lunes, 1 de julio de 2013

Viernes 26 de Julio de 2013


“VIVAMOS EN FIDELIDAD LA ALIANZA Y VOLUNTAD DE DIOS

PRIMERA LECTURA
ÉXODO 20,1-17

“La Ley se dio por medio de Moisés”

En aquellos días, el Señor pronunció las siguientes palabras: "Yo soy el Señor, tu Dios, que te saqué de Egipto, de la esclavitud. No tendrás otros dioses frente a mí. No te harás ídolos, figura alguna de lo que hay arriba en el cielo, abajo en la tierra o en el agua debajo de la tierra. No te postrarás ante ellos, ni les darás culto; porque yo, el Señor, tu Dios, soy un dios celoso: castigo el pecado de los padres en los hijos, nietos y biznietos, cuando me aborrecen. Pero actúo con piedad por mil generaciones cuando me aman y guardan mis preceptos. No pronunciarás el nombre del Señor, tu Dios, en falso. Porque no dejará el Señor impune a quien pronuncie su nombre en falso.

Fíjate en el sábado para santificarlo. Durante seis días trabaja y haz tus tareas, pero el día séptimo es un día de descanso, dedicado al Señor, tu Dios: no harás trabajo alguno, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu esclavo, ni tu esclava, ni tu ganado, ni el forastero que viva en tus ciudades. Porque en seis días hizo el Señor el cielo, la tierra y el mar y lo que hay en ellos. Y el séptimo día descansó: por eso bendijo el Señor el sábado y lo santificó.

Honra a tu padre y a tu madre: así prolongarás tus días en la tierra que el Señor, tu Dios, te va a dar. No matarás. No cometerás adulterio. No robarás. No darás testimonio falso contra tu prójimo. No codiciarás los bienes de tu prójimo; no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su esclavo, ni su esclava, ni su buey, ni su asno, ni nada que sea de él."  Palabra de Dios.

REFLEXIÓN
Esta primera lectura nos presenta el texto referente a los diez mandamientos, o decálogo de alianza entre Dios y su pueblo. Todo empieza con una frase básica: “Yo soy el Señor tu Dios, que te saqué de la esclavitud de Egipto. Las normas de vida que el pueblo recibe no vienen de un Dios extraño, lejano, sino de quien los ha liberado de la opresión, está con ellos, los acompaña en su camino, camina con ellos. Los diez mandamientos son el estilo o programa de vida  que Dios pide alpueblo elegido. Unos se refieren a la relación con Dios, empezando por el primero y más importante: “No tendrás otros dioses fuera de mi”. Los otros mandamientos dan normas sobre la relación y trato con los demás de la comunidad, empezando por el “Honra a tu padre y a tu madre”.
Hoy también siguen siendo válidos estos mandatos antiguos de Dios, pero a la luz y visión de la enseñanza de Jesús, quien les dio sentido y motivaciones más profundas (“Amaos como yo os he amado”) y los completó sobre todo con las Bienaventuranzas y el Sermón de la Montaña. No se trata de normas contra la libertad, sino del camino de una vida digna, más justa, libre, en armonía con Dios y con los hermanos. Los mandamientos de Jesús (bienaventuranzas) son el camino para la verdadera liberación y promoción humana. 

SALMO RESPONSORIAL: 18
R. / Señor, tú tienes palabras de vida eterna.

La ley del Señor es perfecta
y es descanso del alma;
el precepto del Señor es fiel
e instruye al ignorante. R.

Los mandatos del Señor son rectos
y alegran el corazón;
la norma del Señor es límpida
y da luz a los ojos. R.

La voluntad del Señor es pura
y eternamente estable;
los mandamientos del Señor son verdaderos
y enteramente justos. R.

Más preciosos que el oro,
más que el oro fino;
más dulces que la miel
de un panal que destila. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 13,18-23

“El que escucha la palabra y la entiende, ése dará fruto”

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Vosotros oíd lo que significa la parábola del sembrador: Si uno escucha la palabra del reino sin entenderla, viene el Maligno y roba lo sembrado en su corazón. Esto significa lo sembrado al borde del camino. Lo sembrado en terreno pedregoso significa el que la escucha y la acepta en seguida con alegría; pero no tiene raíces, es inconstante, y, en cuanto viene una dificultad o persecución por la palabra, sucumbe. Lo sembrado entre zarzas significa el que escucha la palabra; pero los afanes de la vida y la seducción de las riquezas la ahogan y se queda estéril. Lo sembrado en tierra buena significa el que escucha la palabra y la entiende; ése dará fruto y producirá ciento o sesenta o treinta por uno." Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
La fuerza de la palabra es capaz de convertir el corazón humano y hacerlo retornar al vínculo de amor con el creador. En la explicación de la parábola del sembrador, al primer grupo lo sembrado le es arrebatado por las fuerzas de mal que rodean al género humano. Hoy también las fuerzas del mal abundan y seducen a las personas con placeres y gustos vanos. Un segundo grupo es el que escucha gozoso la palabra, pero no la interioriza, por eso claudica ante la primera dificultad. Vivimos en un mundo superficial, sin convicciones profundas. El tercer grupo es de quienes escuchan la palabra, pero las fuerzas de la vanidad y el egoísmo las ahogan y no permiten que el ser humano se desarrolle en plena dignidad. Los espinos de las preocupaciones, los limitados intereses humanos, el placer individual y el orgullo, pueden apoderarse de la persona. El último grupo es el que escucha, entiende y proyecta la palabra de Dios; allí están quienes históricamente han comprendido su misión evangelizadora al servicio del pueblo y sus causas. – Pidamos a Dios que nos abra los ojos y nos agudice el oído para captar los intereses del mal y derrotarlos con la fuerza del amor.

ORACIÓN
Señor, necesitamos comprender y vivir con mayor plenitud, tus preceptos y orientaciones para unas relaciones armoniosas, sanas, equilibradas.  A Moisés le diste las tablas de la ley  y tú, Jesús nos revelas una guía para vivir desde el amor que es donde se resume el principal sentido de tu paso por esta tierra. Ayúdanos por favor para aprender a ser y hacer como tú nos indicas, para nuestro bien y el de nuestro entorno. Amén 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Mensaje o Intercesión por: