lunes, 1 de julio de 2013

JULIO 2013

VENCIENDO NUESTROS NAÍN

Todos tenemos experiencias duras y difíciles en la vida. Nadie puede decir que todo le va o le sale bien, que no tiene contrariedades y dificultades, porque estaría faltando a la verdad. Luego entonces, todos(as) necesitamos aprender a: “enfrentar, solucionar y aprovechar” nuestros Naínes, es decir los dolores, amarguras y dificultades que a  diario tenemos.
Con muchos(as) de ustedes en las pequeñas comunidades en días pasados reflexionamos en torno a este tema con el relato de la viuda de Naín (Lucas 7). Veíamos como en la vida y desde el mensaje del texto muchas veces estamos retados(as) a optar y decidir por dos caminos o situaciones cuando aparecen esas vivencias adversas que son los tiempos Naín. Un camino o decisión que tomo la viuda del evangelio con su grupo fue: huir de esta región y otro camino o decisión de Jesús y su comunidad fue: entrar a Nain, para enfrentar la dificultad, solucionarla y aprovecharla.

Lo primero es saber enfrentar los problemas cuando se nos presentan; porque muchas veces nos la pasamos huyendo y lo único que logramos con ello es aplazar el enfrentamiento pero nada más. Para enfrentar la dificultad hay que ser valiente, pero a la vez paciente.  Esto es, ser personas que dominen sus emociones y que a la vez puedan actuar con sabiduría en medio de las tormentas. Enfrentar supone una vida de comunión y dialogo íntimo con Jesús, el Dios de la vida.

Nos enfrentamos a las adversidades, no para mostrar a los demás que somos poderosos cual supermanes y mujeres maravilla; las enfrentamos para solucionarlas, nunca para crear otras peores. Encontrar soluciones es lo que siempre tenemos que buscar, ni siquiera ganar porque a veces ganar puede ser una manera de no buscarle solución a los problemas y crisis.

De todas estas formas lo más importante es aprovechar los Naínes, para crecer, para ser cada vez una mejor persona. Creo que ese debe ser el verdadero sentido de los sufrimientos, angustias y situaciones duras que a veces tenemos en nuestra existencia. Después de no haber huido, sino enfrentando y solucionando, siempre vamos a sentir que estamos madurando y conquistando nuevos y mejores caminos de vida.

Por eso en este mes, a ti que compartes con nosotros estas reflexiones quisiéramos invitarte a que si estas atravesando en estos días caminos de dificultad no te desesperes, no te desanimes, no llores más, el Espíritu del Resucitado está contigo. Él te da nuevas fuerzas y ánimo para enfrentar esa situación de adversidad.

No te des por vencido(a). En este nuevo mes oro por ti y los tuyos pidiéndole al Buen Jesús  que te bendiga en este momento y te de fuerza para enfrentar, solucionar y aprovechar esos Naínes que tienes que vivir y que te están haciendo sufrir.

Roberto Zamudio

PROMESA BIBLICA DEL MES.
“Jesús sintió compasión, se acercó y le dijo: no llores más. ¡Levántate!”
Luc 7, 13-14

ORACIÓN AL COMENZAR EL DÍA

Buenos Días amado Dios de la vida y el amor. Elevamos oración antes de empezar este hoy de julio. Primero dándote gracias por tu presencia en nuestro existir y llevando nuestra interiorización a través de la Palabra que nos revelas cada día, hacia el discernimiento de esos problemas que nos agobian, que le quitan fuerza  a nuestra vida y  nos dejan ver lo frágil y pequeños que somos en este universo.   

Sí Señor,  a veces ante el no saber qué hacer, la desesperanza y la angustia al ver la magnitud de lo que nos sucede, quisiéramos huir, pero es ahí donde refugiándonos en Ti, nos vas mostrando la manera de salir adelante y te haces como luz en medio de nubes oscuras, regalándonos paz. Por eso hoy te alabamos y te bendecimos porque antes de ir a buscar soluciones desesperadas, nos das la tranquilidad en el corazón para poner todo en tus manos, dándonos la seguridad de que bajo tu guía y haciendo lo que nos corresponde, saldremos vencedores(as).

Gracias por estar siempre a nuestro lado y fortalecernos para continuar por el camino de la vida. Amén

ORACIÓN AL FINALIZAR EL DÍA

Al terminar el día nos disponemos a entrar en Eucaristía contigo Buen Dios, para agradecerte grandemente todo lo vivido hoy. Esas cosas duras, carencias, confrontamientos, rechazos, desacuerdos que pasamos y que tal vez nos sacaron de casillas; esas noticias desalentadoras de lo que sucede en nuestro país y en el mundo; en fin todo lo que produce tristezas y sinsabores, cada noche necesitamos traerlo ante Ti; no para quejarnos sino para hacer una reflexión de como las enfrentamos, dejamos, asimilamos y respondemos, qué nos  enseñan y a qué actitudes y compromiso nos llevan.


Por favor que tu Espíritu nos de ese don de trabajar para ser respuesta positiva en nuestro entorno. También te pedimos esto para tus discípulos(as), nuestras familias y todos los seres humanos, pues solo mirándonos hacia adentro podremos, con tu intervención amorosa, convertirnos en personas cuyas acciones hablen más que sus palabras. Queremos ser en tus manos instrumento de testimonio y bendición. Hasta mañana Hermoso Dios. Y una vez más gracias.

Lunes 01 de Julio de 2013


“EL TIEMPO Y LA SALVACIÓN DE DIOS ES AHORA”

PRIMERA LECTURA
GÉNESIS 18,16-33

“¿Es que vas a destruir al inocente con el culpable?”

Después los visitantes se pusieron de pie y empezaron a caminar hacia la ciudad de Sodoma. Abraham los acompañó para despedirse de ellos. Entonces el Señor pensó: "Debo decirle a Abraham lo que voy a hacer, ya que él va a ser el padre de una nación grande y fuerte. Le he prometido bendecir por medio de él a todas las naciones del mundo. Yo lo he escogido para que mande a sus hijos y descendientes que obedezcan mis enseñanzas y hagan todo lo que es bueno y correcto, para que yo cumpla todo lo que le he prometido." Así que el Señor le dijo:
--La gente de Sodoma y Gomorra tiene tan mala fama, y su pecado es tan grave, que ahora voy allá, para ver si en verdad su maldad es tan grande como se me ha dicho. Así lo sabré.

Dos de los visitantes se fueron de allí a Sodoma, pero Abraham se quedó todavía ante el Señor. Se acercó un poco más a él, y le preguntó:

--¿Vas a destruir a los inocentes junto con los culpables? Tal vez haya cincuenta personas inocentes en la ciudad. A pesar de eso, ¿destruirás la ciudad y no la perdonarás por esos cincuenta? ¡No es posible que hagas eso de matar al inocente junto con el culpable, como si los dos hubieran cometido los mismos pecados! ¡No hagas eso! Tú, que eres el Juez supremo de todo el mundo, ¿no harás justicia?

Entonces el Señor le contestó:

--Si encuentro cincuenta inocentes en la ciudad de Sodoma, por ellos perdonaré a todos los que viven allí.

Pero Abraham volvió a decirle:

--Perdona que sea yo tan atrevido al hablarte así, pues tú eres Dios y yo no soy más que un simple hombre; pero tal vez falten cinco inocentes para completar los cincuenta. ¿Solo por faltar esos cinco vas a destruir toda la ciudad?

Y el Señor contestó:

--Si encuentro cuarenta y cinco inocentes, no la destruiré.

--Tal vez haya solo cuarenta inocentes... --insistió Abraham.

--Por esos cuarenta, no destruiré la ciudad --dijo el Señor.

Pero Abraham volvió a suplicar:

--Te ruego que no te enojes conmigo por insistir tanto en lo mismo, pero tal vez encuentres solamente treinta...

Y el Señor volvió a decirle:

--Hasta por esos treinta, perdonaré a la ciudad.

Abraham siguió insistiendo:

--Mi Señor, he sido muy atrevido al hablarte así, pero, ¿qué pasará si encuentras solamente veinte inocentes?

Y el Señor respondió:
--Por esos veinte, no destruiré la ciudad.
Todavía insistió Abraham:
--Por favor, mi Señor, no te enojes conmigo, pero voy a hablar tan solo esta vez y no volveré a molestarte: ¿qué harás, en caso de encontrar únicamente diez?
Y el Señor le dijo:
--Hasta por esos diez, no destruiré la ciudad.
Cuando el Señor terminó de hablar con Abraham, se fue de allí; y Abraham regresó a su tienda de campaña.  Palabra de Dios.

REFLEXIÓN
Podemos decir, que se encuentran dos rostros del amor. Porque, si bien a primera vista el relato nos parece una especie de "contienda", pronto nos damos cuenta que Abraham y Dios están del mismo lado.

Es muy hermoso ver a Abraham en su actitud de intercesor. Le habíamos visto en su esterilidad, en su soledad, en el aparente fracaso de su existencia, considerada individualmente. Es maravilloso descubrir que este hombre no se encierra en su frustración ni se ahoga en su amargura. Muy al contrario, abre el alma y vela por los intereses de Dios y por la salvación de cuantos puede, aun en medio del fango de aquellas ciudades de tan triste memoria, Sodoma y Gomorra. Esta es una lección para nosotros: no encerrarnos en lo que no nos ha salido bien; aun en medio de nuestras derrotas podemos hacer que triunfe la causa de Dios.

Dios, por su parte, nos muestra un rostro distinto del amor. Es el amor que, como un rayo de infinita claridad, separa al mal voluntario del bien inocente. Bien muestra el Señor que no está dominado por la ira. Escucha con paciente caridad a aquel en quien ha despertado tan generosa intercesión y atiende a cada uno de sus ruegos. Dios no está temblando de rabia. Está protegiendo al bien que todavía es débil del mal que se pretende fuerte. Y esto también es amar.

Necesitamos del amor que nos manifiesta Abraham, ciertamente inspirado y movido por Dios, para descubrir los tesoros de la compasión. Necesitamos también del amor celoso que Dios mismo manifiesta en la escena que hemos visto hoy para cuidar del que no puede cuidarse aún.

SALMO RESPONSORIAL: 102
R. / El Señor es compasivo y misericordioso.

Bendice, alma mía, al Señor,
y todo mi ser a su santo nombre.
Bendice, alma mía, al Señor,
y no olvides sus beneficios. R.

Él perdona todas tus culpas
y cura todas tus enfermedades;
él rescata tu vida de la fosa
y te colma de gracia y de ternura. R.

El Señor es compasivo y misericordioso,
lento a la ira y rico en clemencia;
no está siempre acusando
ni guarda rencor perpetuo. R.

No nos trata como merecen nuestros pecados
ni nos paga según nuestras culpas.
Como se levanta el cielo sobre la tierra,
se levanta su bondad sobre sus fieles. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 8,18-22

“Tú sígueme”

Jesús, al verse rodeado por la multitud, dio orden de pasar al otro lado del lago. Entonces se le acercó un maestro de la ley, y le dijo:
--Maestro, deseo seguirte a dondequiera que vayas.

Jesús le contestó:

--Las zorras tienen cuevas y las aves tienen nidos, pero el Hijo del hombre no tiene donde recostar la cabeza.
Otro, que era uno de sus discípulos, le dijo:
--Señor, déjame ir primero a enterrar a mi padre.
Jesús le contestó:
--Sígueme, y deja que los muertos entierren a sus muertos. Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
El seguimiento de Jesús requiere un compromiso serio y sin condiciones. Pero hay que tener en cuenta que quien llama es Jesús: “No me han elegido ustedes, sino que fui yo quien les elegí” (Jn 15,16). El letrado que quiere seguir a Jesús está bajo los efectos del entusiasmo y la emotividad, al ver la multitud que se arracimaba en torno al Maestro. El verdadero discípulo de Jesús sabe a qué se atiene con el seguimiento: 1) La fe y la libertad como características fundamentales, 2) La disponibilidad para la misión, 3) El camino y las exigencias del reinado de Dios no tienen espera, y 4) La entrega como muestra del servicio a los demás. Por tanto, a la propuesta del Maestro Jesús tiene que seguir una respuesta sincera por parte del discípulo. Si no es así, tarde o temprano desistirá de la misión encomendada. No somos nosotros, por iniciativa propia, los que hemos elegido ser discípulos. Esta elección propia puede ser ocasionada por la euforia y el entusiasmo, que no están fundamentados en un verdadero seguimiento. Esta elección implica una ruptura con nuestro estilo de vida anterior, un tomar conciencia de las implicaciones.

ORACIÓN
Señor, seguirte nos exige ponernos detrás de ti y avanzar por el camino, sin tanto reparo.  Pero difícil es hacerlo en medio de un mundo que atrae con sus sistemas económicos, consumistas y de lucha por obtener el sustento diario. Ayúdanos por favor a desprendernos más y a interceder más para que no dejemos pasar el tiempo, dejándonos distraer  sin hacer lo que nos corresponde como verdaderos discípulos(as). Amén


Martes 02 de Julio de 2013


 “LA PALABRA DE DIOS ES PODEROSA Y EFICAZ”

PRIMERA LECTURA
GÉNESIS 19,15-29

“Ponte a salvo y no mires atrás”

Como ya estaba amaneciendo, los ángeles le dijeron a Lot:
--¡De prisa! Levántate y llévate de aquí a tu esposa y a tus dos hijas, si no quieres morir cuando castiguemos a la ciudad.
Pero como Lot se tardaba, los ángeles lo tomaron de la mano, porque el Señor tuvo compasión de él. También tomaron a su esposa y a sus hijas, y los sacaron de la ciudad para ponerlos a salvo. Cuando ya estaban fuera de la ciudad, uno de los ángeles dijo:
--¡Corre, ponte a salvo! No mires hacia atrás, ni te detengas para nada en el valle. Vete a las montañas, si quieres salvar tu vida.
Pero Lot les dijo:
--¡No, señores míos, por favor! Ustedes me han hecho ya muchos favores, y han sido muy buenos conmigo al salvarme la vida, pero yo no puedo ir a las montañas porque la destrucción me puede alcanzar en el camino, y entonces moriré. Cerca de aquí hay una ciudad pequeña, a la que puedo huir. ¡Déjenme ir allá para salvar mi vida, pues realmente es una ciudad muy pequeña!
Entonces uno de ellos dijo:
--Te he escuchado y voy a hacer lo que me has pedido. No voy a destruir la ciudad de que me has hablado, pero ¡anda!, vete allá de una vez, porque no puedo hacer nada mientras no llegues a ese lugar.
Por eso aquella ciudad fue llamada Sóar.
Cuando ya había amanecido y Lot había llegado a Sóar, el Señor hizo llover fuego y azufre sobre Sodoma y Gomorra; las destruyó junto con todos los que vivían en ellas, y acabó con todo lo que crecía en aquel valle. Pero la mujer de Lot, que venía siguiéndole, miró hacia atrás y allí mismo quedó convertida en una estatua de sal.
Al día siguiente por la mañana, Abraham fue al lugar donde había estado hablando con el Señor; miró hacia Sodoma y Gomorra, y por todo el valle, y vio que de toda la región subía humo, como si fuera un horno.  Así fue como Dios destruyó las ciudades del valle donde Lot vivía, Pero Se Acordó De Abraham Y Sacó A Lot Del Lugar De La Destrucción. Palabra De Dios.

REFLEXIÓN
A pesar de la plegaria de Abraham, Dios no encontró en Sodoma los diez justos que hubieran permitido salvar la ciudad. Sólo Abraham y Lot con su familia se libraron del juicio de Dios. Este castigo de Dios sobre las ciudades de Sodoma y Gomorra se ha convertido en el prototipo de castigo contra la corrupción y la maldad.
Aquellas ciudades, que se hallaban cerca del Mar Muerto, muy posiblemente desapareciendo debido a algún fenómeno natural: el fuego, un terremoto o, tal vez, una erupción, ya que se encontraban en un terreno que presenta características de tipo volcánico. Pero el Génesis, con una clara intención religiosa, atribuye su desaparición al juicio e Dios, que castiga la maldad de sus habitantes.

Pero hay un detalle que puede iluminar nuestra vida: la mujer de Lot cayó en la tentación de mirar atrás y se convirtió en una columna de sal. La leyenda popular debió de explicar así la existencia de una roca de forma caprichosa, en la región estéril y salada del Mar Muerto.

SALMO RESPONSORIAL: 25
R: Señor, guíame con tu justicia

Tengo ante los ojos, Señor, tu bondad.
Escrútame, Señor, ponme a prueba,
sondea mis entrañas y mi corazón,
porque tengo ante los ojos tu bondad,
y camino en tu verdad. R.

No arrebates mi alma con los pecadores,
ni mi vida con los sanguinarios,
que en su izquierda llevan infamias,
y su derecha está llena de sobornos. R.

Yo, en cambio, camino en la integridad;
sálvame, ten misericordia de mí.
Mi pie se mantiene en el camino llano;
en la asamblea bendeciré al Señor. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 8,23-27

“Dio una orden terminante a los vientos y al mar, y sobrevino una gran calma”

Jesús subió a la barca, y sus discípulos lo acompañaron. En esto se desató sobre el lago una tormenta tan fuerte que las olas cubrían la barca. Pero Jesús se había dormido. Entonces sus discípulos fueron a despertarlo, diciéndole:
--¡Señor, sálvanos! ¡Nos estamos hundiendo!
Él les contestó:
--¿Por qué tanto miedo? ¡Qué poca fe tienen ustedes!
Dicho esto, se levantó y dio una orden al viento y al mar, y todo quedó completamente tranquilo. Ellos, admirados, se preguntaban:
--¿Pues quién será este, que hasta los vientos y el mar lo obedecen? Palabra del Señor.

REFLEXIÓN:
El “relato simbólico” de este pasaje evangélico quiere darnos a entender que, muchas veces, la poca fe que mostramos en quien nos ha llamado es la causa de las deficiencias y falta de sintonía con el proyecto del Padre: El Reino. La tempestad simboliza los momentos críticos, de dificultad que se presentan en nuestras vidas. Muchas veces queremos renunciar, desistir, abandonar el camino recorrido cuando salen a nuestro encuentro los conflictos, y no nos damos cuenta de que es precisamente en esos momentos cuando nuestra fe se va purificando y haciendo cada vez más fuerte. Otra simbología que nos presenta el texto es la de Jesús durmiendo en medio de la tempestad. Obviamente, nadie podría dormir en medio de una tempestad, y menos como la descrita en el texto. La tranquilidad en que se encuentra Jesús durmiendo se contrapone a la angustia de los discípulos. Esto nos quiere dar a entender, por medio de la simbología utilizada por el evangelista Mateo, la poca comprensión que tuvieron los discípulos del mensaje de Jesús. Simplemente no entendían.

ORACIÓN

Reconocemos Dios que tus obras con poder para que todo lo que sucede en la naturaleza que creaste y en quienes te seguimos, sea para bien. Ayúdanos por favor a luchar como tú por un mundo justo, que cuide el planeta, dejándose guiar por ti, a través del mensaje de tu Palabra que nos invita a amar sin medida y a confiar en tu acción. Amén

Miércoles 03 de Julio de 2013

Santo Tomás apóstol

“¿VEMOS PARA CREER O CREEMOS POR LA FE?”

PRIMERA LECTURA
EFESIOS 2,19-22

“Estáis edificados sobre el cimiento de los apóstoles”

Hermanos: Ya no sois extranjeros ni forasteros, sino que sois ciudadanos de los santos y miembros de la familia de Dios. Estáis edificados sobre el cimiento de los apóstoles y profetas, y el mismo Cristo Jesús es la piedra angular. Por él todo el edificio queda ensamblado, y se va levantando hasta formar un templo consagrado al Señor. Por él también vosotros os vais integrando en la construcción, para ser morada de Dios, por el Espíritu.  Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Celebramos en este día la memoria y el discipulado del apóstol Tomás, figura destacada especialmente en el Evangelio de Juan. En esta primera lectura Pablo a la Comunidad de Éfeso, manifiesta la íntima conexión que existe entre el misterio de Cristo y el de la comunidad (iglesia).En Cristo, todos, tanto los lejanos (paganos) como los cercanos (judíos), encuentran el camino de la reconciliación y desde la diversidad construyen la unidad. Ahora, todos son un solo pueblo, unidos por el amor  fraterno y solidario. Gracias al Padre Dios, que bendice a los suyos en la persona y proyecto de su Hijo Jesucristo.
La iglesia-comunidad constituye el edificio sagrado, la verdadera morada de Dios, cuyos cimientos son los discípulos(as) misioneros(as), apóstoles(as) y profetas. Ahora bien, como a sus apóstoles también a nosotros nos llama hoy el Señor a que volvamos a la Casa Paterna; es decir a aceptar el camino y la propuesta de su Hijo Jesús, que es un proyecto de casa abierta, de amor misericordioso y servicio. A esa invitación de amor ojalá podamos darle la mejor de las respuestas. Optando por la vida damos culto de verdadera adoración al verdadero templo que Dios ha construido, que es la vida humana. 

SALMO RESPONSORIAL: 116
R. / Id al mundo entero y proclamad el Evangelio.

Alabad al Señor, todas las naciones,
aclamadlo todos los pueblos. R.

Firme es su misericordia con nosotros,
su fidelidad dura por siempre. R.

LECTURA DE EVANGELIO
JUAN 20,24-29

¡Señor mío y Dios mío!

Tomás, uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los otros discípulos le decían: "Hemos visto al Señor." Pero él les contestó: "Si no veo en sus manos la señal de los clavos, si no meto el dedo en el agujero de los clavos y no meto la mano en su costado, no lo creo."

A los ocho días, estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús, estando cerradas las puertas, se puso en medio y dijo: "Paz a vosotros." Luego dijo a Tomás: "Trae tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi costado; y no seas incrédulo, sino creyente." Contestó Tomás: "¡Señor mío y Dios mío!" Jesús le dijo: "¿Porque me has visto has creído? Dichosos los que crean sin haber visto." Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
El evangelio de hoy presenta una clara escena cuyo meollo es la radicalidad en el seguimiento de Jesús. Ir a la otra orilla del lago es ir con Jesús desde las seguridades hasta las inseguridades, desde las certezas a los riesgos. Un letrado se ofrece para seguir a Jesús. El letrado es confrontado en su vida misma, pues seguir a Jesús implica despojarse de las rígidas estructuras de poder que acaparan su mente y su corazón como líder religioso. En el segundo caso, otro potencial discípulo solicita permiso para ir primero a enterrar a su padre. En otras palabras, que le quisiera seguir, pero no ahora. Jesús confronta también a este potencial discípulo sobre la urgencia de romper los afectos familiares que le amarran –por más dignos que sean– y que no le permiten ser libre para seguirle. La invitación es, pues, para todos los creyentes; invitación a seguir a Jesús, conscientemente, sabiendo que ello implica renunciar o tomar distancia de todo aquello que quite la libertad y la autonomía. – Ser radicales como Jesús es estar en permanente confrontación con los comportamientos que tenemos y mirar la otra orilla del lago como el lugar de la misión a la que el Maestro nos invita.

ORACIÓN

A muchas y muchos de nosotros,  a quienes te nos has revelado, nos nace del corazón sentirnos necesitados de ti, de un Dios bueno y misericordioso, sin embargo, Señor, perdona esos momentos en que las dificultades, tal vez  nos llevan a olvidar que no hay que ver para creer, porque Tú eres real y nos has dado muchas muestras de tu ser camino, verdad y vida en nuestra existencia. Amén

Jueves 04 de Julio de 2013


“LA FE ES LA RESPUESTA”

PRIMERA LECTURA
GÉNESIS 22,1-19

“El sacrificio de Abrahán, nuestro padre en la fe”

En aquellos días, Dios puso a prueba a Abrahán llamándole: "¡Abrahán!" Él respondió: "Aquí me tienes." Dios le dijo: "Toma a tu hijo único, al que quieres, a Isaac, y vete al país de Moria y ofrécemelo allí en sacrificio en uno de los montes que yo te indicaré." Abrahán madrugó, aparejó el asno y se llevó consigo a dos criados y a su hijo Isaac; cortó leña para el sacrificio y se encaminó al lugar que le había indicado Dios. El tercer día levantó Abrahán los ojos y descubrió el sitio de lejos. Y Abrahán dijo a sus criados: "Quedaos aquí con el asno; yo con el muchacho iré hasta allá para adorar, y después volveremos con vosotros." Abrahán tomó la leña para el sacrificio, se la cargó a su hijo Isaac, y él llevaba el fuego y el cuchillo. Los dos caminaban juntos. Isaac dijo a Abrahán, su padre: "Padre." Él respondió: "Aquí estoy, hijo mío." El muchacho dijo: "Tenemos fuego y leña, pero, ¿dónde está el cordero para el sacrificio?" Abrahán contestó: "Dios proveerá el cordero para el sacrificio, hijo mío." Y siguieron caminando juntos.

Cuando llegaron al sitio que le había dicho Dios, Abrahán levantó allí el altar y apiló la leña, luego ató a su hijo Isaac y lo puso sobre el altar, encima de la leña. Entonces Abrahán tomó el cuchillo para degollar a su hijo; pero el ángel del Señor le gritó desde el cielo: "¡Abrahán, Abrahán!" Él contestó: "Aquí me tienes." El ángel le ordenó: "No alargues la mano contra tu hijo ni le hagas nada. Ahora sé que temes a Dios, porque no te has reservado a tu hijo, tu único hijo." Abrahán levantó los ojos y vio un carnero enredado por los cuernos en una maleza. Se acercó, tomó el carnero y lo ofreció en sacrificio en lugar de su hijo. Abrahán llamó a aquel sitio "El Señor ve", por lo que se dice aún hoy "El monte del Señor ve".

El ángel del Señor volvió a gritar a Abrahán desde el cielo: "Juro por mí mismo -oráculo del Señor-: Por haber hecho esto, por no haberte reservado tu hijo único, te bendeciré, multiplicaré a tus descendientes como las estrella del cielo y como la arena de la playa. Tus descendientes conquistarán las puertas de las ciudades enemigas. Todos los pueblos del mundo se bendecirán con tu descendencia, porque me has obedecido." Abrahán volvió a sus criados, y juntos se pusieron en camino hacia Berseba. Abrahán se quedó a vivir en Berseba. Palabra de Dios.

REFLEXIÓN
Para comprender la belleza y la grandeza de Abraham en el acto de sacrificar a su propio hijo nuestra mirada tiene que adaptarse a una realidad, a una escala y a un mundo que son muy diversos de los nuestros.

Para nosotros existen los Derechos Humanos. Contamos con siglos de desarrollo filosófico y de instituciones sociales que presumimos estables, como referencias con las cuales contamos espontáneamente: leyes, gobiernos, policía, juzgados, sistemas jurídicos, penales y de pensamiento en los que nos sentimos cómodamente instalados, hablando en general. Nada de esto tenía Abraham.

El mundo de Abraham tenía otros referentes. Un mundo de tribus que hoy llamaríamos semisalvajes, acostumbradas a matar o morir, si se daba confrontación con otras tribus. Un mundo agreste en el que los débiles no tenían otro destino sino una temprana muerte. Un mundo plagado de incertidumbres, en el que cada cual a su manera trataba de ganarse el favor de los dioses.
Con cierta lógica, ese mundo funcionaba bajo el esquema del comercio con la divinidad: el que da poco a los dioses espera recibir poco de ellos; el que da mucho espera tener asegurado mucho. Abraham no podía conocer otro mundo distinto de ese. Y en ese mundo los papás sacrificaban sus hijos precisamente porque los amaban. Como eran preciosos para ellos, consideraban que destrozando el propio corazón con un sacrifico de tanto precio se estaban asegurando una generosidad proporcional de parte de sus dioses. Por eso al iniciar un proyecto "grande," como por ejemplo: intentar fundar una ciudad, echaban los cimientos sobre el cadáver sacrificado de un hijo, a menudo el primogénito. De todo esto hay constancia bíblica y extrabíblica.


SALMO RESPONSORIAL: 114
R. / Caminaré en presencia del Señor en el país de la vida.

Amo al Señor, porque escucha
mi voz suplicante,
porque inclina su oído hacia mí
el día que lo invoco. R.

Me envolvían redes de muerte,
me alcanzaron los lazos del abismo,
caí en tristeza y angustia.
Invoqué el nombre del Señor:
"Señor, salva mi vida." R.

El Señor es benigno y justo,
nuestro Dios es compasivo;
el Señor guarda a los sencillos:
estando yo sin fuerzas, me salvó. R.

Arrancó mi alma de la muerte,
mis ojos de las lágrimas,
mis pies de la caída.
Caminaré en presencia del Señor
en el país de la vida. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 9,1-8

“La gente alababa a Dios, que da a los hombres tal potestad”

En aquel tiempo, subió Jesús a una barca, cruzó a la otra orilla y fue a su ciudad. Le presentaron un paralítico, acostado en una camilla. Viendo la fe que tenían, dijo al paralítico: "¡Ánimo, hijo!, tus pecados están perdonados." Algunos de los escribas se dijeron: "Éste blasfema." Jesús, sabiendo lo que pensaban, les dijo: "¿Por qué pensáis mal? ¿Qué es más fácil decir: "Tus pecados están perdonados", o decir: "Levántate y anda"? Pues, para que veáis que el Hijo del hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados -dijo dirigiéndose al paralítico-: "Ponte en pie, coge tu camilla y vete a tu casa."" Se puso en pie, y se fue a su casa. Al ver esto, la gente quedó sobrecogida y alababa a Dios, que da a los hombres tal potestad.  Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
Las autoridades religiosas de Israel condenan la actitud sanadora y solidaria de Jesús. En la cultura de Jesús la parálisis, como otras enfermedades, eran consideradas consecuencia del pecado de generaciones anteriores; las personas que las padecían estaban excluidas de la vida social, económica y religiosa. Tal vez lo que más les incomoda a los letrados es la dignificación que Jesús hace de las personas que han sido tiradas fuera por las estructuras del poder y los preceptos religiosos. La curación genera asombro en los vecinos; pero más que eso, es importante rescatar la actitud de alabanza por el perdón y la curación de uno de los suyos. Es urgente volver la mirada sobre el carácter profético de la fe cristiana, que hoy tiende a desdibujarse en actitudes marcadas por la indiferencia y el individualismo. Hoy como ayer, la solidaridad con los otros sigue siendo un imperativo del evangelio.

ORACIÓN
Como no creer que nos perdonaste todo lo que vivimos fuera de Ti. Que nos rescataste y nos enseñaste una manera de vivir, por eso te pedimos por favor que acrecientes nuestra fe para que seamos verdaderamente capaces de dejarte actuar a favor nuestro, según tu Espíritu que sabe los que nos conviene y el poder que tienes  para perdonar, sanar y transformarnos. Amén.


Viernes 05 de Julio de 2013


“EL AMOR ES LA EXPRESIÓN DE LA VOLUNTAD DE DIOS”

PRIMERA LECTURA
GÉNESIS 23,1-4.19;24,1-8.62-67

“Isaac con el amor de Rebeca, que se consoló de la muerte de su madre”

Sara vivió ciento veintisiete años, y murió en Villa Arbá (hoy Hebrón), en país cananeo. Abrahán fue a hacer duelo y a llorar a su mujer. Después dejó a su difunta y habló a los hititas: "Yo soy un forastero residente entre vosotros. Dadme un sepulcro en propiedad, en terreno vuestro, para enterrar a mi difunta." Después Abrahán enterró a Sara, su mujer, en la cueva del campo de Macpela, frente a Mambré (hoy Hebrón), en país cananeo.

Abrahán era viejo, de edad avanzada, el Señor lo había bendecido en todo. Abrahán dijo al criado más viejo de su casa, que administraba todas las posesiones: "Pon tu mano bajo mi muslo, y júrame por el Señor, Dios del cielo y Dios de la tierra, que, cuando le busques mujer a mi hijo, no la escogerás entre los cananeos, en cuya tierra habito, sino que irás a mi tierra nativa, y allí buscarás mujer a mi hijo Isaac." El criado contestó: "Y si la mujer no quiere venir conmigo a esta tierra, ¿tengo que llevar a tu hijo a la tierra de donde saliste?" Abrahán le replicó: "De ninguna manera lleves a mi hijo allá. El Señor, Dios del cielo, que me sacó de la casa paterna y del país nativo, que me juró: "A tu descendencia daré esta tierra", enviará su ángel delante de ti, y traerás de allí mujer para mi hijo. Pero, si la mujer no quiere venir contigo, quedas libre del juramento. Sólo que a mi hijo no lo lleves allá."

Mucho tiempo después, Isaac se había trasladado del "Pozo del que vive y ve" al territorio del Negueb. Una tarde, salió a pasear por el campo y, alzando la vista, vio acercarse unos camellos. También Rebeca alzó la vista y, al ver a Isaac, bajó del camello y dijo al criado: "¿Quién es aquel hombre que viene en dirección nuestra por el campo?" Respondió el criado: "Es mi amo". Y ella tomó el velo y se cubrió. El criado le contó a Isaac todo lo que había hecho. Isaac la metió en la tienda de su madre Sara, la tomó por esposa y con su amor se consoló de la muerte de su madre. Palabra de Dios.

REFLEXIÓN
Si bien la relación de Dios con Abraham es intensamente personal y única, no se agota en él sino que queda abierta a la descendencia que le fue prometida. Y esa descendencia en un primer momento es Isaac.

La petición de Abraham a su mayordomo es extraña y pretende responder al hecho de que viven en tierra extranjera. Debe conseguir una esposa para Isaac evitando dos cosas, que la esposa sea de la tierra donde se encuentran y que el esposo vuelva a la tierra de donde salieron. Estos requerimientos pueden parecer ridículos en nuestro tiempo pues para nosotros la felicidad o estabilidad de las parejas no depende tanto de cosas como el lugar de origen de la esposa o el lugar de residencia del esposo.

En aquellos tiempos, en cambio, estos asuntos tenían relevancia porque la creencia religiosa estaba ligada estrechísimamente a la tribu o clan, y este estaba ligado a la tierra o tierras donde vivía. Un matrimonio con una cananea implicaba que Isaac entraba a formar parte de una familia pagana; irse a vivir de nuevo a Caldea, de donde Abraham había salido, implicaba también pertenecer a un ancestro politeísta. Lo que Abraham quiere es una esposa para su hijo, pero una esposa que pueda ser desligada de la tierra y de la parentela, de modo que no sea un estorbo para la realidad nueva y la alianza nueva que Dios ha sellado con Abraham y que debe seguir su camino. Las complicadas diligencias nupciales tuvieron buen resultado y así Rebeca llegó a ser esposa del heredero de la promesa.

SALMO RESPONSORIAL: 105
R. / Dad gracias al Señor porque es bueno.

Dad gracias al Señor porque es bueno,
porque es eterna su misericordia.
¿Quién podrá contar las hazañas de Dios,
pregonar toda su alabanza? R.

Dichosos los que respetan el derecho
y practican siempre la justicia.
Acuérdate de mí por amor a tu pueblo. R.

Visítame con tu salvación:
para que vea la dicha de tus escogidos,
y me alegre con la alegría de tu pueblo,
y me gloríe con tu heredad. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MATEO 9,9-13

“No tienen necesidad de médico los sanos; misericordia quiero y no sacrificios”

En aquel tiempo, vio Jesús al pasar a un hombre llamado Mateo, sentado al mostrador de los impuestos, y le dijo: "Sígueme." Él se levantó y lo siguió. Y, estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos. Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: "¿Cómo es que vuestro maestro come con publicanos y pecadores?" Jesús lo oyó y dijo: "No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos. Andad, aprended lo que significa "misericordia quiero y no sacrificios": que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores." Palabra del Señor.

REFLEXIÓN
La misericordia y el llamado de Dios, no se encierran en los estrechos límites de la condición social creada por los seres humanos. Jesús le pide a Mateo que le siga, lo que implica una renuncia, no sólo a su oficio, sino a su condición social. Los fariseos, basados en sus rígidas estructuras morales y en su nacionalismo excluyente, cuestionan el comportamiento de Jesús y de los discípulos. Jesús reacciona acudiendo al criterio de la tradición profética, “Misericordia quiero y no sacrificios”. Jesús se identifica como médico enviado a enfermos y a pecadores y no a sanos ni a justos. Esta inversión del amor de Dios muestra que el querer de Dios es diferente a la racionalidad humana, pero esto no puede entenderse como contradicción en el proyecto de Jesús; por el contrario, deja bien claro que quien quiera seguirle debe emprender su propio camino de conversión. – Muchas veces, la fe cristiana se queda enredada en formalismos y formulismos, en lo que se puede o no hacer, en lo que aparentemente es bueno o malo; sin embargo, el llamado de Jesús a vivir en auténtica misericordia y generosidad es uno de los principios que no pueden relativizarse en la vida cristiana.

ORACIÓN

Señor nos has enseñado que el amor es capaz de cambiar un corazón, de devolver la vida y la alegría, es capaz de superar el dolor, la enfermedad y hasta la muerte. El amor genera y cuida la vida. Ayúdanos por favor a llenarnos de este don para no juzgar, para sentirnos amados por Ti y para darlo mientras vivamos, con hechos concretos en todos los espacios donde nos movamos. Creemos en que es posible una nueva civilización basada en tu amor. Amén