estrechas relaciones de confianza mutua. Jesús intensifica, pues, su papel de rabino: no se somete decididamente a los cuadros tradicionales; sitúa su enseñanza en un plano no habitual, buscando primero una apertura y una confianza que constituyen la auténtica ejercitación de la “fe”
La pobreza y sencillez de los padres de Jesús resultan inaceptables a aquéllos que esperaban un Mesías maravilloso (Jn 7,2-5). La intención de Jesús es, por el contrario, revelar la significación salvadora de esta pobreza: la felicidad no se adquiere ya a fuerza de acontecimientos extraordinarios, signos del poder divino, sino por medio de un Dios que asume toda la humanidad en su pobreza. Descubrir que Dios está, precisamente, en lo modesto, sencillo y pobre debe ser, una consigna vigente hoy, como nunca frente a los antivalores de nuestra sociedad.

ORACIÓN
Señor llévanos a darnos cuenta si te hemos reconocido, si realmente creemos en Ti a tal punto que la certeza de tu actuar en nuestra vida y en el mundo nos lleva a ser personas armoniosas, de paz y seguridad en sí mismas y en un Dios tan divino y tan humano como Tú, en quien confiamos y seguimos. Amén


Jueves 05 de Febrero de 2015


“EN JESÚS NOS HEMOS ACERCADO AL NUEVO ROSTRO DE DIOS”

PRIMERA LECTURA
HEBREOS 12,18-19.21-24

“Os habéis acercado al monte Sión, ciudad del Dios vivo”

Hermanos: Vosotros no os habéis acercado a un monte tangible, a un fuego encendido, a densos nubarrones, a la tormenta, al sonido de la trompeta; ni habéis oído aquella voz que el pueblo, al oírla, pidió que no les siguiera hablando. Y tan terrible era el espectáculo, que Moisés exclamó: "Estoy temblando de miedo".

Vosotros os habéis acercado al monte Sión, ciudad del Dios vivo, Jerusalén del cielo, a millares de ángeles en fiesta, a la asamblea de los primogénitos inscritos en el cielo, a Dios, juez de todos, a las almas de los justos que han llegado a su destino y al Mediador de la nueva alianza, Jesús, y a la aspersión purificadora de una sangre que habla mejor que la de Abel. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Un punto central de todo el discurso sacerdotal ha sido mostrarnos la necesidad para la experiencia de fe de la ofrenda de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote. Sin su ofrenda nada tiene sentido, nada alcanza la plenitud. El pasaje de la Carta a los Hebreos en este día nos ofrece un paralelo entre dos montes y dos alianzas. Sinaí con Moisés, por un lado; Sión con Jesús por el otro. Aunque esta comparación tiene algo de forzado porque Moisés celebró la alianza con Yahvé en el monte Sinaí, mientras que Jesús no estaba en la colina de Sión, en Jerusalén, sino en el montículo de la calavera, el Calvario. Desde luego, el autor de esta Carta conocía en dónde había derramado su Sangre nuestro Señor, y por ello empieza su comparación diciendo: "ustedes no se han acercado a algo palpable". Mucho le interesa que entendamos este punto y por eso no toma como lugar del nuevo pacto al Calvario sino a la imagen evocadora y densamente teológica del monte Sión.

SALMO RESPONSORIAL: 47
R. / Oh Dios, meditamos tu misericordia en medio de tu templo.

Grande es el Señor y muy digno de alabanza
en la ciudad de nuestro Dios,
su monte santo, altura hermosa,
alegría de toda la tierra. R.

El monte Sión, vértice del cielo,
ciudad del gran rey;
entre sus palacios,
Dios descuella como un alcázar. R.

Lo que habíamos oído lo hemos visto
en la ciudad del Señor de los ejércitos,
en la ciudad de nuestro Dios:
que Dios la ha fundado para siempre. R.

Oh Dios, meditamos tu misericordia
en medio de tu templo:
como tu renombre, oh Dios, tu alabanza
llega al confín de la tierra;
tu diestra está llena de justicia. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 6,7-13

“Los fue enviando”

En aquel tiempo, llamó Jesús a los Doce y los fue enviando de dos en dos, dándoles autoridad sobre los espíritus inmundos. Les encargó que llevaran para el camino un bastón y nada más, pero ni pan, ni alforja, ni dinero suelto en la faja; que llevasen sandalias, pero no una túnica de repuesto. Y añadió: "Quedaos en la casa donde entréis, hasta que os vayáis de aquel sitio. Y si un lugar no os recibe ni os escucha, al marcharos sacudíos el polvo de los pies, para probar su culpa." Ellos salieron a predicar la conversión, echaban muchos demonios, ungían con aceite a muchos enfermos y los curaban. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Luego de haber instituido a los Doce, Jesús envía a sus discípulos. Marcos describe este envío de una manera muy detallada, en la que cada instrucción tiene un significado profundo en todo tiempo y lugar. Una primera instrucción relevante es que deben ir “de dos en dos”, lo cual expresa que los que anuncian la Buena Nueva necesitan de la compañía, la integración y la escucha de otros para compartir la experiencia y el trabajo, para poder dar un verdadero testimonio del Señor. Una segunda instrucción que llama la atención es que los discípulos no deben llevar “ni pan, ni alforja, ni dinero”; deben ir con las manos libres, tal como vivió Jesús, quien fue libre para servir y amar a sus hermanos.
Este texto invita entonces a todos los que conformamos la Iglesia de Jesús a redescubrir que la misión se realiza en comunidad, en donde todos participamos (laicos, pastores, sacerdotes, grupos comunitarios, etc.), y que el testimonio más fiel de la Buena Nueva es el estilo de vida, caracterizado por su sencillez y humildad.

ORACIÓN

Señor aquí estamos  para ir donde quieras, para hacer tu voluntad, para anunciarte donde nos pongas, para hablar de lo que haces en nosotros; aquí estamos  para servir de testigos y decir que contigo se vive mucho mejor. Eres nuestro  Maestro y modelo de vida, ayúdanos a no desfallecer y llevar en alto tu nombre. Amén    

Viernes 06 de Febrero de 2015


“PROFESAR LA FE EN JESUCRISTO TIENE CONSECUENCIAS EN LA VIDA PRÁCTICA”

PRIMERA LECTURA
HEBREOS 13,1-8

“Jesucristo es el mismo ayer y hoy y siempre”

Hermanos: Conservad el amor fraterno y no olvidéis la hospitalidad; por ella algunos recibieron sin saberlo la visita de unos ángeles. Acordaos de los que están presos, como si estuvierais presos con ellos; de los que son maltratados, como si estuvierais en su carne. Que todos respeten el matrimonio, el lecho nupcial que nadie lo mancille, porque a los libertinos y adúlteros Dios los juzgará. Vivid sin ansia de dinero, contentándoos con lo que tengáis, pues él mismo dijo: "Nunca te dejaré ni te abandonaré"; así tendremos valor para decir: "El Señor es mi auxilio: nada temo; ¿qué podrá hacerme el hombre?" Acordaos de vuestros dirigentes, que os anunciaron la palabra de Dios; fijaos en el desenlace de su vida e imitad su fe. Jesucristo es el mismo ayer y hoy y siempre. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Entramos a la lectura del último capítulo de este discurso sacerdotal. Todo este capítulo da unas recomendaciones éticas construidas desde la afirmación de la caridad como elemento fundamental de las relaciones cristianas. Toda la grandeza de la fe que el autor muestra, se concreta en acciones muy sencillas que expresan la relación con el que se ha entregado por nosotros. Se nos pide tener actitudes que el mismo Jesús vivió y enseñó.

Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre. Es él quien nos sostiene, no nosotros a él, como en cambio sucede con los pensadores o líderes del pasado, que tienen que recibir vida de sus seguidores, él está vivo hoy, y es vida para nosotros, es la razón de ser de nuestro camino y de nuestra fe. Obedecer, amar, seguir a Jesucristo, esa es nuestra misión.

SALMO RESPONSORIAL: 26
R. / El Señor es mi luz y mi salvación.

El Señor es mi luz y mi salvación,
¿a quién temeré?
El Señor es la defensa de mi vida,
¿quién me hará temblar? R.

Si un ejército acampa contra mí,
mi corazón no tiembla;
si me declaran la guerra,
me siento tranquilo. R.

Él me protegerá en su tienda
 el día del peligro;
me esconderá en lo escondido de su morada,
me alzará sobre la roca. R.

Tu rostro buscaré, Señor,
no me escondas tu rostro.
No rechaces con ira a tu siervo,
 que tú eres mi auxilio;
no me deseches. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 6,14-29

“Es Juan, a quien yo decapité, que ha resucitado”

En aquel tiempo, como la fama de Jesús se había extendido, el rey Herodes oyó hablar de él. Unos decían: "Juan Bautista ha resucitado, y por eso los poderes actúan en él." Otros decían: "Es Elías." Otros: "Es un profeta como los antiguos." Herodes, al oírlo, decía: "Es Juan, a quien yo decapité, que ha resucitado." Es que Herodes había mandado prender a Juan y lo había metido en la cárcel, encadenado. El motivo era que Herodes se había casado con Herodías, mujer de su hermano Filipo, y Juan le decía que no le era lícito tener la mujer de su hermano.

Herodías aborrecía a Juan y quería quitarlo de en medio; no acababa de conseguirlo, porque Herodes respetaba a Juan, sabiendo que era un hombre honrado y santo, y lo defendía. Cuando lo escuchaba, quedaba desconcertado, y lo escuchaba con gusto. La ocasión llegó cuando Herodes, por su cumpleaños, dio un banquete a sus magnates, a sus oficiales y a la gente principal de Galilea. La hija de Herodías entró y danzó, gustando mucho a Herodes y a los convidados. El rey le dijo a la joven: "Pídeme lo que quieras, que te lo doy." Y le juró: "Te daré lo que me pidas, aunque sea la mitad de mi reino." Ella salió a preguntarle a su madre: "¿Qué le pido?" La madre le contestó: "La cabeza de Juan, el Bautista." Entró ella en seguida, a toda prisa, se acercó al rey y le pidió: "Quiero que ahora mismo me des en una bandeja la cabeza de Juan, el Bautista." El rey se puso muy triste; pero, por el juramento y los convidados, no quiso desairarla. En seguida le mandó a un verdugo que trajese la cabeza de Juan. Fue, lo decapitó en la cárcel, trajo la cabeza en una bandeja y se la entregó a la joven; la joven se la entregó a su madre. Al enterarse sus discípulos, fueron a recoger el cadáver y lo enterraron. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Marcos coloca como centro de este relato a Herodes Antipas y, sobre todo, a Juan el Bautista. Herodes se encuentra perplejo por los comentarios que rondan por la región acerca de Jesús de Nazaret, relacionándolo con Juan resucitado. Asimismo, la gente pensaba que en Jesús se hacía presente el espíritu profético tradicional; lo relacionaban según sus propios criterios, ideales o expectativas, con lo cual se expresaba su confusión y su falta de fe. Por otro lado, el martirio de Juan es la manifestación plena de la acción violenta a la que pueden llegar los poderosos para silenciar la denuncia y la exigencia de justicia de los profetas. Juan fue capaz de enfrentar sin miedo a Herodes, de criticar su matrimonio con la esposa de su hermano Filipo, cosa que la ley prohibía totalmente, y por ello es asesinado, por ser justo y fiel a la verdad de Dios; su muerte traza el camino que habrá de recorrer Jesús; es lo que le espera al Maestro, a los discípulos y a todos aquellos que asumen como opción de vida la lucha diaria por la construcción del Reino de Dios.

ORACIÓN

Gracias Bendito Dios por este nuevo comenzar en ti. Buen Señor que nos has llamado al camino del discipulado por la fe, te rogamos nos ayudes para que en nuestra vida cotidiana, pongamos de manifiesto lo que hemos visto, oído, vivido y creído en ti. Haznos valientes para dar testimonio de vida, actuar bajo tus principios de justicia, amor, igualdad y solidaridad, a anunciar  tu Buena Noticia y llevar corrección especialmente  a los que se encuentran perdidos. Amén