“SU PALABRA DÍA A DÍA NOS TRANSFORMA”
Dando
gracias y bendiciendo sinceramente a nuestro Buen Dios, quiero iniciar este nuevo año; confiado en su amor
misericordioso y en su poder sin límites que nos hace vencedores. Seguro que a
lo largo de este año tendremos que enfrentar batallas o situaciones de
adversidad, quiero desde hoy motivarles e invitarles a que lo hagamos siempre
confiados en la generosidad de nuestro Dios y diciéndole como el salmista: “El
Señor es mi luz y mi salvación, ¿De quién podre tener miedo?, el Señor defiende
y protege mi vida ¿A quién habré de temer?”(Salmo 27). Abandonados en esta
confianza en el Señor, seguros(as) que en el encuentro con su Palabra día a día
conoceremos, amaremos, seguiremos y serviremos más a la persona maravillosa de
Jesús. El encuentro con esta bendita Palabra es la única garantía que vamos a
poder enfrentar y derrotar todas
nuestras adversidades y adversarios. La Palabra de Dios es fuente de luz y de
fe; esto lo afirma San Pablo en la carta a los Romanos 10,17: “La fe nace del
oír y el mensaje que se escucha es la
Palabra de Cristo”. El encuentro diario con esta Palabra nos fortalece en
nuestra fe y nos da la plena certeza que el Señor esta a nuestro lado en todas
las situaciones cotidianas. Por duras que sean algunas pruebas que nos
angustian, no olvidemos que “En todo interviene Dios para el bien de los que le
aman” (Romanos 8,28). Anteriormente
decimos que la Palabra es luz que nos ilumina el camino es decir se hace
discernimiento; y el discernimiento es clave en todas las decisiones que
tengamos que tomar en este nuevo año; el salmista llega a confesar: “Tu Palabra
es lámpara a mis pies y una luz en mi camino”. Escuchar la Palabra de Dios,
meditarla, creerla, guardarla en el corazón y ponerla por obra es la seguridad
de tomar sabias y prudentes decisiones en nuestra vida. El creyente que quiera
construir su vida sobre una roca firme y orientarla con seguridad esta invitado
a seguir estos anteriores consejos.
Sé
que comenzando año todavía estamos inundados con el espíritu de alegría,
esperanza y ánimo de la Navidad; sé que todavía están vivos muchos sueños,
metas y proyectos; pero hay que tener cuidado que no se nos empiece a infiltrar
el espíritu del desencanto, desánimo y pereza, cuando van apareciendo los
problemas y las dificultades. En el encuentro diario con esa Palabra nuestra
expectativa debe ir creciendo aún en momentos de dificultades. No olvidar que
así como al pueblo en la antigüedad para cada uno de nosotros hoy, comenzando
este nuevo año Dios sigue teniendo un propósito o gran deseo para con nuestras
vidas: “Llevarnos a la tierra prometida”.
Para ello nos recuerda el ejemplo de un servidor que es llamado Caleb
que a diferencia de los demás en los momentos de la prueba supo ser fiel y
seguir por encima de todo al Buen Dios y por eso pudo entrar a la bendición que
es la Tierra Prometida.
Que
este 2018 desde sus comienzos sea un batallar y esforzarnos día a día como
fruto del encuentro con su Palabra para ir entrando poco a poco al cumplimiento
y realización de todas esas maravillosas promesas del amor de Dios que
podríamos llamar Tierra Prometida o desarrollo de la felicidad plena o
realización de las diferentes áreas de nuestra existencia humana.
Los
animo a seguir caminando juntos(as) en este camino de búsqueda hacia el
verdadero sentir de nuestra existencia.
Roberto
Zamudio
PROMESA
BÍBLICA DEL MES
“A mi siervo Caleb, por cuanto fue fiel y
hubo en el él otro espíritu y decidió seguirme lo meteré a él y a su
descendencia en la tierra prometida”. Números 14,24
ORACIÓN
AL COMENZAR EL DÍA
El
primer sentimiento, pensamiento y palabra comenzando este nuevo año es:
“GRACIAS BENDITO ALABADO Y ADORADO SEAS POR SIEMPRE, PADRE DIOS”. Gracias por
el renovar tú venida en mi vida, en la Navidad que acabo de celebrar. Gracias
por este nuevo año 2018 que estoy iniciando, que de antemano quiero que sea
para ti, y desde tu nombre y presencia para nuestros hermanos como bendición.
Reconozco que te necesito más que ayer, más que el año anterior, por eso Buen
Dios no te canses de seguir viniendo y naciendo a través de esta cartillita y
diferentes circunstancias a mi vida y la de los que me rodean. Ayúdame a seguir
creciendo en fe, en esperanza, en misericordia, perdón y solidaridad con
nuestros hermanos. Dame del Espíritu de valentía que le diste a tu siervo Caleb
y empújame con autoridad a enfrentar y derrotar a los Jericós (Obstáculos) que
se me presentaran en este nuevo año. Renuévame cada vez más, con la luz, sabiduría y visión
de tu Espíritu Santo. Llévame a hacer cada mes y cada día de este año una
oportunidad de encuentro contigo, con tu creación, con nuestros hermanos y con
nosotros mismos. Colócame personal y comunitariamente en sintonía con los
diferentes temas, reflexiones y propuestas que a través de esta cartillita
seguiré lanzando en tu nombre a mis hermanos(as). Ayúdame a seguir avanzando en
el proceso de cambio y transformación. Que pueda hacer del encuentro diario
contigo una oportunidad para experimentar buenas noticias, y ser instrumento o
motivo de una “Buena Noticia para los demás”. En tu Buen Nombre Señor Jesús,
Dios de la vida, quiero iniciar este nuevo día y este nuevo año, seguro(a) que
tu bendición siempre va a estar conmigo. Amén
ORACIÓN
AL FINALIZAR EL DÍA
Amado Dios, de
igual manera como inicié el día en la mañana, ahora al llegar la noche me
dispongo a ir al descanso no sin antes: Reconocer, valorar, agradecer y
bendecir todas las muestras y signos de tu bondad que a lo largo de este día me
han acompañado. Gracias por todo lo vivido, aprendido y compartido a lo largo
de este día. He experimentado tu amor en cada oportunidad y circunstancia que
hoy he tenido que enfrentar. Gracias por regalarme nuevas fuerzas, cuando mi
cuerpo por el trabajo físico se sintió desfallecer, gracias por tu Espíritu de
vida que me animó para seguir adelante cuando tuve que enfrentar momentos
difíciles en este día. Inúndame a esta hora de la guía y animación de tu
Espíritu Santo para que a través de Él pueda prepararme para un buen descanso;
ayúdame a controlar y dominar esa nuestra naturaleza humana que tanto se
equivoca en los momentos de relacionarme y convivir con mi prójimo. Me abandono
a esta hora en ti, en tus manos tiernas de Madre y Padre, sometomi sueño y el reposo que me provees para
recuperar fuerzas y así estar preparado
para el día de mañana que con ilusión y esperanza quiero desde ya empezar a
vivir. Gracias y Bendito seas por siempre. Amén
CUMPLEAÑOS
Saludamos con
especial cariño a cada una y cada uno de ustedes y en oración agradecemos al
Dios de la vida y el amor por el regalo de un nuevo año de sus benditas vidas.
1 Diana Carolina
Franco e Irma Garzón
4. Janet Romero
5. Nazly Hurtado
y Francisco Zamudio
6. Martha Prada
7. Beatriz
Hernández y Rosalba Avendaño
11. Katherine
León
14. Aniversario
Silvia y Servando González
15. Rosa Reina e
Iván Rodríguez
20. Magda
Táutiva
24. Luz Marina Triana
DÍAS ESPECIALES
1.
Año
Nuevo y Día Mundial de la paz
5. Día del Fotógrafo(a)
6. Día de Reyes
Lunes 01 de Enero
de 2018
Año Nuevo y Día Mundial
de la Paz.
“BAJO TU AMPARO
NOS ACOGEMOS”
PRIMERA LECTURA
NÚMEROS 6, 22-27
“Invocarán mi
nombre sobre los israelitas, y yo los bendeciré”
El Señor habló a Moisés:
"Di a Aarón y a sus hijos: Ésta es la fórmula con que bendeciréis a los
israelitas: "El Señor te bendiga y te proteja, ilumine su rostro sobre ti
y te conceda su favor. El Señor se fije en ti y te conceda la paz". Así
invocarán mi nombre sobre los israelitas, y yo los bendeciré." Palabra de
Dios.
REFLEXIÓN
La
primera lectura de hoy nos trae una bendición, pero sobre todo nos enseña a
bendecir.En Números encontramos
la llamada bendición aaronítica (de Aarón), porque se afirma que Dios la reveló
a Moisés para que éste a su vez la enseñara a Aarón y a sus hijos, los
sacerdotes de Israel, para que con ella bendijeran al pueblo. No es un acto trivial ni una simple costumbre
social, bendecir; es nuestro modo de acoger en cada aspecto de la vida al Dios
de la alianza. Nuestras bendiciones mutuas son prenda de la bendición del
Señor. Podemos sintetizar los buenos deseos de esta hermosa bendición del libro
de los Números en tres aspectos, que son también los mejores deseos para el año
que empieza: protección, amistad con Dios y paz. Defendidos del mal y
fortalecidos en el bien: este es rostro de la raza bendecida. La bendición
bíblica, que han popularizado especialmente los frailes franciscanos, no habla
directamente de la amistad con Dios, sino del resplandor de su rostro, la
cercanía de su favor y benevolencia. Una vida bendecida va acompañada del
brillo del rostro de Dios y de una cálida proximidad a su amor y su bondad.
Corresponde, pues, a lo que solemos llamar "permanecer en la gracia de
Dios". El gran anhelo al bendecir es en realidad la vida de la gracia.
Buen comienzo del año en
bendición y recibiendo la bendición de Dios. Bendigamos al Señor por todo lo
que hemos vivido hasta ahora, y por el nuevo año que aparece ante nuestros
ojos: nuevos días por delante, nuevas oportunidades, tiempo a nuestra
disposición... Alabemos al Señor por la misericordia que ha tenido con nosotros
hasta ahora. Y también porque nos va a permitir ser también nosotros una bendición
en este nuevo año que comienza: bendición para los hermanos, para todos los que
nos rodean y bendición para Dios mismo. Año nuevo 2018, vida nueva, bendición
de Dios.
SALMO
RESPONSORIAL: 66
R./ El Señor
tenga piedad y nos bendiga.
El Señor tenga piedad y nos bendiga,
ilumine su rostro sobre nosotros;
conozca la tierra tus caminos,
todos los pueblos tu salvación. R.
Que canten de alegría las naciones,
porque riges el mundo con justicia,
riges los pueblos con rectitud
y gobiernas las naciones de la tierra. R.
Oh Dios, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben.
Que Dios nos bendiga; que le teman
hasta los confines del orbe. R.
OREMOS
CON EL SALMO
En esta hermosa oración, compuesta para celebrar la recolección de las
cosechas la comunidad agradece al Señor los frutos de la tierra. Además, le
suplica que renueve constantemente sus bendiciones, a fin de que todos los
pueblos reconozcan en el Dios de Israel al único Dios.
SEGUNDA LECTURA
GÁLATAS 4,4-7
“Envió Dios a su
hijo, nacido de una mujer”
Hermanos: Cuando se
cumplió el tiempo, envió Dios a su Hijo, nacido de una mujer, nacido bajo la
Ley, para rescatar a los que estaban bajo la Ley, para que recibiéramos el ser
hijos por adopción. Como sois hijos, Dios envió a nuestros corazones al
Espíritu de su Hijo que clama: "¡Abbá! (Padre)." Así que ya no eres
esclavo, sino hijo; y si eres hijo, eres también heredero por voluntad de Dios.
Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
En Gálatas encontramos
una apretada síntesis de lo que Pablo nos enseña en tantos otros pasajes de sus
cartas. En primer lugar, nos dice que el tiempo que vivimos es de plenitud,
porque en él Dios ha enviado a su Hijo, no de cualquier manera, sino «nacido de
mujer y nacido bajo la ley», es decir, semejante en todo a nosotros y en
nuestra humanidad. Pero este abajamiento del Hijo de Dios, nos ha alcanzado la
más grande de las gracias: la de llegar a ser, todos nosotros los seres
humanos, sin exclusión alguna, hijos de Dios, capaces de llamarlo «Abba», es
decir, Padre. Nuestra condición filial fundamenta una nueva dignidad de seres
humanos libres, herederos del amor de Dios. Parecerían hermosas palabras, nada
más, frente a tantos sufrimientos y miserias que todavía experimentamos, pero
se trata de que pongamos de nuestra parte para que la obra de Jesucristo se
haga realidad. Se trata de que nos apropiemos de nuestra dignidad de hijos
libres, rechazando los males personales y sociales que nos agobian, luchando
juntos contra ellos. Esto implica una tarea y una misión: la de hacernos
verdaderos hijos de Dios, y a nuestros hermanos que conozcan esta dignidad.
Nacido
de mujer, nacido bajo la ley,
nos recuerda Pablo en Gálatas 4,4. Nació en la debilidad, en la pobreza, fuera
de la ciudad, en la cueva, porque no hubo para ellos lugar en la posada... Nace
en la misma situación que el conjunto del pueblo, los sencillos, los humildes,
los sin poder. Este nacimiento real y concreto es asumido por Dios para abrazar
en el amor a todos los que la tradición había dejado fuera. Es la visita real
de aquel que, por simple misericordia, nos da la gracia de poder llamar a Dios
con la familiaridad de Abba
-"papito"- y la posibilidad de considerar a todos los hombres y
mujeres hermanos muy amados. En Jesús, nacido de María -la mujer que aceptó ser
instrumento en las manos de Dios para iniciar la nueva historia- todos los
seres humanos hemos sido declarados hijos y no esclavos, hemos sido declarados
coherederos, por voluntad del Padre. La bendición o benevolencia de Dios para
los seres humanos da un gran paso: Dios ya no bendice con palabras, ahora
bendice a todos los seres humanos y aún a toda la creación, con la misma
persona de su Hijo, que se hace hermano de todos. Y nadie quedara marginado de
su amor.
LECTURA DEL EVANGELIO
LUCAS 2, 16-21
“Y le pusieron
por nombre Jesús”
En aquel tiempo, los
pastores fueron corriendo a Belén y encontraron a María y a José, y al niño
acostado en el pesebre. Al verlo, contaron lo que les habían dicho de aquel
niño. Todos los que lo oían se admiraban de lo que les decían los pastores. Y
María conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón. Los pastores se
volvieron dando gloria y alabanza a Dios por lo que habían visto y oído; todo
como les habían dicho.
Al cumplirse los ocho días,
tocaba circuncidar al niño, y le pusieron por nombre Jesús, como lo había
llamado el ángel antes de su concepción. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN:
Lucas nos muestra a un
Jesús sencillo, un Jesús que no nace entre los grandes y poderosos del mundo
sino entre los pequeños y humildes; como
los pastores de Belén, que no son sólo figuras decorativas de nuestros pesebres
sino que eran, en los tiempos de Jesús, personas mal vistas, con fama de
ladrones, de ignorantes y de incapaces de cumplir la ley religiosa judía. A
ellos en primer lugar llaman los «ángeles» a saludar y a adorar al Salvador
recién nacido. Ellos se convierten en pregoneros de las maravillas de Dios que
habían podido ver y oír por sí mismos. Algo similar pasa con María y José: no
eran una pareja de nobles ni de potentados, eran apenas un humilde matrimonio
de artesanos, sin poder ni prestigio alguno. Con María, la madre, que «guardaba
y meditaba estos acontecimientos en su corazón», y seguramente se alegraba y
daba gracias a Dios por ellos, y estaba dispuesta a testimoniarlo delante de
los demás, como lo hizo delante de Isabel, entonando el Magníficat.
La «maternidad divina de María», motivo oficial de la celebración litúrgica de hoy, pero
con la imagen conciliar que la Iglesia tiene de María, «la madre de Jesús», una imagen desmitificada,
María una mujer sencilla, dispuesta a servir, María como discípula, siempre
dispuesta a seguirle y permanecer en el camino hasta el final. Contemplemos a María como nos la describe Lucas, María, Madre
de Dios, Madre que recibe a Cristo y que a la vez ofrece a Cristo. Que Ella
atraiga para nosotros, y para todos los que amamos, abundantes bendiciones, y que
como ella nosotros permanezcamos por la fuerza de su amor en el camino de Jesús y en la construcción de su
Reino.
Festejemos este Año
Nuevo, como un nuevo regalo que
el Señor hace a nuestra vida,
agradezcámosle con todo el corazón la
alegría de vivir, la oportunidad maravillosa que nos da de seguir amando y
seguir siendo amados, y la capacidad que nos ha dado para cambiar, rectificar, recapacitar y continuar en su camino.
ORACIÓN
Padre Bueno, te
damos infinitas gracias por el año que acaba de terminar y por este año nuevo
que queremos iniciar en el nombre de tu Hijo Jesucristo, en tu paz y en tu amor,
declarando tu presencia bendición y victoria sobre cada uno de los días se éste
nuevo año. Te ofrecemos todo lo que vamos a vivir en este año y nos ofrecemos a
nosotros mismos a ti como una ofrenda de gratitud alabanza y amor. Glorifícate
Señor en cada uno de nosotros y ayúdanos a vivir como verdaderos hijos tuyos en
medio de este mundo. Que acojamos la vida y el proyecto de tu Hijo Jesús en
nosotros, que seamos fieles como María la madre de Nazareth a la alianza que un
día hicimos contigo en el bautismo, para que vivamos como hijos y no como
esclavos. Amén
“Coloquemos
en el Dios de la vida nuestros sueños y anhelos, suplicando la gracia de vivir
cada día con fe y esperanza”
Martes02 de Enero
de 2018
“HUMILDAD Y
CERTEZA”
PRIMERA LECTURA
1JUAN 2,22-28
“Lo que habéis
oído desde el principio permanezca en vosotros”
Queridos hermanos: ¿Quién es el mentiroso, sino el que niega que Jesús es
el Cristo? Ése es el Anticristo, el que niega al Padre y al Hijo. Todo el que
niega al Hijo tampoco posee al Padre. Quien confiesa al Hijo posee también al Padre.
En cuanto a vosotros, lo que habéis oído desde el principio permanezca en
vosotros. Si permanece en vosotros lo que habéis oído desde el principio,
también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre; y ésta es la promesa
que él mismo nos hizo: la vida eterna. Os he escrito esto respecto a los que
tratan de engañaros. Y en cuanto a vosotros, la unción que de él habéis
recibido permanece en vosotros, y no necesitáis que nadie os enseñe. Pero como
su unción os enseña acerca de todas las cosas -y es verdadera y no mentirosa-
según os enseñó, permanecéis en él. Y ahora, hijos, permaneced en él para que,
cuando se manifieste, tengamos plena confianza y no quedemos avergonzados lejos
de él en su venida.Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Desde la óptica de Juan hay una verdad que es la más
grande del mundo. Esa verdad está en la encarnación de Cristo, en Jesús hecho
hombre, en esta revelación que hemos
visto, oído y palpado, revelación en la
que Dios nos ha dado de su amor y su salvación.La gran mentira es negar esa
revelación que tiene precio y valor de sangre del Hijo de Dios. Por eso es
fuerte la exhortación de hoy :"permanezcan en lo que han oído" (1 Juan
2,24). Es una advertencia severa, que podríamos poner en paralelo con las
palabras, también graves, del apóstol Pablo:Estoy muy sorprendido de que ustedes se
hayan alejado tan pronto de Dios, que los llamó mostrando en Cristo su bondad,
y se hayan pasado a otro evangelio. En
realidad no es que haya otro evangelio. Lo que pasa es que hay algunos que los
perturban a ustedes, y que quieren trastornar el evangelio de Cristo. Pero si aún nosotros, o un ángel del cielo,
os anunciara un evangelio distinto del que ya les hemos anunciado, que caiga
sobre él la maldición de Dios.
El Evangelio de Cristo es simple, contundente, eficaz,
y nos guía para que de tal manera no nos perdamos en el camino, para que no nos
dejemos seducir por otras ideas que nos desvían y que no salvan. Permanecer
en Él, en su proyecto,en su Palabra este
es el llamado que recibimos hoy.Creer que Jesús es el Mesías significa, recibir
y admitir en Cristo el plan de Dios para nosotros y declarar que Él es el dueño de nuestra
vida, es quien nos gobierna y nos
conduce". Pidamos al Señor que nos dé una fe íntegra, que vivamos convencidos del
poder de su amor y de su gracia, para
seguir en medio de un mundo que quiere imponerle sus planes a Dios. Él nos
llene de fortaleza y empeño para seguir
dando testimonio con un estilo diferente de vida, para algunos muchas
veces raro, pero bello y fecundo como el que Cristo nos mostró en cada momento de su
vida.
SALMO
RESPONSORIAL: 97
R./Los confines de la tierra han contemplado la
victoria de nuestro Dios.
Cantad al Señor un cántico nuevo,
porque ha hecho maravillas:
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo. R.
El Señor da a conocer su victoria,
revela a las naciones su justicia:
se acordó de su misericordia y su fidelidad
en favor de la casa de Israel. R.
Los confines de la tierra han contemplado
la victoria de nuestro Dios.
Aclama al Señor, tierra entera;
gritad, vitoread, tocad. R.
OREMOS CON EL
SALMO
Este Salmo es un
canto de aclamación a la realeza de Dios, Señor del universo y de la historia.
El despliegue del poder salvador de Dios llega a su punto culminante en la
encarnación de su hijo y en la victoria de este sobre la muerte y el pecado.
LECTURA DEL
EVANGELIO
JUAN 1,19-28
“En medio de
vosotros hay uno que no conocéis”
Éste fue el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron desde Jerusalén
sacerdotes y levitas a Juan a que le preguntaran: "¿Tú quién eres?"
Él confesó sin reservas: "Yo no soy el Mesías." Le preguntaron:
"¿Entonces, qué? ¿Eres tú Elías?" Él dijo: "No lo soy."
"¿Eres tú el Profeta?" Respondió: "No." Y le dijeron:
"¿Quién eres? Para que podamos dar una respuesta a los que nos han
enviado, ¿qué dices de ti mismo?" Él contestó: "Yo soy la voz que grita
en el desierto: "Allanad el camino del Señor", como dijo el profeta
Isaías."
Entre los enviados había fariseos y le preguntaron: "Entonces, ¿por
qué bautizas si tú no eres el Mesías, ni Elías, ni el Profeta?" Juan les
respondió: "Yo bautizo con agua; en medio de vosotros hay uno que no
conocéis, el que viene detrás de mí, y al que no soy digno de desatar la correa
de la sandalia." Esto pasaba en Betania, en la otra orilla del Jordán,
donde estaba Juan bautizando.Palabra
del Señor. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Vaya manera de
presentarse Juan Bautista a los inquietos que preguntaban por sus orígenes e
identidad. No es Elías, sino el precursor, el preparador del ambiente para
recibir al verdadero profeta, al Mesías. Juan invita a una conversión radical,
íntegra e integral. No valen enmiendas, remiendos. La conversión implica un
morir para renacer. Por eso el bautismo que predica es de conversión y perdón
de pecados. Es volver la mirada a Dios, y con el rostro agachado, con paso
humilde, desandar el camino para ponerse en la ruta correcta que conduce al
amor misericordioso del Padre.
La misión de Juan
Bautista es sensibilizar al pueblo para reconocer al ungido de Dios. Pero esta
misión choca con una dificultad enorme: la incredulidad. Y el problema no es
sólo que no crean en él, sino que tampoco creen en el testimonio de la
Escritura. La voz de los profetas, que desde Moisés resuena con toda claridad a
través del Antiguo Testamento, parece atenuarse ante la cortina de
conveniencias que las autoridades del Templo levantan para proteger sus
privilegios. Por esta razón Juan se dirige al desierto. Allí nació el pueblo de
Dios. Allí se prepara la venida del Señor. El desierto es la periferia donde
nace la alternativa frente a Jerusalén, centro autoritario y opresor.En nuestro
tiempo ocurre algo semejante. Muchos profetas desde la periferia nos llaman a
la cordura frente a las locuras del poder; a la sobriedad frente a la
embriaguez de consumo en nuestras sociedades. Nosotros debemos elegir. El
centro es seguro, pero destructor; la periferia es insegura, pero creativa.
Podemos ir al encuentro del Señor allí donde él nos espera con riesgo, o
amarrarnos a nuestras seguridades y esperarlo donde no lo dejan llegar.
¿Tomamos el camino de Juan o el de sus inquisidores? ¿Estamos tomando el camino
correcto?
ORACIÓN
Señor Jesús,
gracias por este nuevo encuentro de vida que nos regalas a través de tu palabra
en este devocional; Señor, ayúdanos a ser fieles a tu amor y a tu palabra, fieles
a la misión que nos has encomendado. Haz Señor, que en este nuevo día que nos
regalas, nuestra vida entera se una más a ti y que todo lo nuestro hable de ti.
No permitas que el ruido de este mundo nos distraiga y olvidemos el verdadero
sentido de nuestra vida, que cada día te sirvamos y te demos a conocer con
nuestro testimonio. Amén.
“No presumas de ti mismo(a), sino se humilde,
sabiendo que todo lo has recibido de la bondad de Dios”
Miércoles 03 de
Enero de 2018
Día del
Santísimo Nombre de Jesús
“DIOS NOS ACEPTA
COMO SUS HIJOS E HIJAS”
PRIMERA LECTURA
1ª de JUAN
2,29-3,6
“Quien permanece
con Él no peca”
Queridos
hermanos: Si sabéis que él es justo, reconoced que todo el que obra la justicia
ha nacido de él. Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de
Dios, pues ¡lo somos! El mundo no nos conoce porque no le conoció a él.
Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos.
Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo
veremos tal cual es. Todo el que tiene esperanza en él se purifica a sí mismo,
como él es puro. Todo el que comete pecado quebranta también la ley, pues el
pecado es quebrantamiento de la ley. Y sabéis que él se manifestó para quitar
los pecados, y en él no hay pecado. Todo el que permanece en él no peca. Todo
el que peca no le ha visto ni conocido. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Escribe el
apóstol: "consideren el amor tan grande que nos ha demostrado el
Padre" (1 Juan 3,1); ello corresponde al pasado; luego dice: "ahora
somos ya hijos de Dios" (1 Juan 3,2); eso alude al presente; por último
añade: "seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es" (1 Juan
3,2).El amor manifiesto se convierte en una promesa. Es un cheque a nuestro
favor; es el anuncio de algo maravilloso que no esperábamos, que no merecíamos,
que no podíamos describir siquiera. Ese amor se traduce en un presente cargado
de noble dignidad: somos hijos de Dios. De allí brotan todos nuestros derechos
y deberes. Pero no es ello todo, sino solo la primicia de algo mayor aún:
seremos semejantes a él. Es la plenitud. El tiempo tiene una dirección y esa
dirección apunta hacia la plenitud.
SALMO
RESPONSORIAL: 97
R./Los confines
de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios.
Cantad al Señor
un cántico nuevo,
porque ha hecho
maravillas:
su diestra le ha
dado la victoria,
su santo brazo.
R.
Los confines de
la tierra han contemplado
la victoria de
nuestro Dios.
Aclama al Señor,
tierra entera;
gritad,
vitoread, tocad. R.
Tañed la citara
para el Señor,
suenen los
instrumentos:
con clarines y
al son de trompetas,
aclamad al Rey y
Señor. R.
OREMOS CON EL
SALMO
Este Salmo es un himno de alabanza al Señor, que
estableció su trono en Sión para revelarse a Israel como Rey justo y poderoso.
La benevolencia y la justicia con que el Señor gobierna a su Pueblo se
manifiesta, en las figuras de Moisés, Aarón y Samuel: ellos son, a un mismo
tiempo, los mediadores de la Revelacióndivina y un ejemplo
constante para los seguidores. El despliegue del poder salvador de Dios llega a
su punto culminante en la encarnación de su Hijo y su victoria frente a la
muerte y la desobediencia.
LECTURA DEL
EVANGELIO
JUAN 1,29-34:
“Ahí está el
Cordero de Dios”
Al día
siguiente, al ver Juan a Jesús que venía hacia él, exclamó: "Éste es el
Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Éste es aquel de quien yo dije:
"Tras de mí viene un hombre que está por delante de mí, porque existía
antes que yo." Yo no lo conocía, pero he salido a bautizar con agua, para
que sea manifestado a Israel."
Y Juan dio
testimonio diciendo: "He contemplado al Espíritu que bajaba del cielo como
una paloma, y se posó sobre él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a
bautizar con agua me dijo: "Aquél sobre quien veas bajar el Espíritu y
posarse sobre él, ése es el que ha de bautizar con Espíritu Santo." Y yo
lo he visto, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios." Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
Así como una
radiografía revela la estructura de un ser humano, del mismo modo, según el
Evangelio de Juan, el bautizo que Juan Bautista ofrece a la gente revela su
verdadera naturaleza. Los que buscan perdón y conversión acuden al desierto;
los que están seguros de sí mismos no se mueven. Pero, en medio de esa
procesión que pone de manifiesto las verdades ocultas en el corazón humano,
aparece Jesús de Nazaret como el ser humano definitivo. Por esto en el
Evangelio Juan llama a Jesús ‘cordero’, la ‘persona que viene después, pero
está adelante’, ‘el portador del Espíritu’, ‘el Hijo de Dios’. Esa función
reveladora del bautismo de Juan, la ejerce en el cristianismo el ‘seguimiento
de Cristo’. Compartir con Jesús su Palabra, vida y misión nos permite hacernos
la radiografía y preguntarnos si tenemos la estructura motivacional y emotiva
para anunciar el evangelio.Nosotros ya no somos como Juan Bautista profetas
precursores, sino, como el evangelista Juan, profetas evangelizadores.
ORACIÓN
Nuestros ojos
han podido contemplar tu gloria y majestad, Buen Señor. Tú Señor Jesús, eres quien
siempre esperamos. Gracias, porque tu amor en nosotros ha hecho
maravillas, porque tu misericordia ha
estado continua todos los días de nuestra vida. Reconocemos Señor Jesús eres el Cordero vivo de Dios que nos
amas perdonas y restauras. Por eso hoy declaramos: A ti sean dadas hoy y
siempre la gratitud, el honor y la gloria por todos los siglos. Amén.
“Practiquemos
las virtudes propias del ser cristiano(a) desde el amor: justicia, paz,
solidaridad, buen trato, oración y acción hacia las necesidades del prójimo… ”Martes02 de Enero
de 2018
“HUMILDAD Y
CERTEZA”
PRIMERA LECTURA
1JUAN 2,22-28
“Lo que habéis
oído desde el principio permanezca en vosotros”
Queridos hermanos: ¿Quién es el mentiroso, sino el que niega que Jesús es
el Cristo? Ése es el Anticristo, el que niega al Padre y al Hijo. Todo el que
niega al Hijo tampoco posee al Padre. Quien confiesa al Hijo posee también al Padre.
En cuanto a vosotros, lo que habéis oído desde el principio permanezca en
vosotros. Si permanece en vosotros lo que habéis oído desde el principio,
también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre; y ésta es la promesa
que él mismo nos hizo: la vida eterna. Os he escrito esto respecto a los que
tratan de engañaros. Y en cuanto a vosotros, la unción que de él habéis
recibido permanece en vosotros, y no necesitáis que nadie os enseñe. Pero como
su unción os enseña acerca de todas las cosas -y es verdadera y no mentirosa-
según os enseñó, permanecéis en él. Y ahora, hijos, permaneced en él para que,
cuando se manifieste, tengamos plena confianza y no quedemos avergonzados lejos
de él en su venida.Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Desde la óptica de Juan hay una verdad que es la más
grande del mundo. Esa verdad está en la encarnación de Cristo, en Jesús hecho
hombre, en esta revelación que hemos
visto, oído y palpado, revelación en la
que Dios nos ha dado de su amor y su salvación.La gran mentira es negar esa
revelación que tiene precio y valor de sangre del Hijo de Dios. Por eso es
fuerte la exhortación de hoy :"permanezcan en lo que han oído" (1 Juan
2,24). Es una advertencia severa, que podríamos poner en paralelo con las
palabras, también graves, del apóstol Pablo:Estoy muy sorprendido de que ustedes se
hayan alejado tan pronto de Dios, que los llamó mostrando en Cristo su bondad,
y se hayan pasado a otro evangelio. En
realidad no es que haya otro evangelio. Lo que pasa es que hay algunos que los
perturban a ustedes, y que quieren trastornar el evangelio de Cristo. Pero si aún nosotros, o un ángel del cielo,
os anunciara un evangelio distinto del que ya les hemos anunciado, que caiga
sobre él la maldición de Dios.
El Evangelio de Cristo es simple, contundente, eficaz,
y nos guía para que de tal manera no nos perdamos en el camino, para que no nos
dejemos seducir por otras ideas que nos desvían y que no salvan. Permanecer
en Él, en su proyecto,en su Palabra este
es el llamado que recibimos hoy.Creer que Jesús es el Mesías significa, recibir
y admitir en Cristo el plan de Dios para nosotros y declarar que Él es el dueño de nuestra
vida, es quien nos gobierna y nos
conduce". Pidamos al Señor que nos dé una fe íntegra, que vivamos convencidos del
poder de su amor y de su gracia, para
seguir en medio de un mundo que quiere imponerle sus planes a Dios. Él nos
llene de fortaleza y empeño para seguir
dando testimonio con un estilo diferente de vida, para algunos muchas
veces raro, pero bello y fecundo como el que Cristo nos mostró en cada momento de su
vida.
SALMO
RESPONSORIAL: 97
R./Los confines de la tierra han contemplado la
victoria de nuestro Dios.
Cantad al Señor un cántico nuevo,
porque ha hecho maravillas:
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo. R.
El Señor da a conocer su victoria,
revela a las naciones su justicia:
se acordó de su misericordia y su fidelidad
en favor de la casa de Israel. R.
Los confines de la tierra han contemplado
la victoria de nuestro Dios.
Aclama al Señor, tierra entera;
gritad, vitoread, tocad. R.
OREMOS CON EL
SALMO
Este Salmo es un
canto de aclamación a la realeza de Dios, Señor del universo y de la historia.
El despliegue del poder salvador de Dios llega a su punto culminante en la
encarnación de su hijo y en la victoria de este sobre la muerte y el pecado.
LECTURA DEL
EVANGELIO
JUAN 1,19-28
“En medio de
vosotros hay uno que no conocéis”
Éste fue el testimonio de Juan, cuando los judíos enviaron desde Jerusalén
sacerdotes y levitas a Juan a que le preguntaran: "¿Tú quién eres?"
Él confesó sin reservas: "Yo no soy el Mesías." Le preguntaron:
"¿Entonces, qué? ¿Eres tú Elías?" Él dijo: "No lo soy."
"¿Eres tú el Profeta?" Respondió: "No." Y le dijeron:
"¿Quién eres? Para que podamos dar una respuesta a los que nos han
enviado, ¿qué dices de ti mismo?" Él contestó: "Yo soy la voz que grita
en el desierto: "Allanad el camino del Señor", como dijo el profeta
Isaías."
Entre los enviados había fariseos y le preguntaron: "Entonces, ¿por
qué bautizas si tú no eres el Mesías, ni Elías, ni el Profeta?" Juan les
respondió: "Yo bautizo con agua; en medio de vosotros hay uno que no
conocéis, el que viene detrás de mí, y al que no soy digno de desatar la correa
de la sandalia." Esto pasaba en Betania, en la otra orilla del Jordán,
donde estaba Juan bautizando.Palabra
del Señor. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Vaya manera de
presentarse Juan Bautista a los inquietos que preguntaban por sus orígenes e
identidad. No es Elías, sino el precursor, el preparador del ambiente para
recibir al verdadero profeta, al Mesías. Juan invita a una conversión radical,
íntegra e integral. No valen enmiendas, remiendos. La conversión implica un
morir para renacer. Por eso el bautismo que predica es de conversión y perdón
de pecados. Es volver la mirada a Dios, y con el rostro agachado, con paso
humilde, desandar el camino para ponerse en la ruta correcta que conduce al
amor misericordioso del Padre.
La misión de Juan
Bautista es sensibilizar al pueblo para reconocer al ungido de Dios. Pero esta
misión choca con una dificultad enorme: la incredulidad. Y el problema no es
sólo que no crean en él, sino que tampoco creen en el testimonio de la
Escritura. La voz de los profetas, que desde Moisés resuena con toda claridad a
través del Antiguo Testamento, parece atenuarse ante la cortina de
conveniencias que las autoridades del Templo levantan para proteger sus
privilegios. Por esta razón Juan se dirige al desierto. Allí nació el pueblo de
Dios. Allí se prepara la venida del Señor. El desierto es la periferia donde
nace la alternativa frente a Jerusalén, centro autoritario y opresor.En nuestro
tiempo ocurre algo semejante. Muchos profetas desde la periferia nos llaman a
la cordura frente a las locuras del poder; a la sobriedad frente a la
embriaguez de consumo en nuestras sociedades. Nosotros debemos elegir. El
centro es seguro, pero destructor; la periferia es insegura, pero creativa.
Podemos ir al encuentro del Señor allí donde él nos espera con riesgo, o
amarrarnos a nuestras seguridades y esperarlo donde no lo dejan llegar.
¿Tomamos el camino de Juan o el de sus inquisidores? ¿Estamos tomando el camino
correcto?
ORACIÓN
Señor Jesús,
gracias por este nuevo encuentro de vida que nos regalas a través de tu palabra
en este devocional; Señor, ayúdanos a ser fieles a tu amor y a tu palabra, fieles
a la misión que nos has encomendado. Haz Señor, que en este nuevo día que nos
regalas, nuestra vida entera se una más a ti y que todo lo nuestro hable de ti.
No permitas que el ruido de este mundo nos distraiga y olvidemos el verdadero
sentido de nuestra vida, que cada día te sirvamos y te demos a conocer con
nuestro testimonio. Amén.
“No presumas de ti mismo(a), sino se humilde,
sabiendo que todo lo has recibido de la bondad de Dios”
Miércoles 03 de
Enero de 2018
Día del
Santísimo Nombre de Jesús
“DIOS NOS ACEPTA
COMO SUS HIJOS E HIJAS”
PRIMERA LECTURA
1ª de JUAN
2,29-3,6
“Quien permanece
con Él no peca”
Queridos
hermanos: Si sabéis que él es justo, reconoced que todo el que obra la justicia
ha nacido de él. Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de
Dios, pues ¡lo somos! El mundo no nos conoce porque no le conoció a él.
Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos.
Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo
veremos tal cual es. Todo el que tiene esperanza en él se purifica a sí mismo,
como él es puro. Todo el que comete pecado quebranta también la ley, pues el
pecado es quebrantamiento de la ley. Y sabéis que él se manifestó para quitar
los pecados, y en él no hay pecado. Todo el que permanece en él no peca. Todo
el que peca no le ha visto ni conocido. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Escribe el
apóstol: "consideren el amor tan grande que nos ha demostrado el
Padre" (1 Juan 3,1); ello corresponde al pasado; luego dice: "ahora
somos ya hijos de Dios" (1 Juan 3,2); eso alude al presente; por último
añade: "seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es" (1 Juan
3,2).El amor manifiesto se convierte en una promesa. Es un cheque a nuestro
favor; es el anuncio de algo maravilloso que no esperábamos, que no merecíamos,
que no podíamos describir siquiera. Ese amor se traduce en un presente cargado
de noble dignidad: somos hijos de Dios. De allí brotan todos nuestros derechos
y deberes. Pero no es ello todo, sino solo la primicia de algo mayor aún:
seremos semejantes a él. Es la plenitud. El tiempo tiene una dirección y esa
dirección apunta hacia la plenitud.
SALMO
RESPONSORIAL: 97
R./Los confines
de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios.
Cantad al Señor
un cántico nuevo,
porque ha hecho
maravillas:
su diestra le ha
dado la victoria,
su santo brazo.
R.
Los confines de
la tierra han contemplado
la victoria de
nuestro Dios.
Aclama al Señor,
tierra entera;
gritad,
vitoread, tocad. R.
Tañed la citara
para el Señor,
suenen los
instrumentos:
con clarines y
al son de trompetas,
aclamad al Rey y
Señor. R.
OREMOS CON EL
SALMO
Este Salmo es un himno de alabanza al Señor, que
estableció su trono en Sión para revelarse a Israel como Rey justo y poderoso.
La benevolencia y la justicia con que el Señor gobierna a su Pueblo se
manifiesta, en las figuras de Moisés, Aarón y Samuel: ellos son, a un mismo
tiempo, los mediadores de la Revelacióndivina y un ejemplo
constante para los seguidores. El despliegue del poder salvador de Dios llega a
su punto culminante en la encarnación de su Hijo y su victoria frente a la
muerte y la desobediencia.
LECTURA DEL
EVANGELIO
JUAN 1,29-34:
“Ahí está el
Cordero de Dios”
Al día
siguiente, al ver Juan a Jesús que venía hacia él, exclamó: "Éste es el
Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. Éste es aquel de quien yo dije:
"Tras de mí viene un hombre que está por delante de mí, porque existía
antes que yo." Yo no lo conocía, pero he salido a bautizar con agua, para
que sea manifestado a Israel."
Y Juan dio
testimonio diciendo: "He contemplado al Espíritu que bajaba del cielo como
una paloma, y se posó sobre él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a
bautizar con agua me dijo: "Aquél sobre quien veas bajar el Espíritu y
posarse sobre él, ése es el que ha de bautizar con Espíritu Santo." Y yo
lo he visto, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios." Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN:
Así como una
radiografía revela la estructura de un ser humano, del mismo modo, según el
Evangelio de Juan, el bautizo que Juan Bautista ofrece a la gente revela su
verdadera naturaleza. Los que buscan perdón y conversión acuden al desierto;
los que están seguros de sí mismos no se mueven. Pero, en medio de esa
procesión que pone de manifiesto las verdades ocultas en el corazón humano,
aparece Jesús de Nazaret como el ser humano definitivo. Por esto en el
Evangelio Juan llama a Jesús ‘cordero’, la ‘persona que viene después, pero
está adelante’, ‘el portador del Espíritu’, ‘el Hijo de Dios’. Esa función
reveladora del bautismo de Juan, la ejerce en el cristianismo el ‘seguimiento
de Cristo’. Compartir con Jesús su Palabra, vida y misión nos permite hacernos
la radiografía y preguntarnos si tenemos la estructura motivacional y emotiva
para anunciar el evangelio.Nosotros ya no somos como Juan Bautista profetas
precursores, sino, como el evangelista Juan, profetas evangelizadores.
ORACIÓN
Nuestros ojos
han podido contemplar tu gloria y majestad, Buen Señor. Tú Señor Jesús, eres quien
siempre esperamos. Gracias, porque tu amor en nosotros ha hecho
maravillas, porque tu misericordia ha
estado continua todos los días de nuestra vida. Reconocemos Señor Jesús eres el Cordero vivo de Dios que nos
amas perdonas y restauras. Por eso hoy declaramos: A ti sean dadas hoy y
siempre la gratitud, el honor y la gloria por todos los siglos. Amén.
“Practiquemos
las virtudes propias del ser cristiano(a) desde el amor: justicia, paz,
solidaridad, buen trato, oración y acción hacia las necesidades del prójimo… ”
Jueves 04 de
enero de 2018
“HEMOS
ENCONTRADO AL MESÍAS”
PRIMERA LECTURA
1ª JUAN 3,7-10
“Nacidos de Dios”
Hijos míos, que
nadie os engañe. Quien obra la justicia es justo, como él es justo. Quien
comete el pecado es del diablo, pues el diablo peca desde el principio. El Hijo
de Dios se manifestó para deshacer las obras del diablo. Todo el que ha nacido
de Dios no comete pecado, porque su germen permanece en él, y no puede pecar,
porque ha nacido de Dios. En esto se reconocen los hijos de Dios y los hijos
del diablo: todo el que no obra la justicia no es de Dios, ni tampoco el que no
ama a su hermano. Palabra de Dios.
REFLEXIÓN
Ya el Evangelio de Juan nos había hecho el
maravilloso anuncio: los que acogen la Palabra reciben poder llegar a ser hijos
de Dios (Juan 1,12). Es muy importante para este apóstol que descubramos
nuestra vocación: hemos nacido de Dios.El propósito del pasaje de hoy es que
descubramos cómo el ser y el obrar necesariamente van de la mano. El obrar
sigue al ser. Si nuestro ser tiene su fuente en Dios, porque de él hemos
nacido, nuestro obrar sigue al obrar de Dios, a la forma en que Él lo hace. Juan nos escribe: "que nadie los engañe;
el que hace la voluntad de Dios es justo, como él es justo".Cuando Juan
dice: "que nadie los engañe" es porque sabe de buena fuente que hay
quien engaña. Y el engaño también lo podemos conocer: en aquel tiempo se
trataba de una especie de secta, tal vez
en proceso de formación, y a si mismo lo
vemos en muchas corrientes ahora, que enseñan entre otras cosas que nuestra
conducta no importa realmente, mientras mantengamos una especie de luz o de
conocimiento sublime y celeste en nuestra mente. Nos dice que la conducta es
asunto de cosa humana o carnal y lo
carnal no importa. Por consiguiente, lo que hagamos con nuestra conducta tampoco importa.Pero claro que importa,
importa la conducta en la vida de cada día. Si te olvidas de la conducta no
sólo niegas el misterio de Aquel que "se hizo carne", sino que niegas
su precepto principal: el amor.
SALMO
RESPONSORIAL: 97
R./ Los confines
de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios.
Cantad al Señor un cántico nuevo,
porque ha hecho maravillas:
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo. R.
Retumbe el mar y cuanto contiene,
la tierra y cuantos la habitan;
aplaudan los ríos, aclamen los montes. R.
Al Señor, que llega para regir la tierra.
Regirá el orbe con justicia
y los pueblos con rectitud. R.
OREMOS CON EL
SALMO
Este salmo se
trata de un himno al Señor Rey del universo y de la historia, se define como
“cántico nuevo”, que en el lenguaje bíblico significa un canto perfecto, pleno,
solemne, acompañado con música de fiesta, donde se canta, resuenan los
instrumentos y se aplaude. Siendo el centro el Dios salvador, se espera su
acción, que, como soberano de toda la tierra, traerá paz y justicia.
LECTURA DEL
EVANGELIO
JUAN 1,35-42
“Hemos encontrado al Mesías”
En aquel tiempo, estaba Juan con dos de sus discípulos y, fijándose en
Jesús que pasaba, dice: "Éste es el Cordero de Dios." Los dos
discípulos oyeron sus palabras y siguieron a Jesús. Jesús se volvió y, al ver
que lo seguían, les pregunta: "¿Qué buscáis?" Ellos le contestaron:
"Rabí (que significa Maestro), ¿dónde vives?" Él les dijo:
"Venid y lo veréis." Entonces fueron, vieron dónde vivía y se
quedaron con él aquel día; serían las cuatro de la tarde. Andrés, hermano de
Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron a Juan y siguieron a Jesús;
encuentra primero a su hermano Simón y le dice: "Hemos encontrado al
Mesías (que significa Cristo)." Y lo llevó a Jesús. Jesús se le quedó
mirando y le dijo: "Tú eres Simón, el hijo de Juan; tú te llamarás Cefas
(que se traduce Pedro)." Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Cada persona y
cada grupo reaccionan de manera distinta ante el llamado profético de Juan
Bautista y de Jesús de Nazaret. Así como el llamado de Juan Bautista había
puesto en evidencia las verdaderas intenciones del pueblo sencillo y la
oposición de las autoridades religiosas, así el encuentro con Jesús revela las
intenciones de sus discípulos. Por el testimonio de Juan los dos primeros
discípulos reconocen a Jesús como Maestro, y luego lo proclaman como Mesías;
Pedro tendrá que hacer un recorrido más largo.Los que reconocen a Jesús, tanto
pronto como tarde, deberán preguntarse constantemente: ¿qué significa este
encuentro para mí?, ¿cómo afecta mi vida?, ¿qué debo hacer para responder al
llamado de Jesús que me dice “ven y verás”? Encontrar a Jesús significa
reconocerle como ‘maestro de vida’ o Rabí; interpretar su mensaje en términos
de seguimiento; aceptar que compartimos su misión. Respondemos a su llamado
acudiendo a los lugares donde Él vive y actúa. Nos transformamos en mensajeros
suyos cuando aceptamos nuestra condición de ‘ungidos para la vida’, que es lo
que realmente significa nuestro nombre de cristianos.
ORACIÓN
Al comenzar este
nuevo día, queremos agradecerte Buen Señor, por todos los signos de tu bondad y
misericordia para con nosotros. Sigue iluminando nuestra vida con tu luz, mantennos
en rectitud y en tu camino, queremos
siempre atender tu llamado, ser verdaderos discípulos tuyos, ungidos para la
vida y haciendo siempre tu voluntad. Queremos habitar como tú ydonde tú vives: donde hay amor, justicia,
equidad, perdón y solidaridad. Amén.
“Conviviendo con
el Espíritu Santo, recibiremos la gracia para que nuestro testimonio de vida
anime a otros a buscar y encontrar el amor de Dios…”
Viernes 05 de Enero
de 2018
“AMEMOS NO DE
PALABRA SINO DE OBRA”
PRIMERA LECTURA
1ª JUAN 3,11-21
“Hemos pasado de
la muerte a la vida, porque amamos a los hermanos”
Queridos
hermanos: Éste es el mensaje que habéis oído desde el principio: que nos amemos
unos a otros. No seamos como Caín, que procedía del Maligno y asesinó a su
hermano. ¿Y por qué lo asesinó? Porque sus obras eran malas, mientras que las
de su hermano eran buenas. No os sorprenda, hermanos, que el mundo os odie;
nosotros hemos pasado de la muerte a la vida: lo sabemos porque amamos a los
hermanos. El que no ama permanece en la muerte. El que odia a su hermano es un
homicida. Y sabéis que ningún homicida lleva en sí vida eterna. En esto hemos
conocido el amor: en que él dio su vida por nosotros. También nosotros debemos
dar nuestra vida por los hermanos.
Pero si uno
tiene de qué vivir y, viendo a su hermano en necesidad, le cierra sus entrañas,
¿cómo va a estar en él el amor de Dios? Hijos míos, no amemos de palabra y de
boca, sino de verdad y con obras. En esto conoceremos que somos de la verdad y
tranquilizaremos nuestra conciencia ante él, en caso de que nos condene nuestra
conciencia, pues Dios es mayor que nuestra conciencia y conoce todo. Queridos,
si la conciencia no nos condena, tenemos plena confianza ante Dios. Palabra del
Señor.
REFLEXIÓN
Continuamos esa
lectura que habíamos emprendido en la Octava de Navidad, prolongando lo que se
dijo allá en el principio. Porque en el fondo toda esta Primera Carta es como
una especie de comentario teológico al misterio de la Jesús hecho hombre (La Encarnación),
todo en ella está diciendo que "la Palabra se manifestó, que nosotros
hemos visto y tocado y escuchado y que ahora damos testimonio para que estéis
en plena comunión con nosotros y para que rompáis todo vínculo de incredulidad
y de pecado" 1 Juan, 1,3. Las lecturas del día de hoy tienen, por decirlo
así, tema diverso. En la parte que hemos escuchado de la Primera Carta de Juan,
se nos invita a manifestar con nuestro hermano, con nuestro prójimo, aquel amor
que nosotros hemos recibido de Dios. No tenemos ninguna prueba definitiva sobre
que amamos a Dios, si no es el amor del prójimo; la única prueba decisiva que
tenemos de que amamos a Dios, es que producimos vida, protegemos la vida y
propiciamos vida en el prójimo.
SALMO
RESPONSORIAL: 99
R./Aclama al Señor, tierra entera.
Aclama al Señor, tierra entera,
servid al Señor con alegría,
entrad en su presencia con vítores. R.
Sabed que el Señor es Dios:
que él nos hizo y somos suyos,
su pueblo y ovejas de su rebaño. R.
Entrad por sus puertas con acción de gracias,
por sus atrios con himnos,
dándole gracias y bendiciendo su nombre. R.
"El Señor es bueno,
su misericordia es eterna,
su fidelidad por todas las edades." R.
OREMOS CON EL
SALMO
Este salmo es un canto
que invita a la alegría y a la acción de gracias, dirigida a toda la comunidad
que le aclama en el momento de ingresar al Templo. Israel reconoce con gratitud
su condición de “Pueblo” y “rebaño” del único Dios. El amor de Dios por su
pueblo se ha manifestado de manera más evidente en Jesucristo, Pastor presente
en medio de nosotros(as).
LECTURA DEL
EVANGELIO
JUAN 1,43-51
“Tú eres el hijo
de Dios, el Rey de Israel”
En aquel tiempo,
determinó Jesús salir para Galilea; encuentra a Felipe y le dice:
"Sígueme." Felipe era de Betsaida, ciudad de Andrés y de Pedro.
Felipe encuentra a Natanael y le dice: "Aquel de quien escribieron Moisés
en la Ley y los profetas, lo hemos encontrado: Jesús, hijo de José, de
Nazaret." Natanael le replicó: "¿De Nazaret puede salir algo
bueno?" Felipe le contestó: "Ven y verás." Vio Jesús que se
acercaba Natanael y dijo de él: "Ahí tenéis a un israelita de verdad, en
quien no hay engaño." Natanael le contesta: "¿De qué me
conoces?" Jesús le responde: "Antes de que Felipe te llamara, cuando
estabas debajo de la higuera, te vi." Natanael respondió: "Rabí, tú
eres el Hijo de Dios, tú eres el Rey de Israel." Jesús le contestó:
"¿Por haberte dicho que te vi debajo de la higuera, crees? Has de ver
cosas mayores." Y le añadió: "Yo os aseguro: veréis el cielo abierto
y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del hombre." Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN
Gradualmente
Jesús va armando el grupito base para realizar su proyecto. A su vez, cada uno
es motivador de otros. Todo proyecto comienza pequeño. Un grupo reducido que se
va sintiendo seducido por la propuesta y por la persona que la enarbola. Poco a
poco se va asimilando el sentido, significado y exigencias. También aparecen
desánimos, cansancios y abandonos. Ahí es cuando la propuesta inicial se va
consolidando y va madurando. Así comenzaron los primeros, así nació el
movimiento del Reino, así fue naciendo la Iglesia. Pero lo que está a la base de
toda propuesta de vida, vocacional, es el testimonio vivo de quienes la van
comprendiendo y asumiendo. A veces se gastan muchos recursos en la animación
vocacional para conseguir efectivos para la Iglesia y las diferentes formas de
vida, pero valdría la pena examinar la calidad del testimonio que se ofrece. Es momento oportuno para examinar los proyectos de vida y, sobre todo, su realización y los frutos que va produciendo al servicio de la humanidad. ¿Cómo animas e invitas a otros al seguimiento de Jesús?
ORACIÓN.
Padre, Dios de amor; levántanos en este nuevo día. Dale vida a nuestra vida, enséñanos a amar como tú. Que nuestras obras sean agradables a ti, queremos hoy responder a tu llamado siguiéndote plenamente con todo lo que somos, que podamos ver tu rostro en nuestros hermanos, y ellos te puedan encontrar a través de nuestro testimonio.Amén.
“El que ama a su prójimo y le ayuda, aún a pesar de su maltrato, ha pasado de la muerte a la vida”
Sábado 06 de Enero de 2018
“QUIEN TIENE AL
HIJO TIENE LA VIDA”
PRIMERA LECTURA
1ª JUAN 5,5-13
“La Gloria del
Señor amanece sobre tí”
Queridos
hermanos: ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el
Hijo de Dios? Éste es el que vino con agua y con sangre: Jesucristo. No sólo
con agua, sino con agua y con sangre; y el Espíritu es quien da testimonio,
porque el Espíritu es la verdad. Porque tres son los testigos: el Espíritu, el
agua y la sangre, y los tres están de acuerdo.
Si aceptamos el
testimonio humano, más fuerza tiene el testimonio de Dios. Éste es el
testimonio de Dios, un testimonio acerca de su Hijo. El que cree en el Hijo de
Dios tiene dentro el testimonio. Quien no cree a Dios le hace mentiroso, porque
no ha creído en el testimonio que Dios ha dado acerca de su Hijo. Y éste es el
testimonio: Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en su Hijo. Quien
tiene al Hijo tiene la vida, quien no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida.
Os he escrito estas cosas a los que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para
que os deis cuenta de que tenéis vida eterna. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
La comunidad de
Juan nos motiva a creer y crecer en la fe en Jesucristo, el enviado y testigo
del Padre, la fe según Juan se traduce en vida.Esa es la gran afirmación de la
primera lectura de hoy nuestra fe puesta no en algo “sino en alguien:
Jesucristo el Señor es la que nos hace fuertes frente a las amenazas del mundo:
el sufrimiento, las dificultades, las persecuciones, la enfermedad y el miedo……
El abandono confiado en el Señor y su proyecto de vida nos mantiene despiertos,
con capacidad de lucha de superación hacia el futuro. La fe cristiana es
confianza plena en el Dios que hace posible lo que parece imposible, que cumple
sus promesas a veces por caminos desconocidos para nosotros.
Para la
comunidad de Juan, el testimonio que Dios da acerca de Jesús su hijo es triple:
el Espíritu, el agua y la sangre. El Espíritu desciende sobre Jesús en el
Jordán el día de su bautismo, donde el Padre lo declara como su Hijo y lo
capacita para su misión mesiánica. Y, al morir en la cruz, de su costado herido
brota “sangre y agua”, como signos de salvación y santificación para su Iglesia
lo cual atestigua el mismo Espíritu.Por lo tanto, todo aquel que opta
libremente por Jesucristo, aceptándolo en su corazón como Señor y salvador y
siendo bautizado en su nombre, asume su redención y acepta convertirse en
Templo vivo del Espíritu Santo.
SALMO
RESPONSORIAL: 147
R./Glorifica al
Señor, Jerusalén.
Glorifica al
Señor, Jerusalén;
alaba a tu Dios,
Sión:
que ha reforzado
los cerrojos de tus puertas,
y ha bendecido a
tus hijos dentro de ti. R.
Ha puesto paz en
tus fronteras,
te sacia con
flor de harina.
Él envía su
mensaje a la tierra,
y su palabra
corre veloz. R.
Anuncia su
palabra a Jacob,
sus decretos y
mandatos a Israel;
con ninguna
nación obró así,
ni les dio a
conocer sus mandatos. R.
OREMOS CON EL
SALMO
Este
Salmo es un canto de acción de gracias a Dios por la reconstrucción de
Jerusalén y el regreso de los derrotados, y de alabanza por la providencia con
que gobierna el universo. La restauración de Jerusalén es anticipo y símbolo de
la redención obrada por Dios en Cristo. Él sigue presente en medio de su pueblo
y le ofrece diariamente pruebas de su amor.
LECTURA DEL
EVANGELIO
MARCOS 1,7-11
“Tú eres mi hijo
Amado mi predilecto”
En aquel tiempo,
proclamaba Juan: "Detrás de mí viene el que puede más que yo, y yo no
merezco agacharme para desatarle las sandalias. Yo os he bautizado con agua,
pero él os bautizará con Espíritu Santo." Por entonces llegó Jesús desde
Nazaret de Galilea a que Juan lo bautizara en el Jordán. Apenas salió del agua,
vio rasgarse el cielo y al Espíritu bajar hacia él como una paloma. Se oyó una
voz del cielo: "Tú eres mi Hijo amado, mi predilecto." Palabra del
Señor.
REFLEXIÓN
Las palabras de
Juan tuvieron que tener un impacto formidable en medio de la gente. Él mismo
era tenido por profeta y santo entre la gente, y he aquí que habla de alguien
"más grande," que además trae un bautismo "más grande."
Es más grande el
bautismo que trae Jesús porque declara mejor quién es Dios y revela mejor su
plan para el hombre. Mientras que Juan mostraba qué poca cosa nos volvemos
lejos de Dios, Jesús mostrará con su predicación y sus obras todo lo que
podemos ser cuando nos acercamos a Dios, ahora que Él mismo se ha acercado a
nosotros, precisamente en Jesucristo.
Entendamos
además que sólo por el discernimiento personal y comunitario se va
profundizando en el mensaje, la naturaleza y el origen de Jesús. La invitación
es para que a través del estudio de evangelio, la lectura orante de la Palabra,
la oración y el discernimiento personal y comunitario se profundice tanto en el
mensaje como en la práctica y la persona de Jesús. Ojalá no nos limitemos a
repetir rutinariamente las doctrinas aprendidas, la mejor catequesis y el mejor
aprendizaje es la contemplación de la persona del Maestro. ¿Reflexionemos cómo
contemplamos al Señor nuestra mi vida personal y comunitaria?
ORACIÓN
Señor, creemos que tu eres el Cristo, el Mesías enviado de
Dios. Te seguimos recibiendo hoy en nuestro corazón, eres nuestro único Señor y Salvador. Ayúdanos a vencer
toda tentación para que nada nos distraiga y desvíe de tus caminos. Enséñanos a
esperar en ti y confiar en tu amor día a día; ayúdanos a orar y contemplarte personal y comunitariamente
sin desfallecer, a ser siempre perseverantes. Amén.
“Jesús
se ha hecho el encontradizo con nosotros y nos ha convencido de que
Él
es el Camino, la Verdad y la Vida”
Domingo 07 de Enero
de 2018
EPÍFANIA DEL
SEÑOR
“SOMOS
MANIFESTACIÓN DE CRISTO”
PRIMERA LECTURA
ISAÍAS 60, 1-6
“La Gloria del
Señor amanece sobre ti”
¡Levántate, brilla, Jerusalén, que llega tu luz; la gloria
del Señor amanece sobre ti! Mira: las tinieblas cubren la tierra, la oscuridad
los pueblos, pero sobre ti amanecerá el Señor, su gloria aparecerá sobre ti; y
caminarán los pueblos a tu luz; los reyes al resplandor de tu aurora. Levanta
la vista en torno, mira: todos ésos se han reunido, vienen a ti: tus hijos
llegan de lejos, a tus hijas las traen en brazos. Entonces lo verás, radiante
de alegría; tu corazón se asombrará, se ensanchará, cuando vuelquen sobre ti
los tesoros del mar y te traigan las riquezas de los pueblos. Te inundará una
multitud de camellos, los dromedarios de Madián y de Efá. Vienen todos de Sabá,
trayendo incienso y oro, y proclamando las alabanzas del Señor. Palabra de
Dios.
REFLEXIÓN
La época en que se escribe esta parte
del libro del profeta Isaías (Tercer
Isaías) corresponde a la restauración, es decir, al regreso a Jerusalén de los
exiliados en Babilonia, regreso a la gran ciudad de Dios. Cuando este grupo de
exiliados llegó a Israel encontró sus ciudades destruidas, sus campos
abandonados o apropiados por otras familias, las murallas derruidas y el
templo, el lugar donde Yahvé habitaba, incendiado. Esta dramática realidad los
desanimó completamente, centrando sus esperanzas y sus motivaciones únicamente
en la reconstrucción de sus viviendas y sus campos, dejando de lado la
restauración del templo y, con ello, la confianza en la venida gloriosa de
Yahvé, quien traería para Israel la salvación plena en la misma historia. Isaías
exalta la grandeza de la ciudad de Jerusalén porque se convertirá en luz para
todos los pueblos. Es la luz para toda la humanidad, es la esperanza para los
pobres. La oscuridad de la injusticia y la violencia, la opresión y la
marginación será vencida definitivamente por la presencia luminosa de Dios
manifestada en el niño de Belén. Isaías anima la fe de su pueblo, los invita a
poner nuevamente su fe y su corazón en la fuerza salvadora de Yahvé, quien
traerá la paz y la justicia a su pueblo, por ello Jerusalén será una ciudad
radiante, llena de luz, en donde la presencia de Dios como rey hará de ella una
nación grande, ante cuya presencia se postrarán todos los pueblos de la tierra.
El profeta manifiesta con esta gran revelación que Dios es quien dará inicio a
una nueva época para Israel, una época donde reinará la luz de Dios y serán
destruidas todas las fuerzas del mal, pues Dios se hace presente en Israel y ya
más nadie podrá hacerle daño.
SALMO
RESPONSORIAL: 71
R./Se postrarán ante ti, Señor,
todos los reyes de la tierra.
Dios mío, confía tu juicio al rey,
tu justicia al hijo de reyes: para
que rija a tu pueblo con justicia,
a tus humildes con rectitud. R.
Que en sus días florezca la justicia
y la paz hasta que falte la luna;
que domine de mar a mar, del Gran
Río al confín de la tierra. R.
Que los reyes de Tarsis y de las
islas le paguen tributos;
que los reyes de Sabá y de Arabia le
ofrezcan sus dones,
que se postren ante él todos los
reyes,
y que todos los pueblos le sirvan.
R.
Porque él librará al pobre que clamaba,
al afligido que no tenía protector;
él se apiadará del pobre y del
indigente,
y salvará la vida de los pobres. R.
OREMOS
CON EL SALMO
Este salmo es una oración por el rey de Israel,
en la que se idealiza proféticamente su figura como gobernante que implanta la
justicia y la paz. El éxito del rey asegura la prosperidad para todo el
pueblo. Ya en el judaísmo este salmo fue
interpretado mesiánicamente y lo mismo ha hecho la liturgia cristiana. Cristo
es el verdadero Rey que establece la justicia y la paz, su reino es universal
SEGUNDA LECTURA
EFESIOS 3, 2-6
“Ahora ha sido revelado que también los
gentiles son coherederos”
Hermanos: Habéis oído hablar de la distribución de la gracia
de Dios que se me ha dado en favor vuestro. Ya que se me dio a conocer por
revelación el misterio que no había sido manifestado a los hombres en otros
tiempos, como ha sido revelado ahora por el Espíritu a sus santos apóstoles y
profetas: que también los gentiles son coherederos, miembros del mismo cuerpo y
partícipes de la Promesa en Jesucristo, por el Evangelio. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
En la carta de
Pablo a la comunidad de Éfeso hace caer en cuenta a todos los creyentes que las
promesas hechas al pueblo de la ley y la alianza ahora se extienden a los
gentiles, es decir, a toda la humanidad. De tal manera que la salvación no será
propiedad exclusiva de un pueblo sino de todos los pueblos, del gran pueblo de
Dios, es decir, de todos los seres humanos que se abren a la buena noticia de
la salvación. El plan de Dios, según Pablo, consiste en formar un solo pueblo,
una sola comunidad creyente, un solo cuerpo, una sola Iglesia, un organismo
vivo capaz de comunicar a toda la creación la vida y la salvación otorgada por
Dios. La carta a los Efesios expresa que el misterio recibido por Pablo
consiste en que la Buena Nueva de Cristo se hace efectiva también en los
paganos, ellos son coherederos y miembros de ese mismo Cuerpo; esto significa
que Dios se ha querido revelar a toda la humanidad, actúa en todos, salva a
todos, reconcilia a todos sin excepción.
LECTURA DEL
EVANGELIO
MATEO 2, 1-12
“Venimos de
oriente para adorar al Rey”
Jesús nació en Belén de Judá en tiempos del rey Herodes.
Entonces, unos Magos de Oriente se presentaron en Jerusalén preguntando:
"¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto salir
su estrella y venimos a adorarlo". Al enterarse el rey Herodes, se
sobresaltó, y todo Jerusalén con él; convocó a los sumos pontífices y a los
letrados del país, y les preguntó dónde tenía que nacer el Mesías. Ellos le
contestaron: "En Belén de Judá, porque así lo ha escrito el profeta:
"Y tú, Belén, tierra de Judá, no eres ni mucho menos la última de las
ciudades de Judá; pues de ti saldrá un jefe que será el pastor de mi pueblo
Israel". Entonces Herodes llamó en secreto a los Magos, para que le
precisaran el tiempo en que había aparecido la estrella, y los mandó a Belén,
diciéndoles: "Id y averiguad cuidadosamente qué hay del niño, y, cuando lo
encontréis, avisadme, para ir yo también a adorarlo". Ellos, después de
oír al rey, se pusieron en camino, y de pronto la estrella que habían visto
salir comenzó a guiarlos hasta que vino a pararse encima de donde estaba el
niño. Al ver la estrella, se llenaron de inmensa alegría. Entraron en la casa,
vieron al niño con María, su madre, y cayendo de rodillas lo adoraron; después,
abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra. Y habiendo
recibido en sueños un oráculo para que no volvieran a Herodes, se marcharon a
su tierra por otro camino. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
El evangelio que leemos hoy, en la Fiesta de la «Epi-fanía»,(Epifanía
que significa manifestación de la salvación de Dios) confirma este carácter
universal de la salvación de Dios. Mateo expresa, por medio de este relato
simbólico, el origen divino de Jesús y su tarea salvadora como Mesías, como rey
de Israel, heredero del trono de David; para ello el evangelista insiste en nombrar
con exactitud el lugar donde nació Jesús y en confirmar, a través del Antiguo
Testamento, que con su presencia en la historia se da cumplimiento a las
palabras de los profetas. Por otro lado, el rechazo de este nacimiento por
parte de las autoridades políticas (Herodes) y religiosas (sumos sacerdotes y
escribas) del pueblo judío y el gozo infinito de los magos, venidos de Oriente,
anuncian desde ya ese carácter universal de la misión de Jesús, la apertura del
evangelio a los paganos y su vinculación a la comunidad cristiana. La Epifanía
del Señor es la celebración precisa para confesar nuestra fe en un Dios que se
manifiesta a toda la humanidad, que se hace presente en todas las culturas, que
actúa en todos, y que invita a la comunidad creyente a abrir sus puertas a las
necesidades y diversidad del mundo actual. Es decir, Cristo es la epifanía (manifestación) de
la misericordia divina para nosotros y para todos los pueblos.
Es la epifanía, la manifestación
de Dios en su Hijo Jesucristo, que ha venido a nuestra tierra y que ha revelado
la gloria del Padre, vemos a los " los Magos
de Oriente", que nos menciona el evangelio, venidos de Oriente contemplan
a Jesucristo y le dan sus regalos. Es
de destacar, que más que un encuentro cualquiera, sin
importancia, estos personajes descubrieron en Cristo la satisfacción más
profunda de su búsqueda y de su anhelo. Porque ellos eran gente que observaba
los cielos, que exploraba el horizonte en la noche buscando una luz, buscando
una gracia, buscando una verdad, una sabiduría, y la encontraron en Cristo. De
modo que en Cristo vinieron a satisfacerse todas sus necesidades y anhelos. Pidamos al Señor, que Cristo sea nuestra
epifanía, que en Él encontremos la respuesta a nuestros interrogantes más
profundos, a nuestras búsquedas, a nuestra búsqueda de alegría y de paz, y que
nosotros mismos seamos epifanía de Dios para todos los que nos rodean.
ORACIÓN
Gracias, Padre,
porque te sigues manifestando en nuestra vida, con misericordia y amor, en tu
hijo Jesucristo. Queremos verte a ti, en este día y nuevo año presente en
nuestra historia, queremos acoger los signos permanentes de tu salvación;
queremos ofrecerte hoy nuestra vida y nuestra actividad, para que tu evangelio
sea conocido cada vez más y tu Reino se establezca en nuestro mundo. Amén.
“Dispongámonos a
regalar a Jesús nuestra vida transformada, tiempo, facultades y talentos”
Lunes, 08 de Enero
de 2018
BAUTISMO DEL
SEÑOR
“JESÚS ES EL
HIJO AMADO”
PRIMERA LECTURA
ISAÍAS
42,1-4.6-7
“Mira a mi
Siervo, a quien prefiero”
Así dice el Señor: "Mirad a mi
siervo, a quien sostengo; mi elegido, a quien prefiero. Sobre él he puesto mi
espíritu, para que traiga el derecho a las naciones. No gritará, no clamará, no
voceará por las calles. La caña cascada no la quebrará, el pábilo vacilante no
lo apagará. Promoverá fielmente el derecho, no vacilará ni se quebrará, hasta
implantar el derecho en la tierra, y sus leyes que esperan las islas. Yo, el
Señor, te he llamado con justicia, te he cogido de la mano, te he formado, y te
he hecho alianza de un pueblo, luz de las naciones. Para que abras los ojos de
los ciegos, saques a los cautivos de la prisión, y de la mazmorra a los que
habitan las tinieblas." Palabra de Dios.
REFLEXIÓN
Es necesario y saludable insistir, como se hace
en la Iglesia, en una verdad fundamental: Cristo es el Hijo de Dios. Mas esa
afirmación central no anula otras que son posibles, que vienen de la Escritura
y que hacen mucho bien a nuestro entendimiento y gran misterio de
Jesucristo; hoy vamos a centrarnos en
Cristo como "Siervo" de Dios.Partamos de una base: proclamar el
señorío de Dios es proclamar nuestra servidumbre hacia Dios. ¿Qué es, en
efecto, un señor sin siervos? ¿Hay algo más ridículo que un señor que no tiene
quién atienda a sus órdenes ni quién quiera agradarle con sus acciones? Si
tomamos en serio que Dios es Señor hemos de tomar en serio que nosotros somos
siervos suyos. Y tal es el mensaje de Cristo: mostrándose en obras y palabras
como verdadero Siervo de Dios mostró con sus palabras y con sus obras que Dios
es el Señor, es decir, mostró que Dios reina; nos dejó ver el Reino de
Dios.Isaías, en la primera lectura de hoy, nos presenta un perfil de un siervo
de Dios. De todas las características que él menciona, detengámonos en una, o
mejor en la combinación de dos de ellas: compasivo y fuerte. No rompe la caña
resquebrajada y a la vez manifiesta firmemente el derecho. Entiende al cansado
pero no se cansa; acoge al caído mientras conserva su propio lugar y su propia
misión. ¡Admirable virtud, que bien vemos brillar en Jesucristo!
SALMO
RESPONSORIAL: 28
R./El Señor bendice
a su pueblo con la paz.
Hijos de Dios, aclamad al Señor,
aclamadla gloria del nombre del Señor,
postraos ante el Señor en el atrio
sagrado. R.
La voz del Señor sobre las aguas,
el Señor sobre las aguas torrenciales.
La voz del Señor es potente,
la voz del Señor es magnífica. R.
El Dios de la gloria ha tronado.
En su templo un grito unánime:
"¡Gloria!"
El Señor se sienta por encima del aguacero,
el Señor se sienta como rey eterno. R.
OREMOS
CON EL SALMO
El salmista ve
en la tempestad un signo del poder inmenso de Dios e implora para su pueblo la
fortaleza y la paz. Aunque nosotros veamos hoy los fenómenos naturales de manera
menos religiosa que los antiguos, el ser humano siente su pequeñez en esos
momentos y reconoce a grandeza y trascendencia de Dios. La oración por la paz
es tan actual como entonces.
SEGUNDA LECTURA
HECHOS DE LOS APÓSTOLES 10,34-38
“Ungidos por dios con la fuerza del
Espíritu Santo”
En aquellos días, Pedro tomó la palabra
y dijo: "Está claro que Dios no hace distinciones; acepta al que lo teme y
practica la justicia, sea de la nación que sea. Envió su palabra a los
israelitas, anunciando la paz que traería Jesucristo, el Señor de todos.
Conocéis lo que sucedió en el país de los judíos, cuando Juan predicaba el
bautismo, aunque la cosa empezó en Galilea. Me refiero a Jesús de Nazaret,
ungido por Dios con la fuerza del Espíritu Santo, que pasó haciendo el bien y
curando a los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él." Palabra
del Señor.
REFLEXIÓN
En casa de
Cornelio, un extranjero, Pedro tiene su propia experiencia de la resurrección
de Jesús en su vida y al mismo tiempo de la presencia pentecostal del espíritu
del resucitado que le da nueva vida. Como resultado de este encuentro con el
Dios de la vida representado en Jesús de Nazareth, comienza a abrírsele los
ojos para romper con radicalidad, con su cultura y mentalidad judías y entender
y aceptar el proyecto universal del Mesías que se ha cumplido en Cristo
Jesús.Con gran convicción Pedro lleno del Espíritu da testimonio de Jesús y lo
hace con palabras que muestran su contacto con él; habla de su propia
experiencia de haber descubierto a Jesús como el ungido como el Espíritu que
pasó por la vida haciendo el bien. “Hemos comido y bebido con él después de su
resurrección” es el gran anuncio testimonial que Pedro da. Qué certera
descripción de Jesús. Quién nos diera a nosotros también pasar por esta vida viviendo al estilo de
Jesús como vivió Pedro.
LECTURA DEL
EVANGELIO
MARCOS 1, 7-11
“Tú eres mi Hijo
Amado, mi predilecto”
En aquel tiempo, proclamaba Juan:
"Detrás de mí viene el que puede más que yo, y yo no merezco agacharme
para desatarle las sandalias. Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará
con Espíritu Santo." Por entonces llegó Jesús desde Nazaret de Galilea a
que Juan lo bautizara en el Jordán. Apenas salió del agua, vio rasgarse el
cielo y al Espíritu bajar hacia él como una paloma. Se oyó una voz del cielo:
"Tú eres mi Hijo amado, mi predilecto." Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Jesús se hizo
bautizar. He aquí otro dato maravilloso del camino de epifanía de Jesús. El
bautismo de Juan tiene como finalidad el arrepentimiento. Pablo dice que en
Jesús no había pecado. Entonces ¿cómo se debe entender el bautismo de Jesús?
Sencillamente porque Él, siendo Dios, asumió en todo nuestra condición humana.
Por el Bautismo, Jesús se solidariza con la tragedia humana para liberarla y
comunicarle la vida en plenitud que viene del mismo Dios. Por otra parte, es la
manifestación del compromiso de Jesús con su pueblo. Al sumergirse en las aguas
bautismales Jesús se compromete radicalmente con la historia del pueblo para
luchar por su dignificación, su liberación integral. En el Bautismo, Dios Padre
manifiesta su complacencia con su Hijo, de tal manera que la misión del Hijo es
obediencia al Padre. Es la oportunidad para hacer memoria de nuestro propio
bautismo y revisar nuestro camino de conversión sincera y compromiso con la
justicia y la paz para todos. ¿Cómo has vivido tu compromiso al hacerte hijo de
Dios? ¿Qué aspectos piensas trabajar para vivir auténticamente el bautismo
recibido?
ORACIÓN
Tú, Señor, que nos
has formado, nos has tomado de la mano para que podamos ver la grandeza de tu misericordia. Nos
has hecho tus hijos(as) y nos has elegido para que llevemos al mundo el mensaje
de tu amor y justicia. Así como tú fuiste bautizado con el fuego del Espíritu
Santo, te pedimos nos bautices y renueves hoy a nosotros y nuestras
familias, con ese mismo fuego
transformador de tu Espíritu que nos da vida nueva. Amén.
Martes 09 de Enero de 2018
“ENSEÑAR CON LA
AUTORIDAD QUE DA LA SABIDURÍA”
PRIMERA LECTURA
1SAMUEL 1, 9-20
“El Señor se acordó de Ana, y dio a luz a
Samuel”
En aquellos
días, después de la comida en Siló, mientras el sacerdote Elí estaba sentado en
su silla junto a la puerta del templo del Señor, Ana se levantó y,
desconsolada, rezó al Señor deshaciéndose en lágrimas e hizo este voto:
"Señor de los ejércitos, si te dignas mirar la aflicción de tu esclava, si
te acuerdas de mí y no me olvidas, si concedes a tu esclava un hijo varón, se
lo ofreceré al Señor para toda la vida y la navaja no pasará por su cabeza".
Mientras repetía su oración al Señor, Elí la observaba. Ana hablaba para sus
adentros: movía los labios, sin que se oyera su voz. Elí, creyendo que estaba
borracha, le dijo: "¿Hasta cuándo vas a seguir borracha?. Devuelve el vino
que has bebido". Ana respondió: "No es eso, señor; no he bebido vino
ni licores; lo que pasa es que estoy afligida y me desahogo con el Señor. No me
tengas por una mujer perdida, que hasta ahora he hablado movida por mi gran
desazón y pesadumbre". Entonces dijo Elí: "Vete en paz. Que el Señor
de Israel te conceda lo que le has pedido". Y ella respondió: "Que tu
sierva halle gracia ante ti".
La mujer se
marchó, comió, y se transformó su semblante. A la mañana siguiente madrugaron,
adoraron al señor y se volvieron. Llegados a su casa de Ramá, Elcaná se unió a
su mujer, Ana, y el Señor se acordó de ella. Ana concibió, dio a luz un hijo y
le puso de nombre Samuel, diciendo: "¡Al Señor se lo pedí!" Palabra
de Dios.
REFLEXIÓN
Es oportuno preguntarnos por qué leemos hoy el primer libro de
Samuel. Ya iniciamos el tiempo
ordinario, como hemos dicho antes este tiempo es una espaciosa contemplación
del misterio de Cristo a lo largo de los evangelios. Ahora bien, como los
evangelios son la culminación de cuanto fue anunciado en el Antiguo Testamento,
es natural que la primera lectura de la mayor parte del tiempo ordinario venga
del Antiguo Testamento para que veamos de modo más completo quién es Jesús, que
fue anunciado y esperado desde tiempos tan antiguos.La primera lectura empieza en los orígenes de
la dinastía del rey David, porque precisamente Jesús será el verdadero
"David." Y para entender de dónde viene el rey David hay que ir a los orígenes de la
monarquía misma, que arranca de los tiempos del profeta Samuel, hijo de Ana.Con Samuel se divide la historia entre jueces y monarcas.
Samuel abre la historia de la monarquía en Israel, de una manera polémica y de
una manera difícil, a veces casi en contra de su propia voluntad, abre la etapa
de la monarquía y prepara la llegada de ese rey David.
Y veamos a Ana, no deja de ser conmovedor ver que
en la esterilidad vencida de esta pobre mujer hay una señal del amor divino que
finalmente conduce a la designación de David como rey de Israel y de Judá.A lo
largo de ese camino iremos descubriendo que hay ciertas "constantes,"
como, por ejemplo, la alegría de los humildes. Desde el cántico de Ana, madre
de Samuel, hasta el cántico de María, madre de Jesús, hay una continuidad en la
alegría de todos los que se han sentido abandonados y humillados por el mundo
pero han descubierto en Dios su fortaleza y su victoria.
SALMO
RESPONSORIAL: 1 SAMUEL 2,1.4-8
R./Mi corazón se
regocija por el Señor, mi salvador.
Mi corazón se
regocija por el Señor, mi poder se exalta por Dios;
mi boca se ríe
de mis enemigos, porque gozo con tu salvación. R.
Se rompen los
arcos de los valientes, mientras los cobardes se ciñen de valor;
los hartos se
contratan por el pan, mientras los hambrientos engordan;
la mujer estéril
da a luz siete hijos, mientras la madre de muchos queda baldía. R.
El Señor da la
muerte y la vida, hunde en el abismo y levanta;
da la pobreza y
la riqueza, humilla y enaltece. R.
El levanta del
polvo al desvalido, alza de la basura al pobre,
para hacer que
se siente entre príncipes y que herede un trono de gloria. R.
OREMOS
CO N EL SALMO
Una voz de mujer
nos guía hoy en la oración de alabanza al Señor de la vida. Es Ana la persona
que entona este himno, después de ofrecer al Señor su niño, el pequeño Samuel.
El canto de acción de gracias que eleva a Dios esta madre será recogido y
difundido por otra madre, María, la cual, siendo virgen, engendrará por obra
del Espíritu de Dios. En el Magníficat de la madre de Jesús se trasluce el
cántico de Ana que, precisamente por esto, suele definirse «el Magníficat del
Antiguo Testamento».
LECTURA DEL
EVANGELIO
MARCOS 1,21-28
“Les enseñaba con
autoridad”
Llego Jesús a
Cafarnaúm y cuando el sábado siguiente fue a la sinagoga a enseñar, se quedaron
asombrados de su enseñanza, porque no enseñaba como los letrados, sino con
autoridad. Estaba precisamente en la sinagoga un hombre que tenía un espíritu
inmundo, y se puso a gritar: "¿Qué quieres de nosotros, Jesús Nazareno?
¿Has venido a acabar con nosotros? Sé quién eres: el Santo de Dios". Jesús
lo increpó: "Cállate y sal de él". El espíritu inmundo lo retorció y,
dando un grito muy fuerte, salió.Todos se preguntaron estupefactos: "¿Qué
es esto? Este enseñar con autoridad es nuevo. Hasta a los espíritus inmundos
les manda y le obedecen". Su fama se extendió en seguida por todas partes,
alcanzando la comarca entera de Galilea. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Retomamos el tiempo ordinario y seremos llevados por la mano del
Evangelista San Marcos quien nos presenta a Jesús como el Mesías esperado. En
este fragmento vemos el fundamento de la autoridad de Jesús: sus palabras
(enseñanzas) y sus obras (acciones y milagros) están íntimamente ligadas. Algo
que hace tanta falta en nuestros tiempos ante la palabra hueca, la promesa
falsa, el juramento vacío, sin concretarse en hechos. Jesús se presenta como
quién sabe lo que enseña y hace bien lo que ofrece. Ante la pregunta del
endemoniado: ¿Qué tienes que ver con nosotros, Jesús de Nazaret? La respuesta
que ofrece Jesús a través de sus acciones es: “Tengo que ver todo, vengo a
desterrar toda maledicencia, toda injusticia, toda violencia, toda mentira” y
que se encarnan en la persona poseída. Estamos llamados a colaborar en la
justicia, la verdad y la paz aunque sea con acciones pequeñas.
ORACIÓN.
Te alabamos y te damos gracias Padre
misericordioso por este nuevo día, y por tu Bendita Palabra que nos da vida. Danos
hoy una palabra con autoridad, una palabra que sea capaz de sanar, de construir
espacios de bendición, como en el evangelio de hoy; una palabra con autoridad,
que libere, que construya puentes, una palabra como la tuya que edifique, una
palabra que eres tú, que genere vida en abundancia. Amén.
“Pidamos al Señor que nos ayude a amar y servir al
prójimo con el mismo amor con el que le amamos a Él”
Miércoles 10 de Enero
de 2018
“EL
BIEN DEL HERMANO ES PRIMORDIAL”
PRIMERA LECTURA
1SAMUEL 3, 1-20
“Habla Señor,
que tu siervo te escucha”
En aquellos
días, el pequeño Samuel servía en templo del Señor bajo la vigilancia de Elí.
Por aquellos días las palabras del Señor eran raras y no eran frecuentes las
visiones. Un día estaba Elí acostado en su habitación; se le iba apagando la
vista y casi no podía ver. Aún ardía la lámpara de Dios, y Samuel estaba
acostado en el templo del Señor, donde estaba el arca de Dios. El Señor llamó a
Samuel y él respondió: "Aquí estoy. Fue corriendo a donde estaba Elí y le
dijo: "Aquí estoy; vengo porque me has llamado". Respondió Elí:
"No te he llamado; vuelve a acostarte. Samuel volvió a acostarse. Volvió a
llamar el Señor a Samuel. El se levantó y fue a donde estaba Elí y le dijo:
"Aquí estoy, vengo porque me has llamado". Respondió Elí: "No te
he llamado, hijo mío; vuelve a acostarte".
Aún no conocía
Samuel al Señor, pues no le había sido revelada la palabra del Señor. Por
tercera vez llamó el Señor a Samuel, y él se fue a donde estaba Elí y le dijo:
"Aquí estoy; vengo porque me has llamado". Elí comprendió que era el
Señor quien llamaba al muchacho y dijo a Samuel: "Anda, acuéstate; y si te
llama alguien, responde: Habla Señor, que tu siervo te escucha". Samuel
fue y se acostó en su sitio. El Señor se presentó y le llamó como antes:
"¡Samuel, Samuel!" El respondió: "Habla, Señor, que tu siervo te
escucha". Samuel crecía, Dios estaba con él, y ninguna de sus palabras
dejó de cumplirse; y todo Israel, desde Dan hasta Berseba, supo que Samuel era
profeta acreditado ante el Señor. Palabra de Dios.
REFLEXIÓN
Samuel niño
recibe el llamado de Dios en la oscuridad de la noche. Se ha dicho que en la
noche se apagan las luces y se encienden las voces, y es verdad que desde un
punto de vista físico oímos más en la quietud de la noche. La primera enseñanza
de hoy es que a menudo estaremos más dispuestos para oír las inspiraciones del
cielo si logramos sustraernos un poco de los intereses, ruidos y ocupaciones de
esta tierra. El texto nos dice que “la palabra de Dios era escasa.” Notemos que
escaso no significa débil. La palabra de Dios no es débil porque sabe abrirse
paso en medio de las infidelidades de los hombres y llegar hasta Samuel. Esto
es importante: Dios se abrirá paso; Dios hallará un camino.
En segundo
lugar, vemos que no es débil la Palabra porque todo lo que Samuel habrá de
pronunciar, aun siendo un criado en casa de Elí, es sumamente fuerte: la
devastación de la propia casa de Elí, entre otras cosas. De aquí aprendemos que
la fuerza de Dios no disminuye porque crezca su discreción, más se hace fuerte
y avanza hasta cumplir su misión.
SALMO
RESPONSORIAL: 39
Aquí estoy,
Señor, para hacer tu voluntad.
Yo esperaba con
ansia al Señor: él se inclinó y escuchó mi grito.
Dichoso el
hombre que ha puesto su confianza en el Señor,
y no acude a los
idólatras que se extravían con engaños. R.
Tú no quieres
sacrificios ni ofrendas, y en cambio me abriste el oído;
no pides
sacrificio expiatorio, entonces yo digo: "Aquí estoy". R.
Como está
escrito en mi libro: "Para hacer tu voluntad".
Dios mío, lo
quiero, y llevo tu ley en las entrañas. R.
OREMOS CON EL
SALMO
En este Salmo se encuentran reunidos dos poemas de
estilo y contenido diversos. El primero es un canto de acción de gracias por la
liberación de un peligro grave. El segundo es una súplica para pedir la ayuda
divina en un momento de desgracia, La obediencia de Cristo es el sacrificio
perfecto que supera los antiguos sacrificios. Él nos muestra la fidelidad y el
poder liberador de Dios.
LECTURA DEL
EVANGELIO
MARCOS 1, 29-39
“Curó a muchos
enfermos de diversos males”
En aquel tiempo,
al salir Jesús de la sinagoga, fue con Santiago y Juan a casa de Simón y
Andrés. La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, y se lo dijeron. Jesús se
acercó, la cogió de la mano y la levantó. Se le pasó la fiebre y se puso a
servirles.Al anochecer, cuando se puso el sol, le llevaron todos los enfermos y
poseídos. La población entera se agolpaba a la puerta. Curó a muchos enfermos
de diversos males y expulsó muchos demonios; y como los demonios lo conocían,
no les permitía hablar. Se levantó de madrugada, se marchó al descampado y allí
se puso a orar. Simón y sus compañeros fueron y, al encontrarlo, le dijeron:
"Todo el mundo te busca". El les respondió: "Vámonos a otra
parte, a las aldeas cercanas, para predicar también allí; que para eso he
venido". Así recorrió toda Galilea, predicando en las sinagogas y
expulsando los demonios. Palabra del Señor.
REFLEXIÓN
Jesús distingue
perfectamente lo urgente de lo prioritario. Lo urgente, atender a todos los que
buscan alivio en sus palabras de liberación, sanación y sabiduría; lo
prioritario, anunciar el reino de Dios a todo el pueblo sediento de esperanza.
Esa claridad de discernimiento nace de su oración constante, que no le quita
tiempo a su ministerio sino que lo alimenta y fortalece. Atrás deja un grupo
humano que, como la suegra de Pedro, lo recibe y apoya; adelante, aparece el
gran desafío de la misión. Todos los que seguimos a Jesús nos sentimos
cautivados por sus palabras y por su estilo de vida; sus prioridades vitales
son un referente al cual acudir en nuestro diario discernimiento. La sociedad
en la que vivimos nos abruma con infinidad de ofertas para distraernos, que nos
proveen de información inútil y nos crean necesidades superfluas; las palabras
y el testimonio de vida de Jesús nos dan la claridad necesaria para distinguir
lo prioritario de lo urgente.Debemos atender las urgencias de cada día,
relacionadas con el trabajo, la familia, nuestro entorno y otras preocupaciones
reales; pero no podemos perder de vista lo prioritario: seguir a Jesús y
anunciar su mensaje.
ORACIÓN
Habla, Señor, que hoy queremos escucharte, somos
tu siervos(as) aquí estamos como Samuel, como María de Nazareth, para cumplir
tu voluntad, para hacer lo que debamos hacer, para construir en este día
contigo un camino nuevo que nos lleve al
encuentro del amor, la justicia, la paz, la felicidad, a una tierra nueva donde
mane leche y miel. Ayúdanos como discípulos(as) a apartarnos como tú a solas
para orar y en la oración encontrar la fuerza y la luz para enfrentar los retos
que la vida hoy nos exige. Amén.
“El objetivo de
la presencia de Dios entre nosotros es devolver al ser humano su dignidad de
hijos de Dios”
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