domingo, 1 de mayo de 2022

MAYO 2022

 LA MUJER SIGNO DE RESURRECCIÓN Y ESPERANZA DE UN NUEVO PENTECOSTÉS

 

Sigue pasando el tiempo velozmente y como alguien diría de la vida solo van quedando recuerdos; no obstante la vida representa diferentes realidades, una que son más fuertes y marcan nuestra vida. Por eso creo que es necesario vivir el presente con pasión, sacarle todo el jugo posible atreverme desde lo que soy a ser feliz, para que cuando pase el tiempo los recuerdos sean agradables y sean fuente de una sonrisa. Un nuevo mes y muy hermoso, donde muy agradecidos recordamos y celebramos la vida de la mujer desde su maternidad. Un mensaje muy especial de honra y bendición en este mes a la maternidad de la mujer; nuestra oración, saludo y bendición a todas las madres en este mes. Quizás teniendo presente como paradigma y modelo de maternidad y defensora de la vida a María de Nazareth; por eso quisiéramos resaltar desde ella la figura de las madres. María es modelo, modelo de vida, pues siendo tan joven acepto llevar en su vientre al salvador y soporto grandes dolores durante toda su experiencia maternal; sin embargo, nunca renegó y mucho menos desistió de su misión de ser madre, porque sabía que esa era la voluntad divina y que a través de ser vida y generar vida se encontraba el misterio profundo del amor de Dios hecho carne. Hoy vemos con tristeza que muchas personas desconocen el don de la maternidad que el Señor le ha dado a la mujer y muchos toman la decisión de no optar por la vida y de interrumpir el proceso de su embarazo, demostrando así que nuestra humanidad atraviesa por una profunda pérdida del sentido de la vida.  Tantas mujeres pró-vida que si desean ser madres y no pueden y tantas que si pueden y se niegan a la vida, actualmente podríamos decir que estamos enfrentando una crisis de humanización. Y nuestra sociedad necesita ayuda ya que, nadie quiere asumir la responsabilidad de propiciar condiciones en las que se promueva el bienestar el respeto, la justicia y por ende el derecho a la vida y de esta manera a vivir en paz.

Dios el creador desde el mismo inicio le ha dado a la mujer el poder sobrenatural de llevar la vida dentro de sí, la mujer es vida y generadora de vida. En su vientre, se gesta un acontecimiento maravilloso que hace eco del misterio de cómo surge la vida, convirtiéndose ella en co-creadora es decir, colaboradora de Dios. Es un hecho milagroso que normalmente debería traer felicidad, pero parece que no es así en nuestro tiempo, en muchas mujeres de hoy. Y muchos nos preguntamos por qué, y tal vez la respuesta es por  que vivimos en un mundo en que se ha depositado la responsabilidad del cuidado de la vida solamente a la mujer; por eso varias veces el Papa Francisco ha opinado de la necesidad de generar una nueva ética humana donde el varón se haga consciente y responsable de su participación en la gestación de la vida, acompañamiento y cuidado de la misma.

De esta manera, la maternidad y la paternidad responsable le abren a la mujer la posibilidad de expresar todo su potencial, pues cuando el Señor siembra en ella la vocación de ser madre, la mujer siempre busca lo mejor para su hijo incluso solo desde el amor está dispuesta a dar su vida por él. Es preciso hacer un cambio de mentalidad, ya que en la sociedad de hoy se ha generado la idea de que tener hijos es una esclavitud, es una adversidad, es un estorbo es una acontecimiento que arruina la vida, que la cierra a la mujer las puertas de crecer como persona, pero reconociendo las dificultades de nuestros tiempos, ser madre debe ser una realidad maravillosa, una oportunidad de abril nuevas posibilidades y de cambiar a la sociedad. No dejemos que este pensamiento facilista de muerte muchas veces no de libertad sino de libertinaje nos contagie, miremos a María de Nazareth como modelo que acepto la voluntad de Dios. La mujer siempre presente en los grandes acontecimientos de la historia; la mujer signo del anuncio de la nueva noticia (Anunciación); signo del cumplimiento de las promesas de Dios (Encarnación); y signo de la vida de la vida nueva y la resurrección. Por eso con María y con la mujer generadora de vida en medio de los tiempos difíciles podemos seguir caminando con certeza y esperanza hacia un nuevo Pentecostés, que es el Pentecostés del amor, de la entrega total en el servicio a los demás como lo hacen todas las madres. De nuevo una gratitud,  exaltación y bendición a todos los diferentes rostros de madre; Madres campesinas, madres indígenas, madre afro, madres educadoras, tantas mujeres que generosamente sin serlo se han atrevido a cumplir con toda generosidad el rol de una madre, madres hermanas, madres tías,etc. Un Feliz mes lleno de bendiciones para todas ustedes.

Roberto Zamudio

 

PROMESA BIBLICA DEL MES  

           

Acaso puede una mujer olvidarse de su niño de pecho, sin compadecerse del hijo de sus entrañas? Aunque estas mujeres se olvidaran de su hijo yo de ti no me olvidare jamás dice el Señor. Isaías 49 15

 

 

ORACIÓN AL COMENZAR EL DÍA

 

Buenos días Dios Padre y Madre de nuestra vida. En el día a día de este mes queremos agradecerte por las madres y en especial por  el amor tan similar al tuyo que has colocado en ellas. Te pedimos nos ayudes a que nosotros como  hijos e hijas, sepamos también obedecerles con conciencia y humildad. Regálanos también sentimientos y acciones de ternura, paciencia, buen trato, protección y provisión, como lo haces Tú y la mayoría de mujeres que son madres. Apártanos de sentimientos y acciones negativas como  abandono, descuido e indiferencia por todas las personas pero especialmente x el ser que se ha engendrado.  Señor que la unción de tu Espíritu Santo, nos lleve a descubrir, asimilar y adquirir los dones que has regalado a las madres y que debemos tener todos los seres humanos, para responder al sentido de la Resurrección. Si vivimos en la maldad, en lo que hace daño a las demás personas, estamos negándote y negando a los seres que nos dieron la vida.  Queremos ir  caminando contigo  y clamando nos hagas cada vez mejores seres humanos, para alcanzar la verdadera paz  y reflejarte a ti, Dios de Amor.  Amén

 

ORACIÓN AL FINALIZAR EL DÍA

Buenas noches Señor, aquí en el descanso  y en el silencio de la noche, luego de un día de ires y venires, te buscamos, con ansia, con fuego en nuestro corazón,  recibe en esta noche nuestra adoración. Te anhelamos, te necesitamos, te amamos  más que a nuestro ser. Te entregamos  nuestros aciertos, desaciertos, el daño que hayamos hecho con nuestro obrar. Ayúdanos Señor a enmendarlo,  necesitamos de una gran porción de tu Espíritu Santo para convertir todo aquello que no sea tuyo y obedecer a todo los que Tú nos pides, para cumplir y hacer tu voluntad, para hacer  vida tu Palabra.

Gracias por que tu amor por nosotros es infinito, tan alto, tan ancho, tan grande que no lo podemos tocar, pero lo percibimos  y lo sentimos en cada instante de nuestra vida. Cámbianos, transfórmanos y ayúdanos a seguir tu ejemplo, Jesús, fortalécenos en esta noche y que podamos levantarnos como las águilas y llenas de tu Espíritu salir a cumplir tu misión.  Amén.

 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Mensaje o Intercesión por: