miércoles, 1 de febrero de 2012

LA FELICIDAD NUNCA ES COMPLETA


Los seres humanos somos inconformes con todo y siempre queremos tener algo más, algo distinto a lo que la vida ya nos ha regalado. Pero la verdadera felicidad no consiste en tenerlo todo, sino en sacar lo bueno que tiene, porque las personas felices aceptan las cosas que no tienen remedio, pero luchan por cambiar aquellas que tienen solución- “Es porque soy tan testaruda que todavía insisto en cambiar el mundo”-, decía Mercedes Sosa. Así mismo, luchar por lo que te hace falta no es malo excepto cuando devalúa lo que ya se tiene.


Un ejemplo claro es aquella fábula del perro que suelta el hueso que tenía en la boca, por agarrar uno más grande que vio en el agua… pero que tan sólo era un reflejo del que tenía y perdió ambos. ¿Qué es lo que nos hace ver el vaso medio lleno o medio vacío?, la respuesta es : el optimismo, la fe y la esperanza, en la habilidad de interpretar nuestra vida con un matiz esperanzador.


La paloma puede protestar contra el aire, sin darse cuenta de que es lo único que le permite volar. A menudo sobrevaloramos la realidad y, nos olvidamos de seguir soñando; perdemos la capacidad de volvernos a ilusionar. Nos quejamos tanto que las cosas están cada día peor, que ni nos damos cuenta de los avances. Tener fe es tener esperanza, tener esperanza es no dejar morir la ilusión, los sueños y el optimismo; el optimismo es un proceso, no un estado fijo de felicidad, y está al alcance de cualquiera.

Nunca acabas de estar satisfecho con algo. Si querías trabajo, luego te quejas porque trabajaste
mucho. Si querías una casa, luego te lamentas de las deudas que representa. Si querías a alguien que te amara y valorara, cuando llega…nunca piensas que te lo demuestra suficientemente y añoras estar solo o sola. Sin embargo la felicidad siempre la tenemos a nuestro lado, siempre ha formado parte de nuestra vida, es nuestra gran compañera, lo importante es que nos decidamos permitirla y aceptarla en sus muchas de las facetas que se aparece.

Para ser feliz y conservar lo bello que tienes, te propongo considerar 3 cosas:


1. No es feliz quien más tiene sino quien menos necesita
2. La vida no es feliz, sólo tiene momentos felices.
3. La felicidad no es un sentimiento, es una búsqueda y ante todo una decisión.

Solo queda de mi parte el proponerte a tener la disposición de: “atreverse a ser feliz con lo que eres, tienes y puedes; sin exigir más y sin quejarte más”. Bendiciones en este nuevo mes y que el plan o proyecto de Dios se siga desarrollando en tu vida.


Roberto Zamudio

MIÉRCOLES 01 de FEBRERO DE 2012

Miércoles 4ª semana de tiempo ordinario

PRIMERA LECTURA
2SAMUEL 24,2.9-17


“SOY YO EL QUE HA PECADO, HACIENDO EL CENSO DE LA POBLACIÓN. ¿QUÉ HAN HECHO ESTAS OVEJAS?”


En aquellos días, el rey David ordenó a Joab y a los jefes del ejército que estaban con él: "Id por todas las tribus de Israel, desde Dan hasta Berseba, a hacer el censo de la población, para que yo sepa cuánta gente tengo." Joab entregó al rey los resultados del censo: en Israel había ochocientos mil hombres aptos para el servicio militar, y en Judá quinientos mil. Pero, después de haber hecho el censo del pueblo, a David le remordió la conciencia y dijo al Señor: "He cometido un grave error. Ahora, Señor, perdona la culpa de tu siervo, porque ha hecho una locura."
Antes que David se levantase por la mañana, el profeta Gad, vidente de David, recibió la palabra del Señor: "Vete a decir a David: "Así dice el Señor: Te propongo tres castigos; elige uno, y yo lo ejecutaré."" Gad se presentó a David y le notificó: "¿Qué castigo escoges? Tres años de hambre en tu territorio, tres meses huyendo perseguido por tu enemigo, o tres días de peste en tu territorio. ¿Qué le respondo al Señor, que me ha enviado?" David contestó: "¡Estoy en un gran apuro! Mejor es caer en manos de Dios, que es compasivo, que caer en manos de hombres."
Y David escogió la peste. Eran los días de la recolección del trigo. El Señor mandó entonces la peste a Israel, desde la mañana hasta el tiempo señalado. Y desde Dan hasta Berseba, murieron setenta mil hombres del pueblo. El ángel extendió su mano hacia Jerusalén para asolarla. Entonces David, al ver al ángel que estaba hiriendo a la población, dijo al Señor: "¡Soy yo el que ha pecado! ¡Soy yo el culpable! ¿Qué han hecho estas ovejas? Carga la mano sobre mí y sobre mi familia." El Señor se arrepintió del castigo, y dijo al ángel, que estaba asolando a la población: "¡Basta! ¡Detén tu mano!"

REFLEXIÓN
Muchas cosas del Antiguo Testamento pueden parecernos injustas, mágicas o primitivas, según los ojos modernos. Es injusto que una persona haga algo y otras paguen, como lo que vemos en la primera lectura de hoy. Suena a mágico eso de que Dios haga depender de un diálogo la suerte de todo un pueblo.
Nos puede parecer extraño que un censo sea pecado, pero el problema del censo no es el contar gente, sino pretender apoyarse en las propias fuerzas, y también el pretender justificar las victorias a partir de la propia habilidad militar, o de la reunión de fuerzas humanas, es pretender reducir la obra de Dios, la obra de la salvación de Dios a causas enteramente mundanas. Y esto significa quitarle la gloria a Dios para erigirnos nosotros como autores de nuestra propia salvación. Es la pretensión de quitarle la gloria a Dios y pretender que podemos responder de nuestra vida y podemos darle la gloria a nuestra vida, presentándonos como única causa de nuestra propia salvación.
También este texto nos deja otra lección, sobre todo, que el pecado tiene consecuencias y que esas consecuencias no son sólo personales sino que afectan en realidad y a fondo la historia de otras personas. Si cada gobernante meditara que su corazón es el lugar donde tiene que encontrarse con la verdad de su conciencia y con la voz de Dios, ¿no es verdad que tendríamos mejores gobiernos y gobernantes?

SALMO RESPONSORIAL: 31
R. / Perdona, Señor, mi culpa y mi pecado.

Dichoso el que está absuelto de su culpa,
a quien le han sepultado su pecado;
dichoso el hombre a quien el Señor
no le apunta el delito. R.

Había pecado, lo reconocí,
no te encubrí mi delito;
propuse: "Confesaré al Señor mi culpa",
y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R.

Por eso, que todo fiel te suplique
en el momento de la desgracia:
la crecida de las aguas caudalosas
no lo alcanzará. R.

Tú eres mi refugio, me libras del peligro,
me rodeas de cantos de liberación. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 6,1-6

“NO DESPRECIAN A UN PROFETA MÁS QUE EN SU TIERRA.”

En aquel tiempo, fue Jesús a su pueblo en compañía de sus discípulos. Cuando llegó el sábado, empezó a enseñar en la sinagoga; la multitud que lo oía se preguntaba asombrada: "¿De dónde saca todo eso? ¿Qué sabiduría es ésa que le han enseñado? ¿Y esos milagros de sus manos? ¿No es éste el carpintero, el hijo de María, hermano de Santiago y José y Judas y Simón? Y sus hermanas ¿no viven con nosotros aquí?" Y esto les resultaba escandaloso.
Jesús les decía: "No desprecian a un profeta más que en su tierra, entre sus parientes y en su casa." No pudo hacer allí ningún milagro, sólo curó algunos enfermos imponiéndoles las manos. Y se extrañó de su falta de fe. Y recorría los pueblos de alrededor enseñando.

REFLEXIÓN
La aceptación de la misión de Jesús por parte del pueblo sencillo corre pareja al rechazo de sus familiares y paisanos. Si sus parientes lo buscan es porque consideran que está fuera de sí (Mc 3, 21.31-34). A Jesús le desprecian por conocerle y por tener un oficio humilde como ellos. Es decir, por ser uno de ellos. En respuesta, Jesús no se enoja, sino que se sorprende de lo despistados que están sus paisanos: no tienen ojos para el acontecer de Dios en la vida diaria. La religión no es para ellos un camino cotidiano, sino una actividad que se realiza en la sinagoga y en el Templo. ¿Cuántas veces nosotros actuamos de la misma forma? Permanecemos completamente despistados y no aterrizamos con nuestras opciones religiosas para dar significado a los acontecimientos maravillosos de la vida cotidiana. Esperamos grandes predicadores, pero difícilmente escuchamos a la vecina que nos narra la salvación de su economía doméstica, o la historia de la mamá que logra rescatar a un hijo alcohólico o drogadicto (Lc 15, 1-31). Jesús no narra nunca cataclismos inexplicables, sino la acción de un Dios que nos salva en la vida cotidiana.

ORACIÓN
Al comenzar este nuevo mes, mi corazón se eleva a ti para darte gracias y adorarte por una nueva oportunidad de conocerte, amarte y servirte a través de este devocional de Día a Día con tu Palabra. Señor, ¿A quién iré sino a ti? Si solo tú tienes palabras de vida eterna, solo tú
puedes saciar los anhelos más profundos de mi corazón.
Seguirte implica confiar, creer y esperar en ti. Invoco hoy tu nombre sobre mi vida y sobre los míos, pidiendo tú ayuda para poder permanecer fiel y dócil a tu amor y a recordar siempre en quien he puesto mi confianza. Amén

JUEVES, 02 DE FEBRERO DE 2012

Fiesta de la Presentación del Señor


"ABRAMOS LAS PUERTAS A DIOS"



PRIMERA LECTURA
MALAQUÍAS 3,1-4



"ENTRARÁ EN EL SANTUARIO EL SEÑOR A QUIEN VOSOTROS BUSCÁIS”



Así dice el Señor: "Mirad, yo envío a mi mensajero, para que prepare el camino ante mí. De pronto entrará en el santuario el Señor a quien vosotros buscáis, el mensajero de la alianza que vosotros deseáis. Miradlo entrar -dice el Señor de los ejércitos-. ¿Quién podrá resistir el día de su venida?, ¿quién quedará en pie cuando aparezca? Será un fuego de fundidor, una lejía de lavandero: se sentará como un fundidor que refina la plata, como a plata y a oro refinará a los hijos de Leví, y presentarán al Señor la ofrenda como es debido. Entonces agradará al Señor la ofrenda de Judá y de Jerusalén, como en los días pasados, como en los años antiguos."

REFLEXIÓN
Malaquías, como tantos otros profetas del Señor, hasta Juan Bautista inclusive, anunció un Día descrito con vigorosos y turbadores trazos. El Día de refinar los corazones y hacer aparecer la verdad de cada uno frente a Dios. Para ese Día, anuncia este profeta, el Señor entrará en su santuario.

Y el Señor entró en su Santuario. Es lo que celebramos hoy: Jesús entra en el templo. Y sin embargo, su entrada es humilde y reconocida sólo por unos cuantos humildes.

Aparentemente aparece una contradicción, frente al mensaje tremendo que venía de los profetas: se anunciaba fuego y llegó calidez; se anunciaba juicio y llegó salvación; se anunciaba temor y llegó mansedumbre. Bien está el anuncio del juicio que despierta la conciencia, pero mucho mejor es el evangelio de la conversión, de aquello que nos dice: "no he venido por los justos sino por los pecadores". Bien está el temor, pero mejor la mansedumbre que nos atrae al bien y a la reconciliación. Bien está el fuego, pero mejor la calidez que acoge al hombre peregrino, agotado del camino y hastiado de sí mismo. Bien esta Jesús con su mensaje de amor y esperanza.

SALMO RESPONSORIAL: 23
R. /El Señor, Dios de los ejércitos, es el Rey de la gloria.

¡Portones!, alzad los dinteles,
que se alcen las antiguas compuertas: / va a entrar el Rey de la gloria. R.

-¿Quién es ese Rey de la gloria?
-El Señor, héroe valeroso;
el Señor, héroe de la guerra. R.

¡Portones!, alzad los dinteles,
que se alcen las antiguas compuertas:
va a entrar el Rey de la gloria. R.

-¿Quién es ese Rey de la gloria?
-El Señor, Dios de los ejércitos.
Él es el Rey de la gloria. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
LUCAS 2,22-40

“MIS OJOS HAN VISTO A TU SALVADOR”


Cuando llegó el tiempo de la purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor, de acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: "Todo primogénito varón será consagrado al Señor", y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: "un par de tórtolas o dos pichones."

Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre justo y piadoso, que aguardaba el consuelo de Israel; y el Espíritu Santo moraba en él. Había recibido un oráculo del Espíritu Santo: que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo. Cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo previsto por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: "Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel." Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. Simeón los bendijo, diciendo a María, su madre: "Mira, éste está puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; será como una bandera discutida: así quedará clara la actitud de muchos corazones. Y a ti, una espada te traspasará el alma."

Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Era una mujer muy anciana; de jovencita había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo día y noche, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones. Acercándose en aquel momento, daba gracias a Dios y hablaba del niño a todos los que aguardaban la liberación de Jerusalén.

Y, cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño iba creciendo y robusteciéndose, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba.

REFLEXIÓN
En el Evangelio de Lucas la misión de Jesús se desvela en el ámbito de las profecías. El anciano Simeón y la profetisa Ana anuncian la esperanza que se ve realizada en ese niño, que se llama Jesús y que significa salvación. Según Lucas, toda la revelación del Primer Testamento condensada en la Ley, en los profetas y en los sabios se hace realidad en la acción de Jesús. Él encarna la nueva ley, la sabiduría divina y el anuncio del mundo nuevo que se hace realidad en la resurrección para la comunidad creyente, y en la predicación de la iglesia cristiana para el mundo. La fiesta de hoy, la ‘Presentación del Señor’, conmemora la consagración de Jesús como primogénito de su familia en el orden de la Ley Judía y anticipa la primogenitura por la resurrección en el nuevo orden del pueblo cristiano. La fiesta muestra a la familia de Nazaret como una familia fielmente creyente y hace patente cómo las limitaciones impuestas por su pobreza no le impiden cumplir cabalmente todos los requisitos religiosos de la época. Este relato, en definitiva, nos muestra a un Jesús plenamente inserto en su mundo, su cultura y su religión. Es decir, un ser humano como nosotros.

ORACIÓN
Buen señor, en este nuevo día te reconozco en mi vida como el Mesías anunciado por los profetas, como la luz que habría de alumbrar a todas las naciones. Que, al igual que tu, yo crezca en sabiduría y gracia para que sepa anunciar al mundo que el tiempo de la salvación ha llegado. Amén

VIERNES, 3 DE FEBRERO DE 2012

“DOS GRANDES HOMBRES DEL SEÑOR”

PRIMERA LECTURA
ECLESIÁSTICO 47,2-13


“DE TODO CORAZÓN AMÓ DAVID A SU CREADOR, ENTONANDO SALMOS CADA DÍA”


Como la grasa es lo mejor del sacrificio, así David es el mejor de Israel. Jugaba con leones como con cabritos, y con osos como con corderillos; siendo un muchacho, mató a un gigante, removiendo la afrenta del pueblo, cuando su mano hizo girar la honda, y derribó el orgullo de Goliat. Invocó al Dios Altísimo, quien hizo fuerte su diestra para eliminar al hombre aguerrido y restaurar el honor de su pueblo. Por eso le cantaban las mozas, alabándolo por sus diez mil. Ya coronado, peleó y derrotó a sus enemigos vecinos, derrotó a los filisteos hostiles, quebrantando su poder hasta hoy.
De todas sus empresas daba gracias, alabando la gloria del Dios Altísimo; de todo corazón amó a su Creador, entonando salmos cada día; trajo instrumentos para servicio del altar y compuso música de acompañamiento; celebró solemnemente fiestas y ordenó el ciclo de las solemnidades; cuando alababa el nombre santo, de madrugada, resonaba el rito. El Señor perdonó su delito y exaltó su poder para siempre; le confirió el poder real y le dio un trono en Jerusalén.
REFLEXIÓN
Después de escuchar durante varios días la historia de los orígenes del reinado en Israel, y particularmente como una crónica de la vida de David, ahora la Iglesia nos ofrece una especie de resumen en forma de himno o de poesía.
Es un cántico que encontramos en el libro Eclesiástico, que hace como un resumen de lo que es y lo que significa David en el pueblo de Dios. Se presenta, de manera sencilla, su falta, su pecado, y se hace sólo para decir que está perdonado. Dice aquí: "El Señor perdonó su delito y exaltó su poder para siempre"
Este texto es como una secuencia de alabanzas a Dios por David, y por eso, así como se cuenta que Dios le dio fortaleza, y se cuenta que Dios le dio inspiración, así también se cuenta que le dio perdón.
El perdón no es aquí un insulto para David, sino una alabanza para Dios; no es para humillar a David, sino para ensalzar a Dios; el perdón no es para recordar un mal pasado de David, sino para proclamar un bien presente, siempre presente de Dios. El perdón que Dios le otorgó se convierte en una luz más, en una belleza más de la vida de David.
Es bien interesante reconocer que David también es recordado por la calidad y alegría de su oración. Mientras que otros hombres grandes son recordados por lo que hicieron para su propia gloria, para acrecentar sus riquezas, fama o territorios, la Biblia alaba a David fundamentalmente porque David supo alabar a Dios. Más que ante un rey, un filósofo, un artista o un pensador, estamos frente a un hombre que quiso amar y que de algún modo supo amar a Dios. Es la primacía de este amor lo que realmente importa aquí, y su expresión propia en la oración de alabanza.


SALMO RESPONSORIAL: 17

R. / Bendito sea mi Dios y Salvador

Perfecto es el camino de Dios,
acendrada es la promesa del Señor;
él es escudo para los que a él se acogen. R.

Viva el Señor, bendita sea mi Roca,
sea ensalzado mi Dios y Salvador.
Por eso te daré gracias entre las naciones, Señor,
y tañeré en honor de tu nombre. R.

Tú diste gran victoria a tu rey,
tuviste misericordia de tu Ungido,
de David y su linaje por siempre. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 6,14-29

“ES JUAN, A QUIEN YO DECAPITÉ, QUE HA RESUCITADO


En aquel tiempo, como la fama de Jesús se había extendido, el rey Herodes oyó hablar de él. Unos decían: "Juan Bautista ha resucitado, y por eso los poderes actúan en él." Otros decían: "Es Elías." Otros: "Es un profeta como los antiguos." Herodes, al oírlo, decía: "Es Juan, a quien yo decapité, que ha resucitado." Es que Herodes había mandado prender a Juan y lo había metido en la cárcel, encadenado. El motivo era que Herodes se había casado con Herodías, mujer de su hermano Filipo, y Juan le decía que no le era lícito tener la mujer de su hermano.
Herodías aborrecía a Juan y quería quitarlo de en medio; no acababa de conseguirlo, porque Herodes respetaba a Juan, sabiendo que era un hombre honrado y santo, y lo defendía. Cuando lo escuchaba, quedaba desconcertado, y lo escuchaba con gusto. La ocasión llegó cuando Herodes, por su cumpleaños, dio un banquete a sus magnates, a sus oficiales y a la gente principal de Galilea. La hija de Herodías entró y danzó, gustando mucho a Herodes y a los convidados. El rey le dijo a la joven: "Pídeme lo que quieras, que te lo doy." Y le juró: "Te daré lo que me pidas, aunque sea la mitad de mi reino." Ella salió a preguntarle a su madre: "¿Qué le pido?" La madre le contestó: "La cabeza de Juan, el Bautista." Entró ella en seguida, a toda prisa, se acercó al rey y le pidió: "Quiero que ahora mismo me des en una bandeja la cabeza de Juan, el Bautista." El rey se puso muy triste; pero, por el juramento y los convidados, no quiso desairarla. En seguida le mandó a un verdugo que trajese la cabeza de Juan. Fue, lo decapitó en la cárcel, trajo la cabeza en una bandeja y se la entregó a la joven; la joven se la entregó a su madre. Al enterarse sus discípulos, fueron a recoger el cadáver y lo enterraron.
REFLEXIÓN
¿Por qué causa o proyecto ‘perdemos la cabeza’? En el lenguaje cotidiano existe la expresión ‘perder la cabeza’, sinónimo de realizar una gran locura o de actuar de una forma poco comprensible. Juan es decapitado en prisión por una locura de su gobernante Herodes, pero el Bautista no llega allí por accidente, sino como consecuencia de su testimonio. Marcos nos narra que Juan es arrestado al comienzo de la misión de Jesús (Mc 1,14) y los otros evangelios nos dicen que su constante denuncia de las perversiones de los gobernantes provoca pronto una fuerte represión contra él. Durante su prisión, Juan no cesa de exhortar al rey a observar el camino que la Ley de Moisés exige al gobernante de Israel. En esto sigue el camino de muchos profetas bíblicos, aunque sin caer nunca en el servilismo, ya que es consciente de que hace el llamado a un hermano de su propio pueblo.
Nosotros ahora debemos preguntarnos, ¿qué nos hace perder la cabeza? ¿Serán las locuras del consumismo, de la violencia, del fanatismo religioso, del sedentarismo? O, atendiendo al llamado de Jesús, ¿estamos dispuestos a ‘perder la cabeza’ por él y su evangelio? (Mc 8,34-38).


ORACIÓN
Padre Dios, a veces la soberbia, el orgullo, la búsqueda del bienestar exagerado y el poder, hacen que pierda la cordura, actué sin compasión y olvide el camino que me lleva a ti. Que hoy yo pueda aprender de estos dos grandes hombres de la liturgia, David y Juan el Bautista, a medir las consecuencias de mis actos, actuando con rectitud y solidaridad ante los demás. Amén

SÁBADO, 4 DE FEBRERO DE 2012

“LA SABIDURÍA PARA GUIAR EL REBAÑO DE DIOS”


PRIMERA LECTURA
1REYES 3,4-13

“DA A TU SIERVO UN CORAZÓN DÓCIL PARA GOBERNAR A TU PUEBLO”


En aquellos días, Salomón fue a Gabaón a ofrecer allí sacrificios, pues allí estaba la ermita principal. En aquel altar ofreció Salomón mil holocaustos. En Gabaón el Señor se apareció en sueños a Salomón y le dijo: "Pídeme lo que quieras." Respondió Salomón: "Tú le hiciste una gran promesa a tu siervo, mi padre David, porque caminó en tu presencia con lealtad, justicia y rectitud de corazón; y le has cumplido esa gran promesa, dándole un hijo que se siente en su trono: es lo que sucede hoy. Pues bien, Señor, Dios mío, tú has hecho que tu siervo suceda a David, mi padre, en el trono, aunque yo soy un muchacho y no sé desenvolverme. Tu siervo se encuentra en medio de tu pueblo, un pueblo inmenso, incontable, innumerable. Da a tu siervo un corazón dócil para gobernar a tu pueblo, para discernir el mal del bien, pues, ¿quién sería capaz de gobernar a este pueblo tan numeroso?"
Al Señor le agradó que Salomón hubiera pedido aquello, y Dios le dijo: "Por haber pedido esto y no haber pedido para ti vida larga ni riquezas ni la vida de tus enemigos, sino que pediste discernimiento para escuchar y gobernar, te cumplo tu petición: te doy un corazón sabio e inteligente, como no lo ha habido antes ni lo habrá después de ti. Y te daré también lo que no has pedido: riquezas y fama, mayores que las de rey alguno."
REFLEXIÓN
Aparece en primer plano el don de la sabiduría, por supuesto, porque Salomón es conocido sobre todo como el sabio por excelencia. Pero ese no es el único don que podemos meditar y agradecer hoy. Ante todo, porque la sabiduría no aparece sin una cierta preparación, que, según vemos esta primera lectura, incluye la oración y la humildad.
La humildad a su vez brota del reconocimiento, es decir, de admitir los bienes recibidos desde fuera y las limitaciones que tenemos por dentro. Las dos cosas hace Salomón. Lo primero cuando dice: " Tú favoreciste mucho a mi padre David..."; lo segundo cuando añade: " yo soy muy joven y no sé cómo gobernar..."
Hay otras dos compañeras que van muy cerca de la humildad: la responsabilidad y la búsqueda de la gloria de Dios. La responsabilidad, como lo sugiere su nombre, indica el deseo consecuente de responder. Salomón observa que David fue "responsable" en ese sentido, pues respondió al favor de Dios caminando " con fidelidad, justicia y rectitud de corazón." El hambre de la gloria de Dios es fundamental también porque es lo que termina orientando nuestros esfuerzos y propósitos, no hacia nosotros mismos, sino como ofrenda de amor al que es la Fuente de la vida y de todo bien.
La sabiduría es un don precioso pero no está solo. La Palabra nos enseña cómo, buscarlo, prepararlo y conservarlo.


SALMO RESPONSORIAL: 118
Enséñame, Señor, tus leyes.

¿Cómo podrá un joven andar honestamente?
Cumpliendo tus palabras. R.

Te busco de todo corazón,
no consientas que me desvíe de tus mandamientos. R.

En mi corazón escondo tus consignas,
así no pecaré contra ti. R.

Bendito eres, Señor,
enséñame tus leyes. R.

Mis labios van enumerando
los mandamientos de tu boca. R.

Mi alegría es el camino de tus preceptos,
más que todas las riquezas. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 6,30-34

“ANDABAN COMO OVEJAS SIN PASTOR”


En aquel tiempo, los apóstoles volvieron a reunirse con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado. Él les dijo: "Venid vosotros solos a un sitio tranquilo a descansar un poco." Porque eran tantos los que iban y venían que no encontraban tiempo ni para comer. Se fueron en barca a un sitio tranquilo y apartado. Muchos los vieron marcharse y los reconocieron; entonces de todas las aldeas fueron corriendo por tierra a aquel sitio y se les adelantaron. Al desembarcar, Jesús vio una multitud y le dio lástima de ellos, porque andaban como ovejas sin pastor; y se puso a enseñarles con calma.


REFLEXIÓN
En la cultura campesina de la época la imagen de las ovejas sin pastor transmite un sentimiento de abandono y desolación. Las ovejas son animales que forman rebaños y dependen del liderazgo del pastor para afrontar las amenazas y para alimentarse. La visión de un pueblo que deambula abandonado de sus líderes institucionales y en busca de un profeta provoca la reacción de Jesús. Pero él no quiere guiar un rebaño de gente despistada; por eso su primera tarea es la enseñanza. Y a eso dedica sus mayores esfuerzos. Jesús quiere un pueblo creativo, responsable y con iniciativa. Es decir, un pueblo en el que todos ejerzan algún tipo de servicio, de acuerdo a sus capacidades. Por eso ha elegido un grupo de evangelizadores a quienes envía por toda la región (Marcos 6,7-13), para preparar su visita. Jesús forma auténticos y responsables pastores salidos de la masa del pueblo y no espera a que le envíen un comisionado de Jerusalén. Nosotros debemos preguntarnos ahora si en nuestra comunidad ejercemos algún tipo de servicio o nos limitamos a esperar que sólo ,“el Pastor”, o líder de nuestra comunidad se ocupe de los asuntos espirituales de nuestra comunidad. Es tiempo de actuar, y ser pastores para otros que lo necesitan.

ORACIÓN
Señor, muy pocas veces me he detenido a mírate para darte el lugar que te corresponde en mi vida. Los atractivos que me ofrece el mundo a veces me hacen olvidar que Tú eres la perla más preciosa que poseo. Inspírame siempre desde el amanecer hasta el anochecer para darte siempre el primer lugar en mi corazón. Am én.

DOMINGO, 5 DE FEBRERO DE 2012

5º domingo de tiempo ordinario


“LOS DEMONIOS DE LA DESESPERACIÓN Y LA DESESPERANZA”


PRIMERA LECTURA
JOB 7,1-4.6-7

“MIS DIAS SE CONSUMEN SIN ESPERANZA”

Habló Job diciendo: "El hombre está en la tierra cumpliendo un servicio, sus días son los de un jornalero. Como el esclavo, suspira por la sombra, como el jornalero, aguarda el salario. Mi herencia son meses baldíos, me asignan noches de fatiga; al acostarme pienso: ¿Cuándo me levantaré? Se alarga la noche y me harto de dar vueltas hasta el alba. Mis días corren más que la lanzadera, y se consumen sin esperanza. Recuerda que mi vida es un soplo, y que mis ojos no verán más la dicha.

REFLEXIÓN
Hoy el libro de Job nos presenta a su protagonista sumido en un gran sufrimiento. Delante de sus amigos desnuda su corazón, su desilusión. Ellos, que defienden una teología alejada de la vida, no pueden comprender la queja de su amigo ni acompañarlo plenamente en su dolor. El grito de Job está presente en la vida diaria de muchos hombres y mujeres en todos los rincones del planeta, que enfrentan una vida de lucha y dificultad. Job compara su existencia con la vida de un «mercenario»; mercenario es quien vende su lucha, que libra por dinero causas que no son suyas y se fatiga por empresas que no ama.

El libro de Job, es una joya literaria dentro de la Biblia hebrea, es una reflexión sapiencial sobre ese problema irresoluble, o mejor, sobre ese misterio eterno que es «el mal». El misterio del mal, su presencia injustificada en el mundo, ante la cual necesitamos justificar a quienes podrían resultar implicados por la existencia del mal. A Dios, en primer lugar, como lo vemos en la teología o disciplina filosófica que trata de mostrar la existencia de Dios y al final trata en realidad de «justificarlo» .

Lo importante del libro de Job no son sus «datos históricos», ni las respuestas de tipo explicativo que quisiera dar sobre el dolor humano, sino la sabiduría que encierra en sus reflexiones. En realidad en el mundo no hemos avanzado mucho sobre aquella sabiduría fundamental y divina adquirida hace ya tres mil años... Esa constatación nos permite escuchar, leer y aprender hoy del libro de Job.

SALMO RESPONSORIAL: 146

R. / Alabad al Señor, que sana los corazones destrozados.

Alabad al Señor, que la música es buena;
nuestro Dios merece una alabanza armoniosa.
El Señor reconstruye Jerusalén,
reúne a los deportados de Israel. R.

Él sana los corazones destrozados,
venda sus heridas.
Cuenta el número de las estrellas,
a cada una la llama por su nombre. R.

Nuestro Señor es grande y poderoso,
su sabiduría no tiene medida.
El Señor sostiene a los humildes,
humilla hasta el polvo a los malvados. R.

SEGUNDA LECTURA
1CORINTIOS 9,16-19.22-23

¡AY DE MÍ SI NO ANUNCIO EL EVANGELIO!

Hermanos: El hecho de predicar no es para mí motivo de orgullo. No tengo más remedio y, ¡ay de mí si no anuncio el Evangelio! Si yo lo hiciera por mi propio gusto, eso mismo sería mi paga. Pero, si lo hago a pesar mío, es que me han encargado este oficio. Entonces, ¿cuál es la paga? Precisamente dar a conocer el Evangelio, anunciándolo de balde, sin usar el derecho que me da la predicación del Evangelio. Porque, siendo libre como soy, me he hecho esclavo de todos para ganar a los más posibles. Me he hecho débil con los débiles, para ganar a los débiles, me he hecho todo a todos, para ganar, sea como sea, a algunos. Y hago todo esto por el Evangelio, para participar yo también de sus bienes.

REFLEXIÓN
Pablo, de manera parecida a Job, se encuentra en una discusión acalorada con sus interlocutores, en la comunidad de Corinto, en la que grupos fracciones que critican y cuestionan su autoridad.. Pablo responde haciendo una defensa radical de su misión y declara su absoluta libertad frente a toda manipulación o poder humano. No se declara miembro de un movimiento o representante de alguna institución, sino como un hombre “obligado a cumplir una tarea”. En el imperio Romano era común la práctica del clientelismo, en la cual el benefactor se convertía en patrón de quien recibía sus beneficios. El apóstol desea dejar en claro la pureza de su mensaje, que no está vendido a ningún “cliente”, ni moldeado por ningún interés personal (v. 17-18). Esta libertad en Cristo, le permite al apóstol ser un servidor de los demás. No teme amoldarse a las condiciones de vida de los destinatarios de su mensaje: judíos, seguidores de la ley o rebeldes a ella, débiles. Pablo anuncia así el Evangelio de la libertad que no se matricula con la rigidez, ni hace el juego a ningún interés particular o sectario, sino que es capaz de entrar en diálogo con la diferencia y de llegar a “todas” las realidades humanas, como una Buena Noticia del amor de Dios.


LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 1,29-39

“CURÓ A MUCHOS ENFERMOS DE DIVERSOS MALES”

En aquel tiempo, al salir Jesús y sus discípulos de la sinagoga, fue con Santiago y Juan a casa de Simón y Andrés. La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, y se lo dijeron. Jesús se acercó, la cogió de la mano y la levantó. Se le pasó la fiebre y se puso a servirles. Al anochecer, cuando se puso el sol, le llevaron todos los enfermos y endemoniados. La población entera se agolpaba a la puerta. Curó a muchos enfermos de diversos males y expulsó muchos demonios; y como los demonios lo conocían, no les permitía hablar.

Se levantó de madrugada, se marchó al descampado y allí se puso a orar. Simón y sus compañeros fueron y, al encontrarlo, le dijeron. "Todo el mundo te busca." Él les respondió: "Vámonos a otra parte, a las aldeas cercanas, para predicar también allí; que para eso he salido." Así recorrió toda Galilea, predicando en las sinagogas y expulsando los demonios.

REFLEXIÓN
Esto es precisamente lo que hace Jesús en el evangelio de Marcos: entrar en la vida de las personas, ser uno de ellos en su cotidianidad. El domingo pasado, lo vimos sanando a un endemoniado. Hoy, lo acompañamos con Simón y Andrés a la casa de Pedro. La casa, el lugar íntimo donde se comparte el techo, la mesa. Allí se encuentra con una anciana enferma, la suegra de Pedro, Jesús se acerca, la toma de la mano y la levanta. Un gesto tan simple como es el acercarse, y tomar de la mano hace el milagro de recuperar a esta mujer, que no sólo recupera su salud, sino su capacidad de servicio. Al atardecer muchos vinieron a buscarlos, y relata el evangelista que Jesús continuó sanando. Era común en la época de Jesús que los enfermos fueran tenidos por malditos o poseídos por espíritus malos, de manera que eran alejados, excluidos y nadie se atrevía a acercarse a ellos. Jesús, al contrario, se entrega con amor y dedicación a su cuidado, siendo su servidor.

La práctica de curación, la lucha contra el mal, es decir de la liberación del ser humano... es la práctica habitual de Jesús. Tan importante como hacer el bien, es evitar el mal, y luchar contra él: dar la vida en la tarea de procurar la paz, la salud, el bienestar, la felicidad... a todos aquellos que la han perdido. Ser cristiano es, entre otras muchas cosas, luchar contra el mal, no quedarse de brazos cruzados o ensimismado en los propios asuntos, cuando vivimos en un mundo con cifras escalofriantes de pobreza y miseria.

ORACIÓN
Que maravilloso, Señor Jesús, es descubrirte actuando en sinagogas, casas, lugares públicos y sitios de descanso. Tu vida esta entregada de lleno al Evangelio. Con ella nos enseñas a ser testigos del Reino en todos los lugares y en todas nuestras actividades. Libéranos hoy de los demonios de la desesperación y la desesperanza que a veces nos acompañan. Te ofrecemos y te consagramostodo lo que hagamos y vivamos en este día y nueva semana que hoy iniciamos. Todo para ti y en la fuerza de tu Espíritu al servicio de nuestros hermanos, porque somos discípulos misioneros de tu proyecto de vida. Amén

Lunes, 06 de febrero de 2012

“NUEVA ARCA DE LA ALIANZA”
PRIMERA LECTURA
1 REYES 8,1-7.9-13

“LLEVARON EL ARCA DE LA ALIANZA AL SANTÍSIMO, Y L A NUBE LLENÓ EL TEMPLO”

En aquellos días, Salomón convocó a palacio, en Jerusalén, a los ancianos de Israel, a los jefes de tribu y a los cabezas de familia de los israelitas, para trasladar el arca de la alianza del Señor desde la ciudad de David, o sea Sión. Todos los israelitas se congregaron en torno al rey Salomón, en el mes de Etanín (el mes séptimo), en la fiesta de las Tiendas. Cuando llegaron todos los ancianos de Israel, los sacerdotes cargaron con el arca del Señor, y los sacerdotes levitas llevaron la tienda del encuentro, más los utensilios del culto que había en la tienda. El rey Salomón, acompañado de toda la asamblea de Israel reunida con él ante el arca, sacrificaba una cantidad incalculable de ovejas y bueyes.

Los sacerdotes llevaron el arca de la alianza del Señor a su sitio, al camarín del templo, al Santísimo, bajo las alas de los querubines, pues los querubines extendían las alas sobre el sitio del arca y cubrían el arca y los varales por encima. En el arca sólo había las dos tablas de piedra que colocó allí Moisés en el Horeb, cuando el Señor pactó con los israelitas, al salir de Egipto. Cuando los sacerdotes salieron del Santo, la nube llenó el templo, de forma que los sacerdotes no podían seguir oficiando, a causa de la nube, porque la gloria del Señor llenaba el templo. Entonces Salomón dijo: "El Señor puso el sol en el cielo, el Señor quiere habitar en la tiniebla; y yo te he construido un palacio, un sitio donde vivas para siempre."

REFLEXIÓN
La lectura nos transporta a un momento culminante de todo el Antiguo Testamento: la dedicación del templo. El texto de hoy nos presenta los hechos que se dieron y el de mañana nos contará algo de las palabras que se dijeron, en particular, la hermosa oración del rey Salomón.Destaca la grandiosidad del momento: ningún gasto parece suficiente; todo el pueblo se hace presente; las autoridades y jefes, los sacerdotes y cabezas de familia: todos se unen en una voz y un corazón para adorar a Dios. Lo interesante es que en el centro de todo eso están el rey y el sacrificio. Y ahí tenemos la imagen del cielo: todo poder, todo el pueblo, toda la gloria, y en el centro el rey y el sacrifico, sólo que esta vez son uno y el mismo: Jesucristo

SALMO RESPONSORIAL: 131

R. / Levántate, Señor, ven a tu mansión.

Oímos que estaba en Efrata,
la encontramos en el Soto de Jaar:
entremos en su morada,
postrémonos ante el estrado de sus pies. R.

Levántate, Señor, ven a tu mansión,
ven con el arca de tu poder:
que tus sacerdotes se vistan de gala,
que tus fieles vitoreen. / Por amor a tu siervo David,
no niegues audiencia a tu Ungido. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 6, 53-56

“LOS QUE LO TOCABAN SE PONÍAN SANOS”

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos, terminada la travesía, tocaron tierra en Genesaret, y atracaron. Apenas desembarcados, algunos lo reconocieron, y se pusieron a recorrer toda la comarca; cuando se enteraba la gente dónde estaba Jesús, le llevaban los enfermos en camillas. En la aldea o pueblo o caserío donde llegaba, colocaban a los enfermos en la plaza y le rogaban que les dejase tocar al menos el borde de su manto; y los que lo tocaban se ponían sanos.

REFLEXIÓN
La presencia de Jesús tiene el poder no sólo de cambiar la mente; puede también sanar el cuerpo. Su palabra no es sólo de doctrina o de exposición de teorías, sino de salvación. Pero Jesús no se limita a la predicación o a la enseñanza. Su acción incluye el contacto con las personas, en particular con los enfermos. En la sociedad de su época se limitaba el contacto entre sanos y enfermos, principalmente por motivos religiosos, y no sólo por razones de salud o higiene. La acción de Jesús no sólo busca un cambio de actitud ante el enfermo, sino que busca una transformación del ser humano; tanto de los enfermos como de quienes los atienden. Jesús intenta que la solidaridad sea la actitud habitual de relación entre la gente, y no sólo los escrúpulos religiosos o los prejuicios sociales. El amor universal por todo el género humano es para Jesús una forma de ser, y no sólo una doctrina. Las transformaciones que Jesús propone comienzan por lo más básico del ser humano: la salud física, mental y espiritual. Encontrar a Jesús supone aprender a sanar todas las heridas, hasta las mas profundas, causadas por la sociedad, la familia e incluso la misma religión.

ORACIÓN
Bendito seas buen Señor, al comienzo de este nuevo día. Lleno de confianza hoy te busco y me acerco a ti, seguro de que no quedaré defraudado. Sé que al venir a ti no regresaré con el
corazón y las manos vacías, porque tu amor será todo en mí en este nuevo día. Que grande eres Señor, cuan fiel y segura tu providencia. Amén

Martes, 07 de febrero de 2012

“DIOS SUPERA TODAS NUESTRAS LIMITACIONES”
PRIMERA LECTURA
1REYES 8,22-23.27-30

“SOBRE ESTE TEMPLO QUISISTE QUE RESIDIERA TU NOMBRE. ESCUCHA LA SÚPLICA DE TU PUEBLO, ISRAEL.”

En aquellos días, Salomón, en pie ante el altar del Señor, en presencia de toda la asamblea de Israel, extendió las manos al cielo y dijo: "¡Señor, Dios de Israel! Ni arriba en el cielo ni abajo en la tierra hay un Dios como tú, fiel a la alianza con tus vasallos, si caminan de todo corazón en tu presencia. Aunque ¿es posible que Dios habite en la tierra? Si no cabes en el cielo y en lo más alto del cielo, ¡cuánto menos en este templo que he construido! Vuelve tu rostro a la oración y súplica de tu siervo, Señor, Dios mío, escucha el clamor y la oración que te dirige hoy tu siervo. Día y noche estén tus ojos abiertos sobre este templo, sobre el sitio donde quisiste que residiera tu nombre. ¡Escucha la oración que tu siervo te dirige en este sitio! Escucha la súplica de tu siervo y de tu pueblo, Israel, cuando recen en este sitio; escucha tú, desde tu morada del cielo, y perdona."

REFLEXIÓN
Salomón ora en el templo, el grandioso templo que será durante siglos el corazón de la vida de la fe del pueblo de Dios. Sus palabras destacan la grandeza de Dios que hace ver pequeño al templo mismo; y piden compasión y perdón. Hay pues, un juego maravilloso de contrastes entre lo grande del momento y de la construcción, y lo pequeñas que son nuestras vidas y nuestras obras frente a la santidad y la inmensidad del Señor.

Hay varios modos de aprovechar para nuestra vida las enseñanzas la lectura de hoy. Ante todo, es bello que Salomón es tan humilde cuando era más grande a los ojos de su pueblo. Otro aspecto interesante es aquello de no idolatrar las obras de nuestras manos. Lo más sano es ver todo lo que hacemos como Salomón vio su templo. Él sabía que no iba a hacer nada más grande en su vida y sin embargo comprendió que el Dios que rebasa los cielos sobrepasa también el breve espacio de unos ladrillos.

SALMO RESPONSORIAL: 83
R. / ¡Qué deseables son tus moradas, Señor de los ejércitos!
Mi alma se consume y anhela
los atrios del Señor,
mi corazón y mi carne
retozan por el Dios vivo. R.

Hasta el gorrión ha encontrado una casa;
la golondrina, un nido / donde colocar sus polluelos:
tus altares, Señor de los ejércitos,
Rey mío y Dios mío. R.

Dichosos los que viven en tu casa,
alabándote siempre. / Fíjate, oh Dios, en nuestro Escudo,
mira el rostro de tu Ungido. R.

Vale más un día en tus atrios
que mil en mi casa, y prefiero el umbral de la casa de Dios
a vivir con los malvados.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 7,1-13

DEJAIS A UN LADO EL MANDAMIENTO DE DIOS PARA AFERRAROS A LA TRADICIÓN DE LOS HOMBRES”

En aquel tiempo, se acercó a Jesús un grupo de fariseos con algunos escribas de Jerusalén, y vieron que algunos discípulos comían con las manos impuras, es decir, sin lavarse las manos. (Los fariseos, como los demás judíos, no comen sin lavarse antes las manos, restregando bien, aferrándose a la tradición de sus mayores, y, al volver de la plaza, no comen sin lavarse antes, y se aferran a otras muchas tradiciones, de lavar vasos, jarras y ollas.)

Según eso, los fariseos y los escribas preguntaron a Jesús: "¿Por qué comen tus discípulos con manos impuras y no siguen la tradición de los mayores?" Él les contestó: "Bien profetizó Isaías de vosotros, hipócritas, como está escrito: "Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. El culto que me dan está vacío, porque la doctrina que enseñan son preceptos humanos." Dejáis a un lado el mandamiento de Dios para aferraros a la tradición de los hombres."

Y añadió: "Anuláis el mandamiento de Dios por mantener vuestra tradición. Moisés dijo: "Honra a tu padre y a tu madre" y "el que maldiga a su padre o a su madre tiene pena de muerte"; en cambio, vosotros decís: Si uno le dice a su padre o a su madre: "Los bienes con que podría ayudarte los ofrezco al templo", ya no le permitís hacer nada por su padre o por su madre, invalidando la palabra de Dios con esa tradición que os trasmitís; y como éstas hacéis muchas."

REFLEXIÓN
Es muy fácil confundir los medios con los fines, sobre todo en las prácticas religiosas. Cuanto más exigente y confortante sea una práctica religiosa, tanto más las personas creyentes las consideran fijas. Pero el cristiano debe siempre discernir si su práctica es un medio o un fin. El evangelio nos propone hoy una reflexión sobre unas prácticas religiosas judías que ayudaban a sus practicantes a fortalecer la conciencia que debían tener de sus diferencias con los demás. Las prácticas de purificación, dentro de las que se contaban los baños rituales, son un medio eficaz para que los creyentes estuvieran siempre preparados para participar en el culto y para la piedad diaria. Sin embargo, estas prácticas tan estrictas con frecuencia provocaban que los creyentes las convirtieran en un medio para creerse superiores a los demás y para excluir o marginar a quienes no podían cumplirlas o tenían otras creencias. Esta tentación no sólo era un problema en ‘otras’ religiones, sino que era una amenaza frecuente en el judaísmo y hasta en el propio cristianismo. La enseñanza de Jesús es muy clara: las prácticas religiosas sólo son un medio para discernir la voluntad de Dios. Lo fundamental es el amor y la justicia.
ORACIÓN

Señor Jesús, hazme en este día como tú, enséñame a vivir conforme a tu voluntad. Sumérgeme en ti, purifi ca mi corazón, que mi alma encuentre la gracia de tu santidad. Hazme puro y humilde de corazón para que mis manos puedan elevarse a ti en perfecta adoración. Amén

MIÉRCOLES, 08 de FEBRERO DE 2012

“EL HOMBRE JUSTO ES UN HOMBRE SABIO”


PRIMERA LECTURA
1REYES 10,1-10

“LA REINA DE SABA VIÓ LA SABIDURÌA DE SALOMÓN”

En aquellos días, la reina de Sabá oyó la fama de Salomón y fue a desafiarle con enigmas. Llegó a Jerusalén con una gran caravana de camellos cargados de perfumes y oro en gran cantidad y piedras preciosas. Entró en el palacio de Salomón y le propuso todo lo que pensaba. Salomón resolvió todas sus consultas; no hubo una cuestión tan oscura que el rey no pudiera resolver.

Cuando la reina de Sabá vio la sabiduría de Salomón, la casa que había construido, los manjares de su mesa, toda la corte sentada a la mesa, los camareros con sus uniformes sirviendo, las bebidas, los holocaustos que ofrecía en el templo del Señor, se quedó asombrada y dijo al rey: "¡Es verdad lo que me contaron en mi país de ti y tu sabiduría! Yo no quería creerlo; pero ahora que he venido y lo veo con mis propios ojos, resulta que no me habían dicho ni la mitad. En sabiduría y riquezas superas todo lo que yo había oído. ¡Dichosa tu gente, dichosos los cortesanos que están siempre en tu presencia, aprendiendo de tu sabiduría! ¡Bendito sea el Señor, tu Dios, que, por el amor eterno que tiene a Israel, te ha elegido para colocarte en el trono de Israel y te ha nombrado rey para que gobiernes con justicia!"

La reina regaló al rey cuatro mil quilos de oro, gran cantidad de perfumes y piedras preciosas; nunca llegaron tantos perfumes como los que la reina de Sabá regaló al rey Salomón.

REFLEXIÓN
Esta lectura podría pasar por simple anécdota del reinado de Salomón. Uno se pregunta qué se puede aprender de la visita de la reina de Sabá. Tal vez más de lo que se piensa en un principio.
El esplendor de Salomón en su reinado es una imagen de lo que todos hemos querido ver alguna vez: un gobernante que une el poder con la sabiduría, y la justicia con la vida de piedad. Un hombre que sabe orar y pensar; que es prudente y a la vez resuelto; que vive bien y que hace posible y amable la vida de su pueblo. ¿No es eso lo que anhela nuestro corazón? La sensación es: el Reino de Dios ha llegado a la tierra.
Y sin embargo, de ese esplendor veremos derrumbarse a Salomón y a su reino. Y ello también tendrá que enseñarnos algo. Salomón se enamoró de esa gloria y de esa sensación de haber logrado la paz con todos. Para conservar esa paz política se llenó de esposas traídas de todas partes, pues en esas culturas las únicas alianzas con probabilidades de durar son las de parentesco. Salomón ya no conservó a Dios en el primer lugar de su alma y que a la pérdida de su amor por Dios, le siguió la pérdida de la unidad política. En último término se dividió el reino y Salomón fue víctima de su propio éxito, un éxito demasiado de este mundo.


SALMO RESPONSORIAL: 36
R. / La boca del justo expone la sabiduría.

Encomienda tu camino al Señor,
confía en él, y él actuará:
hará tu justicia como el amanecer,
tu derecho como el mediodía. R.

La boca del justo expone la sabiduría,
su lengua explica el derecho;
porque lleva en el corazón la ley de su Dios,
y sus pasos no vacilan. R.

El Señor es quien salva a los justos,
él es su alcázar en el peligro;
el Señor los protege y los libra,
los libra de los malvados y los salva
porque se acogen a él. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 7,14-23

“LO QUE SALE DE DENTRO ES LO QUE HACE IMPURO EL HOMBRE”

En aquel tiempo, llamó Jesús de nuevo a la gente y les dijo: "Escuchad y entended todos: Nada que entre de fuera puede hacer al hombre impuro; lo que sale de dentro es lo que hace impuro al hombre. El que tenga oídos para oír, que oiga."

Cuando dejó a la gente y entró en casa, le pidieron sus discípulos que les explicara la parábola. El les dijo: "¿Tan torpes sois también vosotros? ¿No comprendéis? Nada que entre de fuera puede hacer impuro al hombre, porque no entra en el corazón, sino en el vientre, y se echa en la letrina." Con esto declaraba puros todos los alimentos. Y siguió: "Lo que sale de dentro, eso sí mancha al hombre. Porque de dentro, del corazón del hombre, salen los malos propósitos, las fornicaciones, robos, homicidios, adulterios, codicias, injusticias, fraudes, desenfreno, envidia, difamación, orgullo, frivolidad. Todas esas maldades salen de dentro y hacen al hombre impuro."

REFLEXIÓN
Muchas personas buscan la salvación a través de las dietas, las modas o los objetos. Así piensan que los demás, o incluso Dios, los van a querer más. Jesús nos pone en guardia contra esa creencia tan arraigada como superficial. Si bien una buena dieta, un vestuario adecuado o tal vez un electrodoméstico pueden facilitar o hacer más feliz nuestra existencia, no se puede ceder a la tentación de creer que esas cosas son la ‘causa’ primera o fundamental de nuestra felicidad y salvación. Las demás personas no nos van a amar más por lo que tenemos, sabemos o creemos, sino por lo que somos. Dios nos ama independientemente de nuestros gustos alimentarios, de nuestra vestimenta o de nuestras creencias. Pero ese mismo amor nos exige que hagamos de nuestra vida una oportunidad de gracia y salvación. Es decir, que nuestras acciones más importantes no estén relacionadas con nuestras dietas o con el número de plegarias que recordamos de memoria. Lo más importante es nuestra capacidad de amar, sin dejar que los gustos, las creencias o las ideologías sean obstáculo para alcanzar la plena comunión con nuestros semejantes. Debemos preguntarnos, entonces: ¿amamos como Dios ama o como nuestras costumbres nos lo permiten?

ORACIÓN
Padre amado, la sociedad en la que vivimos nos leva continuamente a ver al ser humano como un objeto de producción, construyendo en nosotros erradas escalas de valores. Ayúdanos, señor, purifica nuestras intenciones, para que todo lo que emane de nuestro interior sea bueno. Haznos justos y sabios. Amén

JUEVES, 09 DE FEBRERO DE 2012

"ANUNCIAR LA PALABRA DE DIOS”

PRIMERA LECTURA
1REYES 11,4-13

“POR HABER SIDO INFIEL AL PACTO, TE VOY A ARRANCAR EL REINO DE LAS MANOS; PERO DEJARÉ A TU HIJO UNA TRIBU, EN CONSIDERACIÓN A DAVID.”

Cuando el rey Salomón llegó a viejo, sus mujeres desviaron su corazón tras dioses extranjeros; su corazón ya no perteneció por entero al Señor como el corazón de David, su padre. Salomón siguió a Astarté, diosa de los fenicios, y a Malcón, ídolo de los amonitas. Hizo lo que el Señor reprueba; no siguió plenamente al Señor como su padre David. Entonces construyó una ermita a Camós, ídolo de Moab, en el monte que se alza frente a Jerusalén, y a Malcón, ídolo de los amonitas. Hizo otro tanto para sus mujeres extranjeras, que quemaban incienso y sacrificaban en honor de sus dioses.

El Señor se encolerizó contra Salomón, porque había desviado su corazón del Señor Dios de Israel, que se le había aparecido dos veces, y que precisamente le había prohibido seguir a dioses extranjeros; pero Salomón no cumplió esta orden. Entonces el Señor le dijo: "Por haberte portado así conmigo, siendo infiel al pacto y a los mandatos que te di, te voy a arrancar el reino de las manos para dárselo a un siervo tuyo. No lo haré mientras vivas, en consideración a tu padre David; se lo arrancaré de la mano a tu hijo. Y ni siquiera le arrancaré todo el reino; dejaré a tu hijo una tribu, en consideración a mi siervo David y a Jerusalén, mi ciudad elegida."

REFLEXIÓN
Ayer oíamos del sublime esplendor del reinado de Salomón. ¡Lo vimos tan alto y encumbrado! De esa altura le vemos caer hoy aparatosamente. "Así pasa la gloria del mundo," como dice el adagio, y es el hecho que a veces subir tan alto sólo sirve para golpearse más en la caída.
Salomón descuidó su relación con Dios, demasiado ocupado de las relaciones internacionales para acrecentar el futuro político de su pueblo, y demasiado entretenido en las relaciones con mujeres, fuera por la misma política o para sentir que era grande sobre toda medida. El efecto fue desastroso: la idolatría acampó en el pueblo de Dios. Y una vez perdida la referencia a Dios lo que queda a la vista, o sea: poder, dinero y placer, se adueña de los corazones. Poseídos por tales codicias ya no pueden sino dividirse y luchar unos contra otros. Así acabó el esplendor de uno de los reyes más famosos del mundo.


SALMO RESPONSORIAL: 105
R. / Acuérdate de mí, Señor, por amor a tu pueblo.

Dichosos los que respetan el derecho
y practican siempre la justicia.
Acuérdate de mí por amor a tu pueblo,
visítame con tu salvación. R.

Emparentaron con los gentiles,
imitaron sus costumbres;
adoraron sus ídolos
y cayeron en sus lazos. R.

Inmolaron a los demonios
sus hijos y sus hijas.
La ira del Señor se encendió contra su pueblo,
y aborreció su heredad. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 7,24-30

“LOS PERROS DEBAJO DE LA MESA, COMEN LAS MIGAJAS QUE TIRAN LOS NIÑOS”

En aquel tiempo, Jesús fue a la región de Tiro. Se alojó en una casa, procurando pasar desapercibido, pero no lo consiguió; una mujer que tenía una hija poseída por un espíritu impuro se enteró en seguida, fue a buscarlo y se le echó a los pies. La mujer era griega, una fenicia de Siria, y le rogaba que echase el demonio de su hija. Él le dijo: "Deja que coman primero los hijos. No está bien echarles a los perros el pan de los hijos." Pero ella replicó: "Tienes razón, Señor; pero también los perros, debajo de la mesa, comen las migajas que tiran los niños." Él le contestó: "Anda, vete, que, por eso que has dicho, el demonio ha salido de tu hija." Al llegar a su casa, se encontró a la niña echada en la cama; el demonio se había marchado.

REFLEXIÓN
El evangelista nos recuerda hoy un dicho muy usado en la sabiduría popular de la época, referido a las prioridades familiares: “no se le quita el pan a los pequeños para dárselo a las mascotas”. Es decir, primero están las urgencias de los más necesitados en la familia, y luego lo demás. A esta sabiduría, la mujer confrontada por Jesús opone otra sabiduría en la que el pan alcanza para todos, sin cambiar las prioridades originales. Es la sabiduría de los pobres que saben repartir lo que tienen aún en medio de las necesidades. Aunque la misión original de Jesús tenía como prioridad los pobres, marginados y pequeños de Israel, sin embargo, Jesús mismo trascendió las fronteras geográficas y religiosas y alcanzó a los extranjeros, en particular a los de lengua aramea, en los alrededores de Galilea. La solicitud de la mujer pagana simboliza el encuentro de Jesús con otras culturas. Si bien los seguidores de Jesús consideran que la prioridad son ‘las ovejas perdidas de Israel’, la sabiduría de los paganos les ayuda a romper esa estrechez mental y a abrirse a la solidaridad con otros pueblos para intercambiar puntos de vista distantes en su origen, pero convergentes en su finalidad.

ORACIÓN
Señor Jesús, Ayúdame a responder a tu llamado. Que no pasen los días de mi vida aplazando mi encuentro o comunión contigo. Que pueda hoy acercarme más a ti, confiado en que es posible, también para mí y los míos la salvación. Déjame habitar en tu presencia ahora y por toda la eternidad. Amén

VIERNES, 10 DE FEBRERO DE 2012

“¡EFFETA!”


PRIMERA LECTURA
1REYES 11,29-32.12,19


“SE INDEPENDIZÓ ISRAEL DE LA CASA DE DAVID”

Un día, salió Jeroboán de Jerusalén, y el profeta Ajías, de Siló, envuelto en un manto nuevo, se lo encontró en el camino; estaban los dos solos, en descampado. Ajías agarró su manto nuevo, lo rasgó en doce trozos y dijo a Jeroboán: "Coge diez trozos, porque así dice el Señor, Dios de Israel: "Voy a arrancarle el reino a Salomón y voy a darte a ti diez tribus; lo restante será para él, en consideración a mi siervo David y a Jerusalén, la ciudad que elegí entre todas las tribus de Israel.""
Así fue como se independizó Israel de la casa de David hasta hoy.

REFLEXIÓN
La lectura de hoy es en realidad el epílogo amargo de una historia que parecía merecer otro final. Después de la calidad de amor y oración que hemos visto brotar del corazón de David; después de la magnificencia del reinado de Salomón lo único que nos encontramos hoy es una escena desabrida y la música destemplada del cisma. Jeroboam viene a ser un oportunista aquí, y su oportunidad ha llegado para alzarse con el trono del que será el Reino del Norte.

Para ser justos hay que reconocer que Jeroboam no fue el que creó esa división entre las diez tribus del Norte y las dos del Sur. Más bien los historiadores tienden a decir hoy que incluso antes de llegar a Egipto, los antiguos hebreos, lo que la Biblia presenta como la familia de Jacob, ya tenía esa tensión, de modo que el desierto y la lucha contra los enemigos comunes, los filisteos, en realidad vinieron a servir como de frenos a las divisiones internas. Paradójicamente, una vez consolidada una nación, cuando ya la amenaza exterior disminuía su importancia, resurgió el recelo y los del Norte buscaron pretextos para su añorada independencia.

No hay que negar lo razonable de estas hipótesis de historiadores pero la enseñanza fundamental no viene de esa clase de datos, a pesar de lo interesantes que son. De todo esto podemos aprender que las codicias, y en general los pecados, nunca mueren mientras estemos en esta vida y que todos nuestros actos siempre tendrán consecuencias.

SALMO RESPONSORIAL: 80
R. / Yo soy el Señor, Dios tuyo: escucha mi voz.

No tendrás un dios extraño,
no adorarás un dios extranjero;
yo soy el Señor, Dios tuyo,
que te saqué del país de Egipto. R.

Pero mi pueblo no escuchó mi voz,
Israel no quiso obedecer:
los entregué a su corazón obstinado,
para que anduviesen según sus antojos. R.

¡Ojalá me escuchase mi pueblo
y caminase Israel por mi camino!:
en un momento humillaría a sus enemigos
y volvería mi mano contra sus adversarios. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 7,31-37

“HACE OÍR A LOS SORDOS Y HABLAR A LOS MUDOS”

En aquel tiempo, dejando Jesús el territorio de Tiro, pasó por Sidón, camino del lago de Galilea, atravesando la Decápolis. Y le presentaron un sordo que, además, apenas podía hablar; y le piden que le imponga las manos. Él, apartándolo de la gente a un lado, le metió los dedos en los oídos y con la saliva le tocó la lengua. Y, mirando al cielo, suspiró y le dijo: "Effetá", esto es: "Ábrete". Y al momento se le abrieron los oídos, se le soltó la traba de la lengua y hablaba sin dificultad. Él les mandó que no lo dijeran a nadie; pero, cuanto más se lo mandaba, con más insistencia lo proclamaban ellos. Y en el colmo del asombro decían: "Todo lo ha hecho bien; hace oír a los sordos y hablar a los mudos."

REFLEXIÓN
La persona sorda se aísla, se convierte en una isla y pierde capacidad de contacto con los demás, porque termina confinada en su propio mundo. La propuesta de Jesús es tomar el camino contrario, es decir, romper el aislamiento y abrirse a los demás, aun en medio de las limitaciones. La palabra aramea “éffatá” representa esa experiencia de apertura y de escucha del otro por medios que trascienden la audición física. Hoy podemos releer esa experiencia del evangelio al reconocer que el estruendoso ritmo de la sociedad de consumo no nos deja tiempo para nosotros mismos, para la espiritualidad y para Dios. Ya no escuchamos ni nuestra propia voz. Necesitamos la mano de Jesús que sintonice nuestros oídos con la onda de la sabiduría del evangelio y desate nuestra lengua para proclamar su mensaje en medio del ruido cotidiano. Tenemos que dejar que Jesús nos destape los oídos para escuchar la voz de Dios allí donde antes sólo habitaban las voces del consumo y del egoísmo. Nuestra lengua puede dejar de repetir los clichés publicitarios para comenzar a comunicar una voz de consuelo, esperanza y reconciliación. Bajémosle el volumen al televisor y subámosle el volumen a la vida, y sobre todo a la Palabra de Dios.

ORACIÓN
Padre bueno, ten hoy compasión de mí. Abre mis oídos para que pueda escucharte y entenderte. Que el ruido de este mundo egoísta no me aturda, ni distorsione tu vos en mí. Desata mi lengua para que pueda contar al mundo tus maravillas, todo lo que haz hecho en mí. Amén

SÁBADO, 11 DE FEBRERO DE 2012

“LA IDOLATRÍA NOS ALEJA DE DIOS”


PRIMERA LECTURA
1REYES 12,26-32;13,33-34

“JEROBOÁN HIZO DOS BECERROS DE ORO”

En aquellos días, Jeroboán pensó para sus adentros: "Todavía puede volver el reino a la casa de David. Si la gente sigue yendo a Jerusalén para hacer sacrificios en el templo del Señor, terminarán poniéndose de parte de su señor, Roboán, rey de Judá; me matarán y volverán a unirse a Roboán, rey de Judá." Después de aconsejarse, el rey hizo dos becerros de oro y dijo a la gente: "¡Ya está bien de subir a Jerusalén! ¡Éste es tu Dios, Israel, el que te sacó de Egipto!"

Luego colocó un becerro en Betel y el otro en Dan. Esto incitó a pecar a Israel, porque unos iban a Betel y otros a Dan. También edificó ermitas en los altozanos; puso de sacerdotes a gente de la plebe, que no pertenecía a la tribu de Leví. Instituyó también una fiesta el día quince del mes octavo, como la fiesta que se celebraba en Judá, y subió al altar que había levantado en Betel, a ofrecer sacrificios al becerro que había hecho. En Betel estableció a los sacerdotes de las ermitas que había construido.

Jeroboán no se convirtió de su mala conducta y volvió a nombrar sacerdotes de los altozanos a gente de la plebe; al que lo deseaba lo consagraba sacerdote de los altozanos. Este proceder llevó al pecado a la dinastía de Jeroboán y motivó su destrucción y exterminio de la tierra.

REFLEXIÓN
Finalmente Jeroboam ha logrado su meta, ya es rey en Israel, y para asegurar estabilidad política quiere evitar que su gente dependa religiosamente del templo de Jerusalén, que es del Reino del Sur. Su solución es implantar la idolatría. Armado de becerros de oro se siente fuerte pero no se da cuenta que está regalándole una sonrisa al demonio y a su paciencia, que lo llevara a su destrucción.
Miremo como también hoy hay muchos ídolos, también hoy hay muchos becerros de oro. Detrás de ellos corre la gente y se olvida del Dios verdadero. Consideran a Dios como alguien o un asunto que no tiene mayor trascendencia. No se dan cuenta de que al pensar así, le están haciendo el juego a Jeroboam, el juego a los que quieren que nos olvidemos del Dios vivo y de su Alianza. Pidamos al Señor que nuestra conciencia esté siempre despierta, que otros caminos y otros ídolos no nos distraigan y que en Él esté siempre nuestra alegría, incluso si esto significa ser descalificados o tal vez ser perseguidos.


SALMO RESPONSORIAL:105
R. / Acuérdate de mí, Señor, por amor a tu pueblo.

Hemos pecado con nuestros padres,
hemos cometido maldades e iniquidades.
Nuestros padres en Egipto
no comprendieron tus maravillas. R.

En Horeb se hicieron un becerro,
adoraron un ídolo de fundición;
cambiaron su gloria por la imagen
de un toro que come hierba. R.

Se olvidaron de Dios, su salvador,
que había hecho prodigios en Egipto,
maravillas en el país de Cam,
portentos junto al mar Rojo. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 8,1-10

“LA GENTE COMIÓ HASTA QUEDAR SATISFECHA”

Uno de aquellos días, como había mucha gente y no tenían qué comer, Jesús llamó a sus discípulos y les dijo: "Me da lástima de esta gente; llevan ya tres días conmigo y no tienen qué comer, y, si los despido a sus casas en ayunas, se van a desmayar por el camino. Además, algunos han venido desde lejos." Le replicaron sus discípulos: "¿Y de dónde se puede sacar pan, aquí, en despoblado, para que se queden satisfechos?" Él les preguntó: "¿Cuántos panes tenéis?" Ellos contestaron: "Siete." Mandó que la gente se sentara en el suelo, tomó los siete panes, pronunció la acción de gracias, los partió y los fue dando a sus discípulos para que los sirvieran. Ellos los sirvieron a la gente. Tenían también unos cuantos peces; Jesús los bendijo, y mandó que los sirvieran también. La gente comió hasta quedar satisfecha, y de los trozos que sobraron llenaron siete canastas; eran unos cuatro mil. Jesús los despidió, luego se embarcó con sus discípulos y se fue a la región de Dalmanuta.

REFLEXIÓN
El principal milagro que realiza Jesús es hacer entender a sus discípulos que únicamente repartiendo lo que tienen pueden alimentar a la multitud que marcha tras él. La pista para entender esto nos la da la reacción con la que los discípulos contestan a la constatación que Jesús hace sobre el estado de cansancio y hambre de la multitud. Los discípulos aún no aceptan el creciente número de simpatizantes de Jesús y, para ellos lo más sencillo es despacharlos y que cada quien se arregle como pueda. La respuesta de Jesús es dar de lo poco que tiene el grupo para así propiciar la solidaridad entre todos. – Hoy enfrentamos en nuestras comunidades cristianas una realidad semejante. Nos aferramos a las necesidades y limitaciones internas y no nos damos cuenta de que el único camino para salir de esa situación es ir hacia los demás, hacia la multitud hambrienta y necesitada, sea de medios de subsistencia o bien de orientaciones para dar sentido a su existencia. La comunidad cristiana crece en la medida en que responde a las necesidades de su realidad social y cultural. Debemos medir nuestras fuerzas por las posibilidades del evangelio y no por nuestras propias limitaciones.


ORACIÓN
Señor, que no hayan obstáculos entre tu y yo, y que nada me aleje de mis hermanos. En tu amor soy fuerte y más que vencedor, hoy todo es posible con tu intervención. Que en este nuevo día mi esfuerzo, sumado a otros esfuerzos, se multipliquen y sirvan de ayuda a mis hermanos mas necesitados. Amén

DOMINGO, 12 DE FEBRERO DE 2012

“DIOS SIEMPRE QUIERE SANARNOS”


Las lecturas del día de hoy nos permiten descubrir la diferencia entre frenar el mal y darle la victoria al bien. Lo que quería la Ley de Moisés, y que aparece en el Libro Levítico, era frenar el mal, ponerle un límite al poder del mal, aislando aquello que se considera peligroso para la sociedad. Es un avance, no es resolver el problema, pero por lo menos es frenarlo. Lo que hace en cambio Jesucristo es darle otro sentido y darle la victoria al bien. Jesús toma a uno que está afectado por ese mal, lo transforma, lo sana, y lo reintegra a la sociedad.

PRIMERA LECTURA
LEVÍTICO 13,1-2.44-46

“EL LEPROSO TENDRÁ SU MORADA FUERA DEL CAMPAMENTO”

El Señor dijo a Moisés y a Aarón: "Cuando alguno tenga una inflamación, una erupción o una mancha en la piel, y se le produzca la lepra, será llevado ante Aarón, el sacerdote, o cualquiera de sus hijos sacerdotes. Se trata de un hombre con lepra: es impuro. El sacerdote lo declarará impuro de lepra en la cabeza. El que haya sido declarado enfermo de lepra andará harapiento y despeinado, con la barba tapada y gritando: "¡Impuro, impuro!" Mientras le dure la afección, seguirá impuro; vivirá solo y tendrá su morada fuera del campamento."

REFLEXIÓN
En la tradición judía como nos lo muestra la primera del libro de Levítico del Antiguo Testamento, la enfermedad era interpretada como una maldición divina, un castigo, una consecuencia del pecado de la persona enferma o de su familia. Porque entonces se la consideraba contagiosa, la lepra común estaba regulada por una rígida normativa que excluía a la persona afectada de la vida social. (Ha durado muchos siglos la falsa creencia de que la lepra fuese tan fácilmente contagiable). El enfermo de lepra era un muerto en vida, y lo peor era que la enfermedad era considerada normalmente incurable. Los sacerdotes tenían la función de examinar las llagas del enfermo, y en caso de diagnosticarlas efectivamente como síntomas de la presencia de lepra, la persona era declarada «impura», con lo que resultaba condenada a salir de la población, a comenzar a vivir en soledad, a malvivir indignamente, gritando por los caminos «¡impuro, impuro!», para evitar encontrarse con personas sanas a las que poder contagiar. En realidad, todo el sistema normativo religioso generaba una permanente exclusión de personas por motivos de sexo, salud, condición social, edad, religión, nacionalidad.

SALMO RESPONSORIAL: 31
R./ Tú eres mi refugio, me rodeas de cantos de liberación.

Dichoso el que está absuelto de su culpa,
a quien le han sepultado su pecado;
dichoso el hombre a quien el Señor
no le apunta el delito. R.

Había pecado, lo reconocí,
no te encubrí mi delito;
propuse: "Confesaré al Señor mi culpa"
y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R.

Alegraos, justos, y gozad con el Señor;
aclamadlo, los de corazón sincero. R.

SEGUNDA LECTURA
1CORINTIOS 10,31-11,1

“SEGUID MI EJEMPLO, COMO YO SIGO EL DE CRISTO”

Hermanos: Cuando comáis o bebáis o hagáis cualquier otra cosa, hacedlo todo para gloria de Dios. No deis motivo de escándalo a los judíos, ni a los griegos, ni a la Iglesia de Dios, como yo, por mi parte, procuro contentar en todo a todos, no buscando mi propio bien, sino el de la mayoría, para que se salven. Seguid mi ejemplo, como yo sigo el de Cristo.

REFLEXIÓN
La segunda lectura, que sigue, es un camino independiente frente a la relación entre la primera y la tercera, es un bello texto de Pablo que habla de la integralidad de la espiritualidad. La espiritualidad no es tan «espiritual»; de alguna manera es también «material». Hay que recordar que la palabra «espiritualidad» es una palabra desafortunada. Tenemos que seguir utilizándola por lo muy consagrada que está, pero necesitamos recordar que no podemos aceptar para su sentido etimológico. No queremos ser «espirituales» si ello significara quedarnos con el espíritu y despreciar el cuerpo o la materia.

Pablo está en esa línea: «ya sea que comáis o que bebáis o que hagáis cualquier otra cosa...». No sólo las actividades tradicionalmente tenidas como religiosas, o espirituales, tienen que ver con la espiritualidad, sino también actividades muy materiales, preocupaciones muy humanas, como el comer y beber, o cualquier otra actividad de nuestra vida, pueden, deben ser integradas en el campo de nuestra espiritualidad (que ya no resultará pues «solamente espiritual»). Nuestra vida de fe puede y debe santificar toda nuestra vida humana, en todas sus preocupaciones y trabajos, no sólo cuando tenemos la suerte de poder dedicar nuestro tiempo a actividades «estrictamente religiosas», como podrían ser la oración o el culto.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 1,40-45

“LA LEPRA SE LE QUITÓ Y QUEDÓ LIMPIO”

En aquel tiempo, se acercó a Jesús un leproso, suplicándole de rodillas: "Si quieres, puedes limpiarme." Sintiendo lástima, extendió la mano y lo tocó, diciendo: "Quiero: queda limpio." La lepra se le quitó inmediatamente, y quedó limpio. Él lo despidió, encargándole severamente: "No se lo digas a nadie; pero, para que conste, ve a presentarte al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que mandó Moisés." Pero, cuando se fue, empezó a divulgar el hecho con grandes ponderaciones, de modo que Jesús ya no podía entrar abiertamente en ningún pueblo; se quedaba fuera, en descampado; y aun así acudían a él de todas partes.

REFLEXIÓN
Este hombre enfermo de lepra, seguramente cansado de su condición, se acerca a Jesús y se arrodilla, poniendo en él toda su confianza: «si quieres, puedes limpiarme». Jesús, se compadece y le toca, rompiendo no sólo una costumbre, sino una norma religiosa sumamente rígida. Jesús se salta la ley que margina y que excluye a la persona. Jesús pone a la persona por encima de la ley, incluso de la ley religiosa. La religión de Jesús no está contra la vida, sino, al contrario: pone en el centro la vida de las personas. La vida y las personas por encima de la ley, no al revés.

Jesús le pide silencio, y le envía al sacerdote como signo de su reinclusión en la dinámica social, «para que sirva de testimonio» de que Dios desea y puede actuar aun por encima de las normas, recuperando la vida y la dignidad de sus hijos e hijas. Pero este hombre no hace caso de tal secreto, rompe el silencio, y se pone a pregonar con entusiasmo su experiencia de liberación. No parece servirse de la mediación del sacerdote o de la institución del templo, sino que se auto-incluye y toma la decisión autónoma de divulgar la Buena Noticia. Esto hace que Jesús no pueda ya presentarse en público en las ciudades sino en los lugares apartados, pues al asumir la causa de los excluidos, Jesús se convierte en un excluido más. Sin embargo, allí a las afueras, está brotando la nueva vida y quienes logran descubrirlo van también allí a buscar a Jesús.

Es una página recurrente en los evangelios: Jesús cura, sana a los enfermos. No sólo predica, sino que cura («no es lo mismo predicar que dar trigo», dice el refrán). Palabra y hechos. Decir y hacer. Anuncio y construcción. Teoría y practica. Liberación integral: espiritual y corporal. Y ésa es su religión: el amor, el amor liberador, por encima de toda ley que aliene. La ley consiste precisamente en amar y liberar, por encima de todo.

ORACIÓN
Gracias, Buen Señor, porque nos amas y nos acoges, a pesar de nuestra miseria. Entregaste tu vida por nosotros aun sabiendo que éramos injustos; pero nos amaste hasta el extremo. Si hoy quieres sananos Señor y enséñanos a vivir como tu y a ser capaces de mantener un corazón abierto al dolor y las necesidades de los demás, para que en nosotros ellos entiendan que tu los recibes y los amas. Amén

LUNES, 13 DE FEBRERO DE 2012

“SABER PEDIR ES SABER VIVIR PARA DIOS”


PRIMERA LECTURA
SANTIAGO 1,1-11

“AL PONERSE A PRUEBA VUESTRA FE, OS DARÁ CONSTANCIA, Y SERÉIS PERFECTOS E ÍNTEGROS”

Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo, saluda a las doce tribus dispersas. Hermanos míos, teneos por muy dichosos cuando os veáis asediados por toda clase de pruebas. Sabed que, al ponerse a prueba vuestra fe, os dará constancia. Y si la constancia llega hasta el final, seréis perfectos e íntegros, sin falta alguna.

En caso de que alguno de vosotros se vea falto de sabiduría, que se la pida a Dios. Dios da generosamente y sin echar en cara, y él se la dará. Pero tiene que pedir con fe, sin titubear lo más mínimo, porque quien titubea se parece al oleaje del mar sacudido y agitado por el viento. Un individuo así no se piense que va a recibir nada del Señor; no sabe lo que quiere y no sigue rumbo fijo.

El hermano de condición humilde esté orgulloso de su alta dignidad, y el rico, de su pobre condición, pues pasará como la flor del campo: sale el sol y con su ardor seca la hierba, cae la flor, y su bello aspecto perece; así se marchitará también el rico en sus empresas.

REFLEXIÓN
Esta Carta de Santiago puede considerarse como una colección de enseñanzas sobre diversos aspectos prácticos de la vida cristiana.
Es el escrito del Nuevo Testamento que muestra mayor semejanza con las enseñanzas de los sabios del Antiguo Testamento, la así llamada literatura sapiencial. El tema de la sabiduría aparece en varios lugares de la carta. Esta sabiduría, como se entiende en la Biblia, no se refiere tanto a los conocimientos científicos sobre el mundo, ni es principalmente una teoría sobre Dios o sobre el hombre, sino que es saber ordenar toda la vida humana según la voluntad de Dios, es el arte de saber vivir rectamente.
La carta hace referencia a Jesucristo, pero no desarrolla otros temas característicos de la predicación cristiana primitiva, como el de su muerte y resurrección. Se insiste, en cambio, en la necesidad de poner en práctica el mensaje recibido, en mostrar la fe con los hechos, en soportar las pruebas, y en dominar la lengua.


SALMO RESPONSORIAL: 118
R. / Cuando me alcance tu compasión, viviré, Señor.

Antes de sufrir, yo andaba extraviado,
pero ahora me ajusto a tu promesa. R.

Tú eres bueno y haces el bien;
instrúyeme en tus leyes. R.

Me estuvo bien el sufrir,
así aprendí tus mandamientos. R.

Más estimo yo los preceptos de tu boca
que miles de monedas de oro y plata. R.

Reconozco, Señor, que tus mandamientos son justos,
que con razón me hiciste sufrir. R.

Que tu bondad me consuele,
según la promesa hecha a tu siervo. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 8,11-13

¿POR QUÉ ESTA GENERACIÓN RECLAMA UN SIGNO?

En aquel tiempo, se presentaron los fariseos y se pusieron a discutir con Jesús; para ponerlo a prueba, le pidieron un signo del cielo. Jesús dio un profundo suspiro y dijo: "¿Por qué esta generación reclama un signo? Os aseguro que no se le dará un signo a esta generación." Los dejó, se embarcó de nuevo y se fue a la otra orilla.

REFLEXIÓN
Cada época tiene sus propias formas de legitimación, es decir, de hacer aceptable o creíble una práctica o una prédica. En nuestra época, dominada por los medios masivos de información, la credibilidad se mide por la cantidad de televidentes o de usuarios; en la época de Jesús la credibilidad se medía por los milagros, signos o prodigios que podía realizar el predicador o profeta, o por el prestigio que alcanzaba como maestro de la Ley. Los opositores de Jesús le piden un signo para cuestionar su credibilidad como predicador y maestro, pero Jesús no se somete a sus criterios. Para Jesús el mayor crédito viene de Dios y de las personas que han recibido el beneficio de su acción. De este modo Jesús evita caer en la trampa de sus opositores, que intentan someterlo imponiéndole criterios de credibilidad o prestigio. Nosotros también podemos caer en la trampa de creer que nuestra propuesta cristiana se fortalece si tenemos mayor acogida entre los televidentes o más descargas de las páginas religiosas en internet. Pero la única credibilidad a la que debemos aspirar como seguidores del Señor, es la coherencia con las exigencias de la misión evangelizadora que Jesús nos ha encomendado.


ORACIÓN
Te doy gracias, alabo y bendigo, Buen Señor. Clamo hoy a ti me llenes de tu Espíritu Santo, ilumina mi vida con Él, para que pueda ver las señales de vida que tu colocas en mi camino. Permíteme encontrar tu presencia en la comunidad que ora, se alimenta y va haciendo camino con tu Palabra en el servicio a los necesitados, en el amor y perdón a los demás. Inspírame para que en cada uno de los acontecimientos de mi vida crezca en tu amor. Amén

MARTES, 14 DE FEBRERO DE 2012

“ESCUCHEN Y ATIENDAN AL PROYECTO DE DIOS”



PRIMERA LECTURA
SANTIAGO 1,12-18

“DIOS NO TIENTA A NADIE”


Queridos hermanos: Dichoso el hombre que soporta la prueba, porque, una vez aquilatado, recibirá la corona de la vida que el Señor ha prometido a los que lo aman. Cuando alguien se ve tentado, no diga que Dios lo tienta; Dios no conoce la tentación al mal y él no tienta a nadie. A cada uno le viene la tentación cuando su propio deseo lo arrastra y seduce; el deseo concibe y da a luz el pecado, y el pecado, cuando se comete, engendra muerte. Mis queridos hermanos, no os engañéis.

Todo beneficio y todo don perfecto viene de arriba, del Padre de los astros, en el cual no hay fases ni períodos de sombra. Por propia iniciativa, con la palabra de la verdad, nos engendró, para que seamos como la primicia de sus criaturas.

REFLEXIÓN
La pedagogía del apóstol Santiago es bien conocida por su cierta rudeza. Santiago utiliza extensamente un método judío de argumentación, que es la diatriba. El propósito con este método es desarmar toda posible objeción contraria a la tesis que se quiere plantear. El que habla usa un estilo demoledor no porque quiera demoler a sus opositores sino porque quiere mostrar de una vez por todas que no hay excusas ni impedimentos para asumir con toda el alma lo que se está predicando.
Santiago nos habla de tentaciones, pruebas, autoengaños…. Es fácil buscar excusas y decir cosas como: "Dios me puso una prueba tan difícil que no la pude soportar." Y entrar luego a quejarnos de la dureza de la vida o cobijarnos todos en la fragilidad humana. Pero Santiago nos quiere ante todo honestos: no le echemos la culpa a Dios; no nos disculpemos tan fácilmente; vayamos al centro y raíz real de nuestras faltas. Según este apóstol, esa causa está en lo que deseamos; en nuestros deseos y nuestros actos.
Pero reconocer el origen de nuestros males no es suficiente si no atendemos también al origen de nuestros bienes. Por eso él escribe: "Todo regalo valioso y todo don perfecto viene de arriba, del Padre de las luces, en quien no hay cambios ni períodos de sombra." De este modo, el capricho de nuestros deseos queda vencido por la libre voluntad del que nos rescata de ellos y nos envuelve con su amor redentor.


SALMO RESPONSORIAL: 93
R. / Dichoso el hombre a quien tú educas, Señor.

Dichoso el hombre a quien tú educas,
al que enseñas tu ley,
dándole descanso tras los años duros. R.

Porque el Señor no rechaza a su pueblo,
ni abandona su heredad:
el justo obtendrá su derecho,
y un porvenir los rectos de corazón. R.

Cuando me parece que voy a tropezar,
tu misericordia, Señor, me sostiene;
cuando se multiplican mis preocupaciones,
tus consuelos son mi delicia. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 8,14-21


“TENED CUIDADO CON LA LEVADURA DE LOS FARISEOS Y CON LA DE HERODES”

En aquel tiempo, a los discípulos se les olvidó llevar pan, y no tenían más que un pan en la barca. Jesús les recomendó: "Tened cuidado con la levadura de los fariseos y con la de Herodes." Ellos comentaban: "Lo dice porque no tenemos pan." Dándose cuenta, les dijo Jesús: "¿Por qué comentáis que no tenéis pan? ¿No acabáis de entender? ¿Tan torpes sois? ¿Para qué os sirven los ojos si no veis, y los oídos si no oís? A ver, ¿cuántos cestos de sobras recogisteis cuando repartí cinco panes entre cinco mil? ¿Os acordáis?" Ellos contestaron: "Doce." "¿Y cuántas canastas de sobras recogisteis cuando repartí siete entre cuatro mil?" Le respondieron: "Siete." Él les dijo: "¿Y no acabáis de entender?"

REFLEXIÓN
La barca simboliza a la comunidad reunida que se desplaza a realizar una misión. En ese momento no hay cabida para otra preocupación que no sea los preparativos inmediatos de la predicación. Sin embargo surgen dos preocupaciones que contradicen el aprendizaje y la trayectoria del grupo de discípulos. Primero discuten porque sólo tiene un pan para todos, a pesar de que poco antes Jesús había hecho alcanzar el pan para la muchedumbre. Segundo, no escuchan a Jesús que les advierte sobre el peligro de asumir la religiosidad inflacionaria y nacionalista de los fariseos y herodianos, simbolizada en la levadura. En compañía de Jesús un pan es más que suficiente para suplir las necesidades inmediatas de la comunidad; la multiplicación de los panes comienza cuando todos aprenden a ver la comida como un recurso de apoyo para la misión y no como un fin en sí mismo. En compañía de Jesús la misión adquiere un carácter humanista y universal. Aunque las urgencias de los pobres en Israel sean apremiantes, la comunidad de seguidores está llamada a traspasar las fronteras nacionales, religiosas, institucionales y culturales. Jesús va al encuentro de otras personas necesitadas de su mensaje de esperanza y de su presencia sanadora.


ORACIÓN
Padre misericordioso, no quiero que pases por mi vida sin dejar huella. Quiero que hoy habites mi ser entero. Abre mis ojos, Señor, quiero verte; abre mi oídos para poder escucharte, abre mi corazón para que pueda experimentar y comprender tu amor que me libera. Amén

MIÉRCOLES, 15 DE FEBRERO DE 2012

“LA PALABRA DE DIOS ES GUÍA Y LUZ PARA LA VIDA”



PRIMERA LECTURA
SANTIAGO1,19-27



“LLEVAD A LA PRÁCTICA LA PALABRA Y NO OS LIMITEIS A ESCUCHARLA”

Tened esto presente, mis queridos hermanos: sed todos prontos para escuchar, lentos para hablar y lentos para la ira. Porque la ira del hombre no produce la justicia que Dios quiere. Por lo tanto, eliminad toda suciedad y esa maldad que os sobra y aceptad dócilmente la palabra que ha sido plantada y es capaz de salvaros. Llevadla a la práctica y no os limitéis a escucharla, engañándoos a vosotros mismos, pues quien escucha la palabra y no la pone en práctica se parece a aquel que se miraba la cara en el espejo y, apenas se miraba, daba media vuelta y se olvidaba de cómo era. Pero el que se concentra en la ley perfecta, la de la libertad, y es constante, no para oír y olvidarse, sino para ponerla por obra, éste será dichoso al practicarla.

Hay quien se cree religioso y no tiene a raya su lengua; pero se engaña, su religión es vacía. La religión pura e intachable a los ojos de Dios Padre es ésta: visitar huérfanos y viudas en sus tribulaciones y no mancharse las manos con este mundo.


REFLEXIÓN
Sobre la prudencia en el uso de las palabras nos habla el apóstol Santiago el día de hoy. Puede ser interesante presentar una colección de frases sobre este tema, porque bien se ve que todo el que ha buscado sabiduría o esta en la búsqueda seria de la santidad, ha de pasar por la escuela de aprender a callar.

Frases como estas: “Nada hay en la tierra más difícil de sostener que la boca”. “Cuando hables, procura que tus palabras sean mejores que el silencio”. “Tenemos dos orejas y una sola boca, justamente para escuchar más y hablar menos”, nos invitan a seguir la exhortación de cuidar nuestra lengua y aprender a callar en el momento oportuno.
Otra invitación también es a hacernos VERBO y no SUSTANTIVO, a escuchar la Palabra pero que esta se haga vida en nosotros y seamos un fiel reflejo de su paso en nuestras vidas.

SALMO RESPONSORIAL: 14
R. / ¿Quién puede habitar en tu monte santo, Señor?

El que procede honradamente
y practica la justicia,
el que tiene intenciones leales
y no calumnia con su lengua. R.

El que no hace mal a su prójimo
ni difama al vecino, / el que considera despreciable al impío
y honra a los que temen al Señor. R.

El que no presta dinero a usura
ni acepta soborno contra el inocente.
El que así obra nunca fallará. R.

LECTURA DEL EVANGELIO
MARCOS 8,22-26

“EL CIEGO ESTABA CURADO Y VEÍA TODO CON CLARIDAD”


En aquel tiempo, Jesús y los discípulos llegaron a Betsaida. Le trajeron un ciego, pidiéndole que lo tocase. Él lo sacó de la aldea, llevándolo de la mano, le untó saliva en los ojos, le impuso las manos y le preguntó: "¿Ves algo?" Empezó a distinguir y dijo: "Veo hombres; me parecen árboles, pero andan." Le puso otra vez las manos en los ojos; el hombre miró: estaba curado y veía con toda claridad. Jesús lo mandó a casa, diciéndole: "No entres siquiera en la aldea."

REFLEXIÓN
El ciego del evangelio necesita tres pasos para superar su ceguera. El primero es salir de la ciudad, donde ni veía ni era visto; sólo era una boca más que alimentar a expensas de la caridad pública. Jesús lo saca de un centro de marginación y lo conduce a una periferia desde donde puede recomenzar. El segundo, al comenzar a recuperar la luz de los ojos sólo es capaz de reconocer a los demás como parte del entorno natural; es decir, no los ve como seres humanos. El tercero y último paso lo conduce a ver con claridad y bien lejos, es decir, a entrar en el ámbito de Jesús en el que el horizonte humano supera la lógica de la exclusión y la supremacía del centro urbano. Por eso, cuando este hombre afina la mirada, es enviado a casa sin volver a la ciudad. Volver al centro urbano sería regresar a su antigua condición. – Hoy afrontamos un desafío similar. Hemos perdido la capacidad de reconocer a los demás como seres humanos y sólo los reconocemos en sus roles sociales como jefes, madres, profesionales. Pero, lo más importante es despegarnos del molde que nos impone el mundo, su cultura, su visión, su egoísmo y consumismo y reconocernos como humanos y hacer de nuestro caminar un mundo diferente y más humano.

ORACIÓN
Padre de bondad, toca mis ojos para que pueda ver con claridad tu proyecto de vida sobre mí. No permitas que la inmediatez desdibuje tu rostro o el de mis hermanos y los vea borrosos. Dame hoy tu luz. Pon tu mano sobre mi vida para que pueda ir más allá de las apariencias y descubra lo que tú quieres que yo vea. Amén