ORACIÓN AL COMENZAR EL DÍA
Gracias
Amado Dios por este bonito mes de mayo donde celebramos signos de vida tan
importantes como la pascua de tu resurrección, el discipulado de María de Nazaret
como el corazón de las madres y nos preparamos para la fiesta de pentecostés en
comunidad, dentro de la cual llega tu Espíritu Santo.
Ayúdanos
Señor a tomar cada día estos signos a través de tu Palabra como guía para
nuestro proceso de conversión personal y
comunitario, que nos lleve a ser mejores discípulos(as), madres y padres de
familia, que logren aplicar la formación de los hijos en sabiduría, respeto y
armonía familiar en busca de un mundo más humano y solidario, basados en ese
Amor misericordioso, del Padre, el Hijo y El espíritu Santo, que muchos
queremos vivir.
Ya
de camino a nuestras labores cotidianas nos encomendamos a Ti, seguros(as) que
nos cubres con tu preciosa Sangre, nos fortaleces y guías con la luz de tu
Espíritu Santo, para que logremos sobrellevar todas las circunstancias que se nos presenten.
Gracias,
te alabamos y bendecimos, exclamando: Amado “Rabboni”
ORACIÓN AL FINALIZAR EL DÍA
Terminada
la jornada de hoy y en la quietud de cada noche de este mes, queremos decirte
que eres un Dios maravilloso, Padre-Madre
que nos hiciste mujeres con la capacidad de generar vida y amar sin medida,
pero también creaste al hombre con sensibilidad para desarrollar un amor
tierno, fiel y esforzado.
Sentimos
suplicarte Señor, que no permitas que el mundo siga avanzando en oscuridad por
estar sin Ti, pues parecemos como zombis, amanecemos y anochecemos sin hacer un
alto de reflexión sobre lo que fue el día, sobre lo que pasó en nuestro entorno,
lo que necesitamos cambiar, cómo fue nuestra relación contigo y con el prójimo
con quien interactuamos. Necesitamos que nos ayudes a recrear o volver a
ser familias y comunidades, sin tanta ciencia y avances tecnológicos, que
guarden un respeto hacia Ti, hacia la familia, las personas, la naturaleza y la
vida, que se comuniquen, compartan y oren para que Tú seas el centro de su vida. Los de la
casa-mesa-comunidad, abiertos a la amistad, al buen trato, al perdón y a
distribuir el pan en la igualdad y la equidad.
Oh Dios que esta noche soñemos y anhelemos tu proyecto, tu Reino verdadero, y recibamos tu Espíritu Santo para que cada
mañana podamos retomar este sentir junto con nuestra comunidad y nuestra familia
y nos propongamos vivirlo como pequeñas
células, para que esto que parece una utopía, lo logremos alcanzar cada vez
mejor. Tú sabes que lo hemos intentado muchas veces, y aunque damos pasos y
muchas de nuestras actitudes pueden haber cambiado, aún no se logra consolidar
este sistema de vida tan bello como lo vivió tu pueblo y las primeras
comunidades de Jesús. Hazlo Señor, por
favor derriba lo que tengas que derribar y
síguenos cambiando, porque has resucitado y eres nuestra alegría y
nuestro gozo, aunque el mundo quiera derribarnos. Amén.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Mensaje o Intercesión por: