martes, 1 de diciembre de 2020

Viernes 11 de Diciembre de 2020

                            

“CONVERTIRSE NOS LLEVA A SINTONIZARNOS CON DIOS”

PRIMERA LECTURA

ISAÍAS 48,17-19

 

“Si hubieras atendido a mis mandatos”

Así dice el Señor, tu redentor, el Santo de Israel: "Yo, el Señor, tu Dios, te enseño para tu bien, te guío por el camino que sigues. Si hubieras atendido a mis mandatos, sería tu paz como un río, tu justicia como las olas del mar; tu progenie sería como arena, como sus granos, los vástagos de tus entrañas; tu nombre no sería aniquilado ni destruido ante mí." Palabra de Dios.

SALMO RESPONSORIAL: 1

R./ El que te sigue, Señor, tendrá la luz de la vida.

 

Dichoso el hombre

que no sigue el consejo de los impíos,

ni entra por la senda de los pecadores,

ni se sienta en la reunión de los cínicos;

sino que su gozo es la ley del Señor,

y medita su ley día y noche. R.

 

Será como un árbol

plantado al borde de la acequia:

da fruto en su sazón

y no se marchitan sus hojas;

y cuanto emprende tiene buen fin. R.

 

No así los impíos, no así;

serán paja que arrebata el viento.

Porque el Señor protege el camino de los justos,

pero el camino de los impíos acaba mal. R.

 OREMOS CON EL SALMO

Este salmo, proclama la dicha de seguir fielmente la voluntad de Dios, manifestada para el Israelita en la Ley. Se contrapone a la suerte que tendrán los que siguen el camino opuesto. Jesús también proclama dichosos a los que escuchan la Palabra de Dios y la cumplen. Seguir     “el buen camino” es seguir a Jesús, camino, verdad y vida. 

LECTURA DEL EVANGELIO

MATEO 11,16-19

“No escuchan ni a Juan ni al Hijo del hombre”

En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente: "¿A quién se parece esta generación? Se parece a los niños sentados en la plaza, que gritan a otros: "Hemos tocado la flauta, y no habéis bailado; hemos cantado lamentaciones, y no habéis llorado." Porque vino Juan, que ni comía ni bebía, y dicen: "Tiene un demonio." Vino el Hijo del hombre, que come y bebe, y dicen: "Ahí tenéis a un comilón y borracho, amigo de publicanos y pecadores." Pero los hechos dan razón a la sabiduría de Dios." Palabra del Señor.

REFLEXIÓN

El capricho y la terquedad son obstáculos para el tiempo de Adviento, y para cualquier época del año en nuestra vida pues impiden que la gracia de Dios pueda actuar plenamente en nosotros. Isaías y Mateo nos lo recuerdan. Muchos cristianos que buscan hacer las cosas a su modo, quieren los tiempos a su gusto, son rebeldes, se parecen al pueblo que no atiende los mandatos de Dios o a los niños caprichosos que no entran al juego. Hoy la Palabra nos invita a escuchar al Señor en sus mandamientos, a escuchar a Juan en su invitación a preparar el camino, a escuchar a Jesús en su propuesta del Reino de Dios. No seamos de las personas crónicamente insatisfechas que se refugian en la crítica, viendo sólo lo negativo en la historia y en las personas con una queja constante. Tomemos en serio a Cristo y a su Iglesia y eso cambiará nuestra vida. “La sabiduría se reconoce por sus obras”. ¿Cuánta terquedad, obstinación, infantilismo e inmadurez habitan en nuestro corazón?

ORACIÓN

Ayúdanos Señor a cada vez más a entender tu Palabra, queremos saber qué nos hablas con los acontecimientos de cada día, de que nos conoces y no nos abandonas y caminas con nosotros. Que tu amor misericordioso en este tiempo de Adviento continúe trasformando nuestra vida y nos siga haciendo dóciles a tu voluntad  como María de Nazaret, ayúdanos a permanecer firmes en la fe y la esperanza de un mundo más justo y solidario. Amén  

El adviento no es sólo dulce espera o amable camino al encuentro: implica cambios, implica quitar obstáculos”


No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Mensaje o Intercesión por: